Exfoliación (mineralogía)
La exfoliación es la tendencia de los materiales cristalinos para dividirse a lo largo de planos estructurales cristalográficos definidos (ver índices de Miller). Estos planos de debilidad relativa son el resultado de los lugares regulares de los átomos e iones en el cristal (ver Redes de Bravais), que crean fracturas de superficies planas repetidas que son visibles tanto en el microscopio como a simple vista.Según algunos autores la exfoliación no es exclusiva de materiales cristalinos. El proceso de exfoliación produce la separación, en una roca grande, de placas curvas a manera de costras. Este proceso origina unas colinas grandes abovedadas, llamadas domos de exfoliación. Estas estructuras de exfoliación se forman de la siguiente manera: a medida que la erosión descubre la superficie de la roca, se reduce la presión hacia abajo sobre la roca subyacente y de esta manera la masa de roca que remanente, comienza a expandirse hacia arriba, desarrollando en el macizo rocoso líneas de fractura o planos de separación llamados juntas; éstos forman curvas amplias cercanamente paralelas a la superficie de la roca, la distancia entre ellas es sólo de unos cuantos centímetros, pero aumenta a uno o varios metros a medida que se profundiza en la roca. Bajo ciertas condiciones, una tras otra de esas hojas curvas, se descascaran y se desprenden de la masa de roca. Finalmente, se desarrolla un cerro o una colina de roca, con superficie curva, de tipo dómico. En consecuencia, la roca maciza se expande a medida que las presiones confinantes se reducen, y este ligero grado de expansión puede bastar a la iniciación del proceso de exfoliación.