El Movimiento de Cursillos de Cristiandad (MCC) es un movimiento eclesial de difusión mundial que actúa en el seno de la Iglesia católica. Fue gestándose en España entre 1940 y 1949 e iniciado con la celebración del llamado ""primer cursillo"" del 7 al 10 de enero de 1949 en el Monasterio de San Honorato, Mallorca. Los estatutos del movimiento fueron aprobados solemnemente por Pablo VI el 14 de diciembre de 1963 cuando, además, nombró a san Pablo apóstol como su patrón. Poco después se celebró la primera Ultreya (nombre que dan a sus reuniones) mundial en Roma (1966), con 4.000 participantes, en señal de agradecimiento y comunión con el Papa.