Placentofagia
Placentofagia es el término usado para describir el acto, frecuente entre los mamíferos, de comer la placenta después del parto.La placenta contiene altos niveles de prostaglandina, que estimula la involución del útero. Asimismo contiene pequeñas cantidades de oxitocina, que calma el estrés del parto y causa que los músculos alrededor de las células mamarias se contraigan para sacar la leche.También se piensa que la placentofagia ocurre naturalmente con el objetivo de no dejar ningún rastro del nacimiento de la cría, en defensa de los depredadores; sin embargo, el fluido amniótico no ingerido por la madre parece desacreditar esta teoría. La mayoría de mamíferos placentarios practican la placentofagia, incluyendo, sorprendentemente, los herbívoros. Los pinnípedos y los cetáceos constituyen excepciones, y también el camello. Se ha observado la placentofagia en insectívoros, roedores, quirópteros, lagomorfos, carnívoros, perisodáctilos, artiodáctilos (con el camello como excepción notable) y en primates. Los marsupiales no pueden efectuar la placentofagia, pero lamen vigorosamente los fluidos de parto cuando son excretados.La ventaja más importante de la placentofagia, según hallazgos recientes, es que la placenta y el líquido amniótico contienen una molécula (""Placental Opioid-Enhancing Factor"") que modifica la actividad de opioides endógenos de una manera tal que produce un realce de la reducción natural en el dolor que ocurre poco antes y durante el parto.(El POEF, Placental Opioid Enhancing Factor, fue identificado en 1986 por el psicobiólogo Mark Kristal , modifica la actividad opioide endógena)