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LA PLACENTA Anatomía La placenta es un órgano carnoso rojo-azulado, redondo y chato. Ella, realiza para el embrión y el feto; lo que los riñones, pulmones e intestinos hacen por nosotros después del nacimiento. La placenta está formada por tejido derivado tanto de la mamá como del bebé, que yuxtaponen, pero no mezclan, los torrentes de sangre de la mamá y el niño. Debido a que los torrentes de sangre materna y fetal están tan cercanos, los nutrientes y el oxígeno de la sangre en las arterias uterinas de la mamá pueden moverse a la sangre fetal, que ha circulado a través del bebé y se vació de estas sustancias. Otra parte del proceso es el movimiento de dióxido de carbono y otros productos de desecho de la sangre del bebé hacia la circulación materna. La placenta tiene dos superficies: 1) La superficie materna es el lado de apariencia áspera, carnosa y roja, y es el lado adherido a la pared del útero durante el embarazo. 2) El lado fetal está cubierto con una membrana y es blanco, suave, y brillante. La cubierta membranosa en realidad son dos membranas, el corion y el amnios; y éstas continúan sobrepasando el borde de la placenta para formar la bolsa de las aguas que contiene al bebé y al líquido amniótico. El cordón umbilical emerge de este lado de la placenta (lado fetal) La placenta tiene otras funciones además de ser un lugar de intercambio de nutrientes y gases; también sintetiza varios nutrientes para el bebé y secreta varias hormonas del embarazo. Escuela Nueve Lunas® Posibles ubicaciones Durante el embarazo, la placenta se desplaza a medida que el útero se estira y crece. A comienzos de embarazo, es muy común que la placenta esté en la parte baja en el útero, pero a medida que el embarazo continúa, la placenta se desplaza hacia la parte superior de éste. Hacia el tercer trimestre, la placenta debe estar cerca de la parte superior del útero, de manera que el cuello uterino esté despejado para el parto. Algunas veces, la placenta cubre parcial o totalmente el cuello uterino, lo cual se denomina placenta previa. Existen diferentes formas de placenta previa: Marginal: la placenta está al lado del cuello uterino pero no cubre la abertura. Parcial: la placenta cubre parte de la abertura cervical. Completa: la placenta cubre toda la abertura cervical. La placenta previa ocurre en 1 de cada 200 embarazos y es más común en mujeres que tienen: Un útero anormalmente formado Muchos embarazos previos Embarazos múltiples (gemelos, trillizos, etc.) Cicatrización del revestimiento del útero debido a antecedentes de embarazo anterior, cesárea, cirugía o aborto Las mujeres que fuman o tienen niños a una edad avanzada también pueden tener un mayor riesgo. El cordón umbilical El cordón umbilical conecta con la placenta al bebé. Está relleno con una sustancia parecida a la gelatina, blanco-grisácea que protege a la vena umbilical y a las dos arterias de ser comprimidas. Usualmente el cordón mide alrededor de 50 cm de largo y 2 cm de ancho. Escuela Nueve Lunas® Las membranas Hay dos membranas fetales: el amnios, la membrana interna más fuerte que secreta el líquido amniótico; y el corion, la membrana más externa que reviste la cavidad uterina. El corion continúa desde el borde de la placenta. Las dos membranas se encuentran una al lado de la otra y pueden ser separadas fácilmente una de la otra. El líquido amniótico Usualmente la cantidad de líquido amniótico es de uno a un litro y medio al término. Este líquido es secretado por la membrana interna de la bolsa de las aguas, el amnios. Este líquido funciona como un buen amortiguador para el bebé, permitiéndole al bebé moverse con libertad, ayuda al bebé a mantener su temperatura y previene que las membranas se peguen a su piel. Marisa Drexler Educadora pre y post natal|Doula|Asesora en LM Escuela Nueve Lunas®