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TEATRO PARA LA JUVENTUD
EN AUSTRALIA
Ün resumen para información del
mundo internacional
Por Michael FitzGerald
Existe en el teatro Australiano un fuerte movimiento que, tanto para la
juventud como para los adultos, tiende a presentar un trabajo original y
propio de amplio sentido comunitario.
En el teatro juvenil, especialmente en el T.I.E (Teatro en la Educación) y
en los teatros para la juventud, hay un intento de favorecer tópicos contemporáneos, empleando para ello temas que permitan una abierta y honrada exposición de los problemas, así como la creación de ideas que conduzcan a opciones que permitan una positiva resolución de los mismos.
A pesar de los obstáculos existentes, el movimiento de teatro para la
infancia y la juventud en Australia es cada vez más fuerte. Esto lo demuestra la cantidad y calidad de su trabajo, y su creciente aceptación comunitaria. Estos logros se los debemos a un buen número de individualidades
artísticas y administrativas de gran talento y excepcional valía.
La población total de Australia alcanza los 15,4 millones, de los cuales 6,3
millones o el 41% tienen menos de 25 años.
Estos jóvenes se enfrentan con los problemas universales existentes en
todas las sociedades modernas, urbanas e industrializadas, especialmente
aquellas que forman parte del mundo occidental. Entre otros, estos problemas incluyen el desempleo, el abuso de las drogas y las rupturas
familiares.
En múltiples ocasiones, el sistema educativo parece incapaz y, además no
parece disponer de los medios suficientes para preparar a la gente joven a
vivir esta ultima parte del siglo XX.
La juventud permanece expuesta a la depresión o a la desilusión provocadas por todo lo anteriormente mencionado y lo que más les afecta son
temas candentes como el racismo, la amenaza nuclear, la enajenación
social, y la degradación o deterioro de nuestra biosfera.
Los teatros infantiles y juveniles han sabido responder a este reto. Han
dedicado también una creciente atención al trabajo de los jóvenes autores,
especialmente aquellos de edades escolares.
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Las tendencias más significativas de este nuevo trabajo incluyen una
especial atención a temas y problemas multiculturales, y una creciente
toma de conciencia en cuanto a la posible contribución de las artes indígenas; a la música, al sonido y al movimiento, así como temáticamente.
Una tendencia que existe en Australia de autorizar y facultar a los artistas para que trabajen en todos los distintos aspectos de los proyectos de
teatro juvenil (dirección, diseño, redacción, coreografía y música) es algo
que está trayendo a este campo destrezas y habilidades de u n alto nivel de
desarrollo, permitiendo al mismo tiempo el desarrollo de nuevos trabajos y
nuevos talentos.
La aceptación casi total, por parte de la gente joven, de los medios de
comunicación de masas, electrónicos, y de otra índole, y todo ello con preferencia frente al teatro, es también algo que pone a prueba los talentos de
los grupos teatrales.
Uno de los rasgos peculiares del teatro para la juventud en Australia es el
predominio de la forma del teatro-en-la-educación,
Este trabajo circula ampliamente por las áreas metropolitanas y rurales
(sobre todo en los colegios), el exponente más típico de su trabajo estando
representado por producciones sobre temas relacionados con las experiencias, las necesidades y el desarrollo de la gente joven.
También es de destacar el movimiento cada vez más importante y creativo que está teniendo el teatro juvenil. Este tipo de trabajo lo realiza gente
joven, orientados y dirigidos por profesionales, y son también estos mismos
jóvenes los que asumen la parte creativa.
Contrastando con las experiencias Europea y Asiática, existe en Australia una escasez de teatro infantil, en lo que se refiere a artistas profesionales que interpreten, dentro de este mundo teatral, obras clásicas, tradicionales o de vanguardia.
En estos momentos, sólo hay en el país uno o dos teatros infantiles profesionales enteramente dedicados a la infancia y a la juventud (en abierta
contradicción con la proliferación de pantomimas pro/am que surgen
durante cada una de las vacaciones estivales). Sin embargo, va en aumento
el número de importantes compañías de teatro que incluyen, en sus repertorios, producciones de teatro infantil.
Creciente atención e interés por parte del gobierno
La verdad es que, en Australia, es imposible que, sin recibir subvención
gubernamental alguna, pueda llegar a subsistir una compañía de teatro
para la juventud. Esta subvención puede aplicarse tanto a gastos operativos de tipo general como a proyectos especiales.
Cada uno de los ocho Estados y Gobiernos Territoriales tiene sus propios
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organismos artísticos, educativos y de otra índole relacionada con la juventud, y son esos organismos los que pueden suministrar fondos y-recursos a
las compañías profesionales.
Paralelamente a estos últimos, y a un nivel Federal, surgen otras aportaciones por parte del Consejo de Australia, de la Comisión Escolar, los
Ministerios de la Juventud y de Asuntos Exteriores, el Ministerio de Estado Especial, etc.
El Theatre Board del Consejo de Australia asigna alrededor de una décima
parte de su presupueto total de $11 millones al teatro para la juventud.
Esta ha sido, hasta la fecha, la principal fuente de ayudas para el mantenimiento y desarrollo del teatro infantil y juvenil en este país.
Hay, en particular, dos Estados, Australia del Sur y Tasmania, cuyas políticas, recursos y financiación, en lo que a teatro infantil se refiere, son muy
progresistas, los de los demás Estados son menos.
A pesar de lo que dependen de las subvenciones gubernamentales, las
compañías también se apoyan fuertemente, para poder continuar con sus
operaciones, en las recaudaciones de taquilla.
Las precarias situaciones económicas de las compañías las obligan
muchas veces a economizar en materia de sueldos, preparación y producción. Sus decorados, vestuarios y accesorios son, con frecuencia, mínimos,
el número de actores por debajo de la media, y los programas de entrenamiento y preparación inadecuados.
La necesidad de recaudar dinero en taquilla repercute considerablemente
en el trabajo de las compañías; puede significar que una compañía se vea
en la imposibilidad de poder permitirse la visita a un pequeño colegio, o a
un sector o área que sea pobre. También puede significar que una compañía tenga que interpretar ante un público demasiado numeroso, reduciendo con ello la efectividad de su representación. También puede verse la
compañía obligada a interrumpir su período de ensayos para prolongar sus
períodos de representación.
A veces el resultado final parece excelente, pero la escasez de ayudas que
recibe el teatro infantil tiene como resultado el hecho de que sólo alrededor
de la sexta parte de la población escolar pueda disfrutar de la actuación de
compañías subvencionadas.
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