Download FENIL rechaza el impuesto sobre azucaradas en los lácteos

FENIL rechaza el impuesto sobre azucaradas
en los lácteos
Afirma que “incentiva a reducir el
consumo” de estos productos y
recuerda que eso es arriesgado
para la salud pública
Afirma que reducirá el consumo de estos alimentos
La Federación Nacional de Industrias Lácteas (FENIL) considera que el impuesto sobre las
bebidas azucaradas “no debe aplicarse a los lácteos“, ya que “incentiva a reducir el
consumo de un alimento fundamental en la dieta” de los ciudadanos.
Así lo manifiesta la patronal en un comunicado en el que precisa que “estas bebidas no
deberían estar sometidas a ningún tipo de gravamen“, saliendo así al paso de la
aprobación de la Ley de acompañamiento de los presupuestos de la Generalitat en el
Parlament catalán.
En la misma, se incluye un impuesto que se empezará a recaudar a partir del próximo 1 de
mayo, y que afecta a las bebidas azucaradas, entre las que se encuentran las leches
endulzadas, batidos de base láctea y bebidas de leche con zumo de fruta.
Riesgos para la salud
Por tanto, la FENIL manifiesta su “disconformidad” con esta medida que “incentiva a
reducir el consumo de la leche y los productos lácteos“. Y, a este respecto, recuerda
que reducir la ingesta de estos productos “puede tener como consecuencia riesgos
importantes” para la salud pública.
Según esta organización, el nuevo gravamen “no solo dificultaría el acceso de la
población a estos alimentos, sino que puede generar una actitud preventiva hacia
los mismos, con la consiguiente multiplicación de enfermedades asociadas“, entre las
que citó la osteoporosis.
Poco azúcar en los lácteos
A este respecto, aduce que “la contribución de la leche y los lácteos en el consumo de
azúcar añadido es baja” y descarta que el consumo de estos productos sea la causa de la
obesidad en niños y adolescentes. Por contra, resalta sus valores nutricionales como
alimentos.
Finalmente, FENIL señala que la leche y los productos lácteos “contienen azúcares
naturalmente presentes como la lactosa, a los que no se debería aplicar ningún tipo de
gravamen”. Esta patronal integra a 60 empresas que representan más del 95% de la
producción nacional de lácteos.