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TEORÍA DE LAS TRES SUSTANCIAS.
Para encontrar una verdad evidente, principio de su filosofía, Descartes ha tenido que dudar
de todo, y así, mediante la duda metódica ha encontrado la primera verdad evidente: ‘Pienso, luego
soy’ Es decir, soy un ser pensante, una cosa, una sustancia que piensa, res cogitans (Sustancia=una
cosa que no necesita de nada para subsistir) Esa es la primera realidad que constituye la realidad, la
sustancia pensante.
He descubierto con toda certeza que soy algo que piensa y mientras pienso tengo ideas, esas
ideas pueden ser de varias clases:
 Innatas: Son las ideas que provienen de la propia razón
 Adventicias: Son las que me vienen del exterior por los sentidos y la imaginación
 Facticias: las que fabrico por mi cuenta componiéndolas por combinación de las adventicias.
Entre las ideas innatas, las únicas que, en principio acepta Descartes, pues proceden de la razón,
Descartes descubre la idea de perfección. ¿De dónde me ha venido esa idea? No puede provenir de
mí mismo, ya que yo no soy perfecto, puesto que dudo y no puede admitirse que lo más perfecto
proceda de algo que lo es menos. Tampoco puede provenir del exterior. Luego yo no soy lo único
de existe, tiene que haber otro ser del que proceda toda la perfección que hay en mí y haya puesto
en mí esa idea de perfección como innata. Y ese ser perfectísimo tiene que existir, porque si no
existiera ya no sería perfectísimo, le faltaría la perfección de la existencia. No me es posible, dice
Descartes, negar la existencia de Dios, cuando se me ha presentado de manera clara y distinta. Y
ese ser perfectísimo es Dios, res infinita. Y por ser Dios perfectísimo no puede permitir que haya
un ‘genio maligno’ que me equivoque y toda verdad se fundamenta en él. Luego Dios es, para
Descartes, garantía de certeza.
Tengo además ideas de mi cuerpo y de la materia. Puedo concebir los cuerpos sin olor, sin
color, sin peso, pero no los puedo concebir sin división, luego la materia no puede dejar de ser
extensa. Es más Dios no puede permitir que yo, siendo un hombre prudente, de bona mens, que no
me precipito en aceptar los juicios sin haberlos pasado por el tamiz de la razón, tenga en mi mente
ideas de cosas físicas sin que éstas existan –pues Dios es garantía de certeza-. Luego la materia
existe y es como yo la he concebido: res extensa.
Es así como Descartes descubre y describe la realidad, a partir de la mente, por eso se va a caer
en el idealismo: la verdadera realidad son las ideas y la realidad tiene que conformarse a las ideas
que yo tengo de ella. Y es por eso que en la materia sólo puede admitir la extensión, por eso su
pensamiento es mecanicista: la realidad está formada por corpuúsculos en movimiento que se unen
por choques –Demócrito.
Y al distinguir en el hombre entre res cogitans y res extensa y considerar a ambas ‘res’,
sustancias –cosas que subsisten por sí- afirma la total independencia del cuerpo y del alma –
Dualismo ontológico- Y este dualismo va a contribuir a la bifurcación de la ciencia y la filosofía.