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APARICIÓN DE LAS ALTAS CULTURAS
En lugares como éstos existían comunidades de gran importancia. Sus formas
de organización habían hecho posible la agricultura de irrigación, así como la
elaboración de productos variados. Practicaban el comercio con comarcas distantes,
convirtiéndose así en incipientes metrópolis con respecto a las poblaciones aledañas.
Los sumerios y los acadios (habitantes de Mesopotamia) no llegaron a alcanzar una
unificación política sino hasta muchos siglos después.
El paso a la alta cultura en Egipto
También en distintos lugares a lo largo del Nilo comenzaron a acentuarse los grandes cambios tecnológicos. Entre los sitios excavados en la región del delta donde se
muestran tal tipo de transformaciones culturales, pueden mencionarse los de Buto y
Busiris y, en la región central del alto Egipto, los que se conocerían más tarde como
Hierakonpolis y Tinis. Durante la etapa designada por los arqueólogos como horizonte cultural de Nagada, algunos siglos antes del III milenio a. C., los logros alcanzados se asemejan a los que existían en Erech y Ur de Mesopotamia.
La situación geográfica en la que se encuentra Egipto, favoreció para que se
presentara tempranamente la interrelación de las comunidades que existían en las
riberas del río, por lo que primero se formaron numerosos señoríos, los designados
con el nombre de nomos. La necesidad de colaborar en tareas de interés común,
trajo consigo, mucho antes que en Mesopotamia, los procesos de unificación.
En tiempos inmediatos a 3 000 a. C., poco faltaba para que los grandes núcleos
de población antes mencionados se convirtieran en auténticas ciudades. Sin embargo,
es imposible determinar el inicio preciso de las civilizaciones. Éstas habían comenzado a existir con la nueva organización social, económica, política y religiosa, con el
desarrollo tecnológico, con los grandes templos y palacios, mercados, cuarteles,
escuelas, y con las creaciones de un arte cada vez más extraordinario; así como
con las primeras formas de escritura y la elaboración de sistemas calendárteos.
La alta cultura del valle del río Indo
Posteriormente a lo sucedido en Egipto y Mesopotamia, en la región noroeste del
subcontinente de la India, dentro del territorio de lo que hoy conocemos como República de Pakistán, se desarrollaron procesos que guardan gran semejanza con lo
que se acaba de describir.
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CIENCIAS SOCIALES
El contexto geográfico
El valle del río Indo se origina en las nieves de los Himalayas. Con un curso de cerca
de 2 600 km hasta su desembocadura en el mar Arábigo, en él se recogen las aguas
provenientes de un área cercana al millón de km.
El río Indo –cuyo nombre se deriva del sánscrito Shindu que significa “océano”–
ha sido la máxima bendición para las tierras áridas que constituyen la mayor parte
de su cuenca.
Aparición de la alta cultura en el Valle del Indo
En el IV milenio a. C., la porción sur del valle del Indo se encontraba poblada por
comunidades sedentarias de la etapa neolítica. Se han descubierto vestigios de
agricultura, figurillas de cerámica con imágenes de animales domésticos y otras que
dan testimonio del pastoreo. Los hallazgos de juguetes, hechos de barro cocido, que
representan carretas en miniatura, nos afirman que conocían la rueda.
No se han encontrado testimonios sobre lo que aconteció culturalmente, entre
2 500 y 2 000 a. C.
El paso a la alta cultura
Las investigaciones realizadas en numerosos sitios, sobre todo en tres ciudades de
la región del bajo Indo (Mohenjo Daro, Harappa y Chandu Daro), evidencian que la
civilización tuvo rasgos característicos.
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APARICIÓN DE LAS ALTAS CULTURAS
Se piensa que su florecimiento se presentó entre el 2 500 a 2 000 a. C. En dichos
centros queda testimonio de sus templos y palacios, recintos dedicados a funciones
administrativas y mercados.
En Mohenjo Daro, entre otras muchas edificaciones, se descubrió un gran
estanque circundado de pequeñas habitaciones, lo que ha supuesto que esto pudo
destinarse a ritos religiosos de purificación. Además se han encontrado sellos con
inscripciones, pero desafortunadamente el sistema de escritura de esta civilización
no ha podido ser descifrado.
La alta cultura del Hoang-Ho o río Amarillo en China
A principios del II milenio a. C., en el área septentrional de lo que hoy es China, tuvo
nacimiento una alta cultura y civilización.
El contexto geográfico
En la Gran Llanura, situada al noroeste de China, y surcada por el Hoang-Ho, el río
Amarillo, fue el área donde primordialmente se acentuaron los cambios.
Esta corriente, la más importante del septentrión chino, nace en una zona lacustre
situada en tas elevaciones del Tíbet. Su curso tiene un desarrollo de más de 4 000
km hasta llegar a su delta (desembocadura) en el golfo de Po-Hai, frente a la península de Corea, dentro del mar Amarillo. El Hoang-Ho tiene dos grandes curvaturas.
La primera, hacia el sur, lo aparta del gran desierto de Gobi en Mongolia. El río corre
entonces por un largo y profundo cañón. La segunda, hacia el noroeste, lo hace
cruzar la que se conoce como La Gran Llanura. En ese tramo el río tiene un lecho
muy poco profundo, interrumpido a veces por bancos de arena.
Esta región de la Gran Llanura, y buena parte del área que cruza el Hoang-Ho,
tiene como característica peculiar la constitución de la tierra, de color amarillento,
compuesta por partículas de arena y arcilla, mezcladas con caliza, que permite que
el agua penetre en ella como si fuera una esponja. Lo anterior ha ofrecido grandes
posibilidades para la agricultura.
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