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Industria Alimentaria
La industria de la alimentación en general se enfrenta a una serie de dificultades ajenas
a la propia industria que ha de resolver para poder garantizar la calidad y seguridad de
los alimentos a lo largo de toda la cadena productiva.
Para este sector, una cuestión muy importante a destacar es las especiales dificultades
que enfrenta la industria de enlatados, dentro de su punto de producción, del envasado
de productos. Las bacterias y virus existentes dentro de un ambiente de aire
contaminado infecta los productos y el interior de los envases convirtiendo ya el producto
resultante, de alguna manera, en poco saludable antes de que ocurra el proceso de
sellado.
Biokker®, en la industria de la alimentación, es un instrumento imprescindible para la
conservación y mejora a lo largo de todos los procesos, desde la entrada de la materia
prima en los almacenes hasta el consumidor final, aportando valor a su negocio,
rentabilidad y seguridad.
Dentro de estas dificultades a salvar, se encuentran las diferentes contaminaciones
aéreas que pueden alterar los productos alimenticios, como pueden ser:
•  Contaminaciones de origen químico, alteraciones y deterioro organoléptico
•  Alteraciones por microorganismos no patógenos, que causan deterioros, mermas, y
pérdidas económicas
•  Contaminación aérea por agentes patógenos de la más diversa procedencia
(suciedad, materias primas contaminadas, contaminaciones cruzadas en las propias
instalaciones, o directamente provenientes del exterior)
Industria Cárnica
Se trata de un sector muy diverso en productos elaborados y manufacturados que
requiere máximos cuidados higiénicos en todo el proceso de elaboración.
Ciencia y tecnología unidas han dado como resultado el desarrollo de Biokker®, un
sistema con tecnología única que ayuda a mantener y potenciar las condiciones de
asepsia ambiental que requiere la industria actualmente.
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Con Biokker® se evitan contaminaciones cruzadas con las consiguientes mermas de
producto por colonización bacteriana, así como de mohos filamentosos y levaduras por el
contacto con el aire durante el almacenamiento, lo cual se traduce en un ahorro
apreciable de los costos del producto.
Impide la colonización bacteriana, combate los mohos filamentosos,
levaduras y ácaros y elimina los malos olores presentes en
el aire durante el almacenamiento de productos cárnicos.
Biokker® ayuda a mantener y potenciar las condiciones de asepsia
ambiental que requiere la industria cárnica para evitar importantes
mermas de producto.
Cámaras frigoríficas, salas de envasado y procesado, catering, repostería y
panadería
A lo largo del proceso de una cadena productiva dentro del mundo de la alimentación, se
han de tener en cuenta una serie de factores que pueden incidir en la conservación de los
productos que se están elaborando.
Muchas son las barreras que se incorporan en estos procesos (limpieza de manos,
mascarillas, guantes, gorros, control de la humedad, temperatura…).
Las propias exigencias del sector, implican mantener unas condiciones de humedad alta,
y temperatura moderada-alta, ambiente óptimo para la reproducción de mohos y
bacterias.
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En industrias donde se utilizan además, materias primas ricas en nutrientes para elaborar
sus productos, las posibilidades de contaminación son aún mayores, incluso en
temperaturas bajas, de refrigeración, donde son capaces de sobrevivir microorganismos
psicrófilos y psicrotrófos, como la LISTERIA MONOCYTOGENES.
Biokker® en las instalaciones de estos procesos tiene una labor fundamental, diríamos
que imprescindible, ya que evita cualquier tipo de contaminación química o microbiológica
existente en el aire.
Si conservamos las condiciones ambientales con un limitado campo de agentes
contaminantes, estamos disminuyendo el riesgo de contaminación del producto.
Si el producto se envasa en unas condiciones libres de microorganismos, estamos
impidiendo que estos proliferen en el interior del envase, alargando así su vida útil y, por
tanto, ganamos más días, retrasando su fecha de caducidad
Sector Lácteo
Con mucha frecuencia la industria láctea se sitúa en áreas industriales y zonas agrícolas.
En estos ambientes, puede haber agentes contaminantes en el aire exterior que se vean
reflejados en el aire interior de fábrica. En el caso de zonas agrícolas, por el tratamiento
de fertilizantes, pesticidas y demás productos, y en las zonas industriales por el amplio
abanico de agentes externos contaminantes, comenzando por los vapores y humos de
vehículos.
Biokker® es capaz de eliminar todos estos
compuestos orgánicos volátiles (COV),
entre los cuales se encuentra el famoso
PCB (Policloruro de Bifenilo) y las dioxinas,
que pueden afectar a los alimentos a
través del aire.
Es cierto que se utiliza la pasteurización y
otros medios para eliminar cualquier
patógeno, pero principalmente en la fase
de envasado del producto es donde se
genera el riesgo
de contaminación no
controlada entre el aire y el posible agente
contaminante.
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Considerando que los tratamientos térmicos aplicados en la actualidad son seguros y
eficaces, en la mayoría de los casos de contaminaciones tanto por microorganismos
alteradores del producto, como aquellos que son causantes de enfermedades, las
razones las debemos buscar siempre en la presencia de dichos microorganismos, en
ambientes interiores y en cualquier etapa posterior al tratamiento térmico,
fundamentalmente en la etapa de envasado.
Biokker® es un complemento vital para la salud y la seguridad en las centrales lecheras
siendo la forma más segura de mantener un ambiente libre de microorganismos y
compuestos orgánicos volátiles a lo largo de todo el proceso de producción, evitando el
riesgo de contaminación por bacterias, hongos, esporas, levaduras, COVs y para
controlar los olores.
Algunos de los microorganismos más susceptibles de contaminar
los productos lácteos son:
Bacterias lácticas, micrococos, estafilococos, bacterias esporuladas,
enterobacterias, pseudomonas, bacterias psicrotrofas, mohos y levaduras.
Pescados y Marisco
Los principales problemas microbiológicos asociados al pescado y al marisco son su
aprovechamiento y la conservación de su calidad. No obstante, ambos comparten con
otros alimentos comercializados intensamente en todo el mundo, la posibilidad de actuar
como vehiculizadores de microorganismos patógenos.
El empleo del sistema Biokker® como método preventivo en determinados puntos del
proceso y actuando durante todo el mismo, minimizaría el riesgo de contaminación
microbiológica en ese momento en el que el producto, con una carga microbiana baja por
los tratamientos térmicos recibidos, está expuesto al aire exterior.
Bioseguridad Integral, S.L
[email protected]
www.biosintel.com
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