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MARÍA ARÁNZAZU ROBLES SANTANA
LICENCIADA EN HISTORIA. UNIVERSIDAD COMPLUTENSE DE MADRID
DANIEL GARCÍA CASCAJO
FOTOGRAFÍA Y TRADUCCIÓN
RESUMEN: Se han cumplido cuatro años de la muerte de Stieve Fullarton, Brigadista Internacional escocés en la Guerra Civil Española. Su testimonio es imprescindible para recuperar la Memoria
Histórica. Desde muchos rincones del mundo vinieron gentes a luchar altruistamente en defensa de
la República, de la Libertad y la Justicia. Del Reino Unido vinieron 2100; 500 eran escoceses. En el
año 2006 pudimos hablar con uno de los supervivientes. Nos recibió en su habitación de una residencia al norte de Edimburgo, su ciudad natal.
PALABRAS CLAVE: Brigadista, Guerra Civil, República
ABSTRACT: Four years have now passed since Stieve Fullarton´s dead. He was an International Brigader in the Spanish Civil War. His testimony is essential to recovery the Historical Memory. From
everywhere cames people to support the Spanish Republic and ideals as Freedom and Justice. From
United Kingdom came 2100; 500 were Scottish people. In 2006 we could speak with one Scottish
survivor. He was in a Residence in his home town, Edinburgh.
KEY WORDS: Brigader, Civil War, Republic
la mayoría de ciudades españolas y el Rey Alfonso XIII tuviera que abdicar. Creo que éste se exilió en Londres, pero no estoy seguro. Las fuerzas
republicanas, las cuales habían llegado a unos
acuerdos fundamentales se unieron para combatir a las fuerzas monárquicas.
¿Cuántos años tienes?
86, aunque en dos semanas cumplo 87.
¿Qué edad tenías cuándo fuiste a España?
18 años.
¿Qué impulsa a un joven escocés a ir a luchar a
una guerra ajena en un país extranjero?, ¿qué te
hizo tomar esa decisión?
La situación por la que estaba pasando el mundo en ese momento. Acabada la Primera Guerra
Mundial, en distintos países se seguían solucionando conflictos pasados. Igualmente la situación
social y económica no era favorable: desempleo,
bajada de salarios, huelgas..., en 1929 el crack de
la bolsa de Nueva York; en definitiva la situación
era bastante tensa.
¿En qué año llegaste a España?
A comienzos de 1938.
¿Cómo fuiste? ¿Ibas sólo o con otros voluntarios?
No, no fui solo. Un amigo y yo conseguimos ir a
través del Partido Comunista de Glasgow, y así
me uní a la Brigada Internacional. El Partido hizo una fiesta solidaria, y allí decidí ir a España.
El voluntariado se organizó una vez que la situación se hizo más tensa debido a la ayuda que recibió el bando nacional por parte de Hitler y
Mussolini, los cuales proveyeron de artillería,
aviones y tropas.
España, una Monarquía, en el contexto mundial
también estaba salpicada de conflictos políticos
y sociales, lo que condujo a que en las elecciones
de 1931 ganaran los candidatos republicanos en
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Ubi Sunt? nº 27, 2012, pp. 129-133, ISSN 1139-4250
ENTREVISTA
Un poco de Historia...
en defensa de la República.
Entrevista a Stieve Fullarton
ENTREVISTA
Antes de apuntarme en la Brigada estuve ayudando en el envío de comida a España, estaba
conmocionado al haber visto en los periódicos a
mujeres con sus bebés huyendo de los bombardeos. Como contrapartida, las noticias daban la
información de la Iglesia católica, la cual estaba
en contra de «los rojos», ya que tenían la fama
de que en Rusia habían quemado iglesias, curas..., algo con lo que yo no estaba de acuerdo.
Tengo que deciros que en el Reino Unido en ese
momento había una sentencia de dos años de
cárcel si se salía del país para ayudar en la Guerra Civil española, pero yo nunca oí de nadie que
le hubieran arrestado y acabara en prisión.
Una vez en París tuvimos que pasar un examen
médico. El doctor me dijo que no podía ir porque tenía los pies planos, ¡nunca había oído hablar de los pies planos!, el médico me explicó
que no podría seguir la marcha del resto de combatientes. Como yo era mayor de edad y podía
decidir, opté por seguir adelante. El médico me
aconsejó que dijera que tenía 22 años.
¿Puedes contarnos algo sobre tu viaje? ¿Cómo
fue?
¿Mi viaje?, pues salimos desde Glasgow en tren
hasta Londres y de allí a París. Como he dicho
anteriormente yo tenía 18 años y mi amigo 19,
pero es algo curioso porque finalmente ninguno
de los dos pudimos decir nuestra edad realmente. En el local en el que nos apuntamos en Glasgow me dijeron que hiciera como si tuviera
diecinueve, ya que era muy jovencito. Más tarde
nos dijeron que mejor tuviéramos los dos veinte
años.
¿Los médicos eran franceses? ¿Qué relación tenían con la República?
Ellos eran franceses, no te puedo decir exactamente qué relación tenían, pero desde luego que
eran personas posicionadas en la defensa de la
República española. Además el examen médico
creo recordar que se hizo en los locales del Partido Comunista francés.
Esa semana fuimos con otros voluntarios desde
Glasgow Central Station a Londres donde conocimos a un voluntario que había estado en España, éste había vuelto a casa porque le hirieron y
ahora regresaba de nuevo. Él nos propuso que
dijéramos que teníamos 21.
Una vez en Francia, ¿cómo cruzaste los Pirineos?
Andando, por supuesto. Estuvimos en un pueblo de la parte francesa dos o tres días. Éramos
siete personas, uno de mis compañeros también
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¿Cómo te manejabas con el idioma? ¿tuviste algún tipo de problema?
No aprendí la lengua, tan sólo utilicé términos
militares como «por la izquierda» y otras expresiones de ese estilo. Hubo un compañero americano que intentó enseñarnos, pero no tuvo
mucho éxito. En cualquier caso no tuvimos problemas para comunicarnos.
¿Tuviste algún tipo de entrenamiento militar?
No. Hubo alguna semana de entrenamiento pero yo no lo llegué a hacer.
¿Tuviste alguna oportunidad para conocer a la
gente del pueblo español?
En mi experiencia no, tan sólo en un lugar de
chabolas en el que nos alojamos; allí tuvimos la
oportunidad de conocer a la gente porque nos
quedamos unos días. Para dormir nos construimos nuestra propia chabola, montando su estructura en un árbol. Estuvimos allí hasta que
fuimos a la Batalla del Ebro. En esa ocasión fue
en la que más pude compartir con la gente española.
¿En qué frente estuviste luchando?
No estuve en ninguno de manera fija. Estuve
presente en Belchite y Calaceite, lugares en los
que las tropas republicanas estaban aguantando;
cuando llegaron los británicos a ayudar les interceptó un tanque italiano que hirió a algunos y
mató a otros tantos. Cundió el pánico, y la gente huyó en distintas direcciones.
A mi alrededor la gente moría. Un oficial de alto rango fue herido en un brazo y en una pierna,
justamente los opuestos, le ofrecí mi ayuda, pero éste me dijo que me pusiera a salvo yo primero. Cuando estaba buscando un sitio donde
esconderme, escuché una ametralladora, ésta me
hirió y caí a un agujero en el que permanecí
mientras el ataque continuaba. Una vez terminado éste me uní con mis compañeros, no teníamos nada para comer.
¿Por qué crees que se perdió la guerra?
La República española estaba estrangulada. Sus
armas estaban anticuadas. Los nacionales estaban ayudados por los estados fascistas de Alemania e Italia que les proveía de material bélico,
además de intervenir en defensa del levantamiento militar.
Tan sólo México y la Unión Soviética apoyaron
a la República. El Reino Unido y Francia llevaron a cabo el Pacto de no intervención a través de
la Sociedad de Naciones, lo que significaba que
el resto de países democráticos no intervinieran
en la guerra. Todos los barcos podían ser interceptados por el Reino Unido y Francia y sólo los
productos básicos de comida podían ser permitidos. Debido a este acuerdo, a la República no
le llegaba nada, sin embargo Alemania e Italia
mandaban barcos a través de los puertos de Lisboa y el Algarbe en Portugal y así suministraban
todo tipo de material a los sublevados.
Recuerdo que después me trasladaron en una
camilla a un Hospital que estaba situado en una
cueva. De ahí fui en un Tren Hospital hasta Tarragona, me tenían que operar y no disponían
del instrumental necesario para ello, pero aún
así fui operado en estas condiciones y me extrajeron la bala. De ahí me trasladaron nuevamente; en esta ocasión al Hospital de Vich en el que
permanecí dieciséis días.
Una vez recuperado fui destinado a un lugar al
norte de Barcelona en el que había un centro de
distribución, de allí fuimos a un pueblo llamado
S´agaro donde ocupamos varias villas de alrededor. Este fue en el último sitio en el que estuve
antes del regreso a casa.
Esta es mi visión de lo que pasó en aquellos años
y por ello creo que la República estuvo aislada y
de esta forma perdió la guerra. Por toda la ayuda que recibió Franco de Hitler y Mussolini yo
denominaría a esta guerra como una Guerra de
Intervención, desde el momento en que los ejércitos de estos países participaron en la contienda, ésta dejó de ser una guerra civil.
Participé también el Batalla del Ebro y después
de ésta fui ascendido a cabo, y me mandaron a
una escuela de cabos donde estuve dos semanas,
después me enviaron de vuelta a mi Unidad:
Compañía 1 de la Brigada 15.
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Un poco de Historia... en defensa de la República. Entrevista a Stieve Fullarton, María Aránzazu Robles Santana
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era de Edimburgo y tenía pasaporte, algo que no
era muy común en aquel momento. Una vez íbamos a emprender el camino, nos dijeron que nos
quitáramos las botas, y nos dieron unas alpargatas para no dejar rastro. No nos permitían fumar
y teníamos que hablar muy bajito.
ENTREVISTA
tor que conocía, y al supervisor para el que trabajaba (Stevie se ríe repitiendo «Certificado de
gente decente».)
¿Cuándo regresaste?
El gobierno republicano, en septiembre de 1938
propuso a la Sociedad de Naciones que todas las
tropas extranjeras fueran repatriadas a sus países. Franco se negó. Aun así la repatriación se
llevó a cabo.
Después de la guerra, en dos trabajos en los que
estuve, fui tratado de distinta forma que mis compañeros sólo por haber estado en España, en uno
me toleraron y del otro me echaron..., en fin...
La Brigada Internacional estaba compuesta por
52 países (Alemania, Canadá, Austria, Grecia...
entre otros), algunos compañeros venían de países que también tenían dictaduras. Realmente
fue gente de muchas partes del mundo. Yo volví
el día 23 de diciembre de 1938.
Del parlamento español en 1995 recibí la posibilidad de obtener la nacionalidad española, pero
cumpliendo ciertos requisitos. El gobierno de
Aznar no ha sido muy amable con nadie que hubiera apoyado a la República. Nos ofrecieron la
nacionalidad española, siempre y cuando renunciáramos a la nuestra propia.
¿Has obtenido algún tipo de condecoración o
mención por parte del Reino Unido? ¿ha reconocido alguna vez vuestra participación en la
Guerra Civil española?
No, de hecho, cuando en 1939 quise enrolarme
en las fuerzas aéreas reales para participar en la
Segunda Guerra Mundial, no fui admitido. Todo aquel que hubiera tenido conexión con España en la época de la Guerra Civil o con el
Partido Comunista, no era considerado apto.
Aún así pasé el examen previo, pero me exigieron un «Certificado de gente decente», y para
conseguirlo tuve que pedir referencias a un doc-
Franco murió en 1975, pero en España sigue habiendo dos lados, no se ha podido hablar abiertamente sobre la República. En mi opinión este
es el origen de la sociedad de clases en España.
¿Cuántos brigadistas fuisteis desde el Reino
Unido?
Unos dos mil, de los cuales quinientos eran escoceses. 534 murieron. En escocia sólo quedamos vivos dos, James Milew de Glasgow con ¡98 años!,
y yo, a punto de cumplir 87.
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¿Nos puedes decir qué consideras lo mejor y lo
peor de tu experiencia?
Supongo que lo peor fue en el ataque a la «Montaña 41». Fue la segunda vez que me quedé sin
munición, pude ver a mis compañero tirados, heridos, pidiendo ayuda. Estas experiencia te hacen
ser una persona diferente.
¿Mantienes el contacto con la gente que conociste?
Sí, sobre todo con la Brigada Internacional. De
hecho, para mantenernos en contacto creamos
una organización: International Brigade Memorial, de la cual recibo todos los boletines y documentación. Además esta asociación ha puesto
diferentes placas en homenaje a los brigadistas
por distintas partes del Reino Unido. En Glasgow hay una escultura de la Pasionaria, Dolores
Ibárruri, dedicado a su memoria, y a todos los
brigadistas que fueron a combatir desde el Reino Unido.
Lo mejor es cuando la gente se preocupa, te da
comida, cuando te recuperas.
Algo que decir para concluir...
Quiero resaltar de nuevo que bajo mi punto de
vista, la Guerra Civil no debería llamarse así. Para mí, sólo los primeros meses fue una guerra civil, pero en cuanto el ejército alemán e italiano
entraron en combate, empezó a ser una guerra
de intervención, es por ello que creo que habría
que llamarla así, Guerra de Intervención.
Cuando volviste, ¿formaste parte de algún movimiento político o social?
No, no estoy interesado en la política. No he
participado en nada excepto este año que se ha
cumplido el 70 aniversario de la Guerra Civil y
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Un poco de Historia... en defensa de la República. Entrevista a Stieve Fullarton, María Aránzazu Robles Santana
ENTREVISTA
he dado una charla en una librería en Leith
(Edimburgo) en la cual me dan facilidades para
dar conferencias.
¿Has estado en España después de tu participación en la guerra?
Sí en varias ocasiones para participar en homenajes.