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TRANSMISION
DE ENFERMEDADES
DE ORIGEN ANIMAL’
POR ORGANISMOS
HIDRICOS
Dr. Stanley L. Diesch’
En este trabajo se trata de indicar el significado epidemiológico
potencial de la transmisión de enfermedades por el agua,
basado en la variabilidad de las características de resistencia de
diversos tipos de organismos patógenos y su poder para
transmitirse por ese medio.
Antecedentes históricos
Siglos antes de la era de la bacteriología, el
hombre percibía que el agua tenía algo que ver
con la transmisión de las enfermedades. La
antigua teoría miasmática sobre la enfermedad
enseñaba que todas las enfermedades se debían
a emanaciones del agua y de la tierra y a la
influencia de las estrellas, la luna, los vientos y
las estaciones del año. Hace más de 2,500 años,
durante la era precristiana,
Hipócrates,
el
“padre de la medicina”,
en su tratado sobre
aires, aguas y lugares (Chadwick y Mann, 1950)
describió con más detalle el papel del agua,
relacionando las causas de las enfermedades con
diferentes aguas, el viento y el declive de la
tierra. Durante el comienzo de la Era Cristiana
y la Edad Media hubo más hallazgos. En esa
época, las epidemias de ciertas enfermedades
como la tifoidea y el cólera se asociaban a las
inundaciones y al ascenso y descenso del nivel
del agua subterránea. La teoría de los vapores y
miasma venenosos (emanados de las inmundicias) no se aceptó sino hasta fines del siglo XIX.
Algunas de las observaciones primitivas fueron
inadecuadas y sin fundamento, pero otras representaron correctas observaciones de los hechos.
teoría del germen como causa de la enfermedad. En 1876, Robert Koch probó la teoría del
germen con su obra clásica sobre el ántrax. Los
aspectos históricos de la bacteriología se describen muy bien en un libro de Bulloch, de
1938. La era de oro de la bacteriología
se ha
extendido y desarrollado por casi 100 años,
destacándose la importancia del agente microbiológico
como causa de las enfermedades
transmisibles.
El reconocimiento
de que deben identificarse los factores que predisponen o contribuyen a las enfermedades y que existen causas
múltiples de enfermedad ha ampliado el objetivo de los esfuerzos del hombre de modo que
se considere la perspectiva total de la enfermedad: la relación del complejo agente- huésped y
medio ambiente.
Durante el siglo XIX, investigadores como
Henle, Snow, Budd y Pasteur desarrollaron la
‘Trabajo presentado en la Conferencia sobre el
Papel de la Agricultura con Respecto al Agua Limpia,
realizada del 18-20 de noviembre de 1969 en la
Universidad del Estado de Iowa, Ames, lowa, EUA.
2Profesor asociado del Departamento de Microbiología y Salud Pública Veterinaria, de la Escuela
Superior de Medicina Veterinaria de la Universidad de
Minnesota, St. Paul, Minnesota, EUA.
314
L
,_
d
Conceptos sobre la transmisión de las
enfermedades
Es esencial conocer la epidemiología
en su
relación con la transmisión de las enfermedades.
La epidemiología es el estudio de la enfermedad
con relación al huésped, al agente y al medio
ambiente, o sea, la ecología de la enfermedad.
De las muchas enfermedades infecciosas que
afectan a los animales, más de 150 se clasifican
como zoonosis 0 como aquellas infecciones 0
enfermedades infecciosas transmitidas en condiciones naturales entre animales vertebrados y el
hombre (Ser Inf Téc de la OMS 378,1967). Las
zoonosis relacionadas con los animales que
producen alimentos se consideran generalmente
como ocupacionales. Ultimamente
se ha regis-
k
b
r;
Diesch
.
ENFERMEDADES
POR ORGANISMOS
trado un creciente número de zoonosis relacionadas con actividades recreativas.
El proceso de la enfermedad infecciosa
incluye seis factores necesarios, considerados
como eslabones de una cadena y todos ellos
esenciales al desarrollo de la enfermedad:
Agente causante o etiológico
La infección representa la entrada y desarrollo o multiplicación
de un agente infeccioso
en el cuerpo de un hombre o de un animal.
Generalmente el agente parasitario vive a expensas o en detrimento dei huésped. Felizmente,
muchos organismos no son patógenos para el
hombre y los animales. Algunos tienen especificidad e infectarán solamente a ciertas especies.
Por ejemplo, el virus del cólera porcino no
infecta ni al hombre ni a otros animales.
Reservorio del agente infeccioso
Los reservoríos son el hombre, los animales,
las plantas, el suelo 0 la materia orgánica
inanimada donde el agente infeccioso vive, se
multiplica y depende para sobrevivir. Con pocas
excepciones, los organismos patógenos no son
capaces de crecimiento o multiplicación
prolongada fuera del cuerpo vivo. La importancia del
reservorio animal depende de la asociación
directa o indirecta con el hombre. Este está más
expuesto a los animales domésticos que a los
silvestres. Los animales y el hombre están
potencial
e indirectamente
asociados a los
organismos patógenos de origen animal a través
del agua. El hombre es el reservorio más
importante de infección para su especie, como
lo son los animales para su género 0 clase.
Escape de organismos del reservorio
*r
-z
‘.
El escape y consiguiente descarga del organismo en el medio puede ocurrir a través de las
aberturas naturales del cuerpo, sean estas respiratorias, intestinales, urinarias o lesiones abiertas y mecánicas (artrópodos que se alimentan
de sangre). Existe una variación en la duración
del escape de patógenos, que depende del curso
de la enfermedad en el animal huésped. En
general, la duración de la comunicabilidad
de
315
HIDRICOS
un agente infeccioso varía en razón inversa a su
grado de comunicabilidad.
Transmisión de la infección
nuevo huésped
del reservorio
al
La transmisión
se produce por métodos
directos o indirectos. El contacto directo se
produce cuando los organismos pasan inmediatamente
al nuevo huésped por contacto
físico íntimo. EI contacto indirecto
ocurre
cuando hay una transferencia de agentes infecciosos entre el reservorio y el nuevo huésped sin
asociación directa. Estos organismos tienen que
ser capaces de subsistir fuera del cuerpo y ser
transferidos
por un vehículo o vector. La
transmisión
indirecta se efectúa a través de
vectores, artrópodos,
otros invertebrados
y
otros vehículos (objetos o sustancias no vivientes) que están contaminados y transmiten los
organismos infecciosos. Los vehículos incluyen
el agua, la leche y otros alimentos, el aire y los
fomes.
Entrada de organismos en nuevos huéspedes
Antes de entrar, el organismo debe pasar las
barreras defensivas del huésped. Con excepciones, el mecanismo de entrada en el hombre o
el animal corresponde al de salida.
Huésped propenso
El hombre y los animales poseen mecanismos de defensa o resistencia que los protegen
de la invasión de microorganismos
patógenos.
La inmunidad
implica el desarrollo de una
protección absoluta en un huésped propenso a
una enfermedad, ya sea por medios naturales o
artificiales.
El desarrolio
de una enfermedad en el
hombre o en los animales depende de la
realización
de varios hechos simultáneos e
incluye la presencia de los seis eslabones esenciales de la cadena.
Los factores importantes que se refieren al
huésped propenso son: la edad, que generalmente aumenta la resistencia, pues cuanto más
vive el hombre o el animal, mayor es la
oportunidad de contacto con microorganismos
316
BOLETÍNDELAOFICINASANITARIAPANAMERICANA
específicos; la incidencia de la enfermedad en
una comunidad,
que es significativa,
pues
cuanto más casos se presentan, mayores son las
oportunidades de exposición; las oportunidades
de diseminación,
que incluyen factores biológicos, sociales y físicos, y pueden tener
relación
con factores ambientales-abastecimiento de agua, servicios sanitarios, vivienda y
apiñamiento.
La aparición de enfermedades entre la población no se ha notificado adecuadamente. Puede
ocurrir que se notifiquen únicamente los casos
(con signos 0 síntomas clínicos), pero que
existan en una población
muchos animales
portadores (subclínicos o no aparentes) infectados. Frecuentemente,
como no se reconoce a
los portadores, estos son más capaces de transmitir enfermedades a la población. El concepto
de portador de casos puede compararse a un
iceberg flotante,
en el que se observa una
pequeña fracción de hielo (casos) y la que
queda bajo el agua no es visible (portadores).
Este fenómeno varía con la naturaleza de cada
enfermedad.
Si un brote de enfermedad se manifiesta en
una población, existe hasta que se produce una
muerte, incapacitación
0 recuperación 0, también, desarrollo de resistencia contra esta enfermedad específica. De los animales infectados se
pueden desprender millones de organismos en el
ambiente y estos organismos pueden encontrar
un huésped propenso. En 1963, Errington dijo
que “caminos de la naturaleza son cualesquiera
que sean viables”.
A fii de prevenir, controlar y erradicar las
zoonosis se ha desarrollado
el tratamiento
basado en antibióticos
y quimioterapia,
y la
prevención
mediante el uso de vacunas y
bacterinas. Se han utilizado programas de cuaexamen
y matanza
rentena,
de animales
infectados.
Variabilidad del medio ambiente de los animales y el hombre
Hace unas pocas décadas, América era predominantemente
rural, con amplia diseminación de poblaciones de ganado. La cría de
ganado y la vida rural siguen predominando en
.
Octubre 1970
muchas regiones del mundo. Hoy día, un
número menor de haciendas contiene mayores
concentraciones
de ganado. En los Estados
Unidos, en 1937, el 24.3% de 128,649,OOO
personas vivía en haciendas que contaban con
94,694,OOO cabezas de ganado. En 1967, el
j.4% de 198,608,OOO personas vivía en haciendas que tenían 120,439,OOO cabezas de ganado.
En tres décadas aumentaron en un 21.3% laS
cabezas de ganado y la población humana de las
haciendas disminuyó un 65%, al tiempo que la
población total aumentaba en un 35%(Informe
Estadístico de la Secretaría de Agricultura
de
los Estados Unidos, 1968).
Una cantidad cada vez mayor de animales se
cría en encierro. Al primero de enero de 1969,
en los Estados Unidos había 23,040,OOO
en pastaderos,
animales
alimentados
10,823,OOO estaban en 2,080 lotes, cada uno
con 1,000 o más cabezas de ganado (Infomze
Estadístico de la Secretaría de Agricultura
de
los Estados Unidos, 1969). No es raro encontrar
pastaderos de 10,000 animales o granjas de
100,000. Esta concentración
puede facilitar
grandemente los programas de prevención de
enfermedades, pero el creciente contacto puede
causar mayores problemas en la transmisión de
las mismas.
El medio del trabajador
agrícola ofrece
mayor exposición
a las enfermedades infecciosas y parasitarias que los ambientes urbanos
(Ser Znf Téc de la OMS 246, 1962).
Al tiempo que el hombre migraba de las
haciendas a las ciudades, la eliminación controlada de las aguas servidas y la cloración de los
abastecimientos de agua redujo la incidencia de
enfermedades como la fiebre tifoidea, la paratifoidea, las disenterías y el cólera. Tal vez ha
desarrollado el hombre, como resultado del
control de las enfermedades específicas transmitidas por el agua, una actitud plácida con
respecto a las enfermedades asociadas a la
misma.
Al vivir en la ciudad, el hombre
vez más sus actividades recreativas
en las zonas rurales. La mayoría
cerca del agua. Para el año 2000,
será el pasatiempo favorito al aire
busca cada
al aire libre,
quiere estar
la natación
libre (Comi-
Diesch
.
ENFERMEDADES
POR ORGANISMOS
sión de Examen de Recursos de Actividades
Recreativas al Aire Libre, Estados Unidos,
1962). Por estar expuesto al medio de animales
domésticos y silvestres y a las aguas superticiales, el hombre verá aumentar su exposición a
las infecciones transmitidas por el agua.
El agua es absolutamente esencial para conservar el cuerpo del hombre y del animal. En los
Estados Unidos, gran parte del agua para
consumo familiar
procede de aljibes o de
abastecimientos
clorados y tratados. Cada vez
más, el hombre sigue expuesto al agua superficial por sus actividades ocupacionales y recreativas. Gran parte del agua que reciben los
animales encerrados procede de aljibes pero los
que viven en tierras de pastoreo consumen agua
en gran parte de las lagunas, corrientes, ríos y
lagos. La economía de la agricultura exige la
máxima utilización de la tierra. A menudo, la
tierra próxima al agua superficial puede utilizarse sólo para apacentar ganado. Se encuentran
aquí millones de animales que producen alimento y animales silvestres. Si están infectados,
los organismos patógenos escapan a las aguas
superficiales a través de descargas respiratorias,
del drenaje de heridas, heces, orina, o de
animales muertos. La transmisión
de organismos del reservorio al agua se produce también por escurrimiento del suelo, inundaciones,
vientos y otras vías. La dilución puede hacer
que los organismos patógenos descargados al
agua sean de baja densidad. La creencia general
de que el agua corriente sufre purificación
es
contrarrestada por el hecho que durante días,
semanas o meses los animales infectados pueden
difundir millones de organismos patógenos.
La transmisión de enfermedades infecciosas de
los animales y el hombre
Al considerar la función de la agricultura en
el mantenimiento
de agua Limpia, interesa la
relación causa y efecto o efecto y causa de
aguas contaminadas con organismos patógenos.
Cuando se estudia la ecología total de la
enfermedad, la complejidad
aumenta gradualmente y, por definición, disminuye en razón de
los numerosos factores correlacionados implicados. Para documentar la función del agua como
317
HIDRICOS
vehículo de transmisión de enfermedades se
utilizará la información compilada en el examen
de la literatura correspondiente.
La naturaleza
de enfermedades específicas se agrupa según
clasificación basada en la etiología del organismo que las causa.
En vista del alcance de este tema, no es
posible examinar separadamente cada enfermedad ni hacer referencia a su prevención,
control
y tratamiento,
información
que se
encuentra en la literatura
citada. En cada
categoría se describen rápidamente
ejemplos
específicos, haciéndose hincapié en la resistencia y transmisión del agente.
Enfermedades
bacteriknas
Las especies de bacterias vegetativas varían
grandemente
en su capacidad de sobrevivir
fuera de su huésped. Las esporas son muy
resistentes a los agentes físicos y químicos,
cuya acción puede afectar grandemente
el
índice
de crecimiento
y de mortalidad
(Merchant y Packer, 1967).
Cuando, en 18.54, John Snow demostró la
relación entre el cólera humano y el agua del
Broadstreet Pump en Londres, el agua asumió
por primera vez un papel importante
en la
transmisión
de enfermedades.
A partir del
desarrollo de la era bacteriológica se han hecho
numerosas documentaciones
de la transmisión
de enfermedades por medio del agua.
Salmonelosis. En los Estados Unidos, la
principal zoonosis es la salmonelosis. Cada año
se notifican
aproximadamente
20,000 casos
humanos pero se calcula que ocurren de uno a
dos millones de casos (Steele, 1968). La enfermedad está difundida
en los animales que
producen alimentos, aves de corral y otros
(Edwards y Galton, 1967). Esos son los principales reservorios del hombre. En los casos
agudos en terneros se encontraron lO,OOO,OOO
de organismos por gramo de heces.j
Las salmoneilas sobreviven en el agua y en el
medio durante largos períodos (André, Weiser y
Malaney, 1967; Gibson, 1967; Kraus y Weber,
3K. L. Loken, 1967. Comunicación personal.
318
BOLETíN DE LA OFICINA SANITARIA PANAMERICANA
1958). Las bacterias podrían sobrevivir de
varias semanas a tres meses en agua potable y en
agua superficial natural (Kraus y Weber, 1958).
En 1964, Hibbs y Foltz aislaron Salmonellu de
dos terneros, agua de arroyo y un ser humano.
En 1963, Schaal encontró salmonelosis enzoótica en ganado que bebió agua contaminada de
un arroyo. En mayo de 1965, una grave
epidemia de Salmonella typhimurium
causó la
muerte de tres personas (Centro Nacional de
Enfermedades
Transmisibles
de los Estados
Unidos, Informe 22, 1965). De la mitad de
casos humanos notificados cada año, más de la
mitad son esporádicos. El resto se asocia a
epidemias que generalmente se pueden atribuir
a alimentos contaminados de origen animal o al
agua (McCroan et aZ., 1963; Steele, 1968).
Se han notificado más de 1,300 serotipos de
Sulmonella. La bacteria está en todas partes y se
difunde en las heces de los animales infectados.
Las aguas superficiales sirven de vehículo potencial para la transmisión de Salmonella a otros
animales o al hombre.
En 1966, se produjo un importante brote de
casos humanos en Riverside, California, que se
originó en un abastecimiento de agua contaminada de Salmonella. Aunque no se identificó la
fuente de contaminación,
se supuso que el agua
podía haberse contaminado por infiltración de
lugares de pastoreo alejados (Decker y Steele,
1966). Dada la cantidad de reservorios y de la
contaminación del medio, la salmonelosis sigue
siendo una enfermedad de importancia para la
salud pública.
Leptospirosis.
La leptospirosis, causada por
una espiroqueta, ha sido clasificada como una
zoonosis transmitida por el agua. En los Estados
Unidos y en muchas regiones del mundo se la
encuentra en animales domésticos y silvestres.
En lo que a animales domésticos se refiere, se
encuentra principalmente
en los vacunos y
porcinos y puede permanecer
en la orina
durante varios meses. Se han notificado recuentos de 100,000,000 de leptospiras por ml de
orina (Gillespie y Ryno, 1963).
Las leptospiras pueden vivir en el agua por
varias semanas (Gillespie y Ryno, 1963;Chang,
Buckingham y Taylor, 1948; Ryu y Liu, 1966).
.
Octubre 1970
Sin embargo, la variabilidad
ambiental puede
complicar
su supervivencia
(Diesch et al.,
1969). El agua dulce en todas las formas de la
naturaleza es un factor principal en la circulación de leptospiras en focos enzoóticos. La
creencia general de que las aguas estancadas y
las corrientes de poco movimiento son potencialmente
infecciosas no es necesariamente
cierta. Se ha demostrado que el agua de mucho
movimiento en la selva puede ser infecciosa y
más aún al desbordarse (Ser Inf Téc de la OMS
380, 1967). Se han aislado leptospiras
de
corrientes de movimiento
rápido (Gillespie y
Ryno, 1963).
Los brotes humanos se producen cuando las
personas entran en contacto, ya sea por la
natación 0 por exposición ocupacional, con el
agua contaminada. A partir de 1941, se han
registrado unos 1,000 casos humanos en los
Estados Unidos. La natación fue la causa de 10
brotes que produjeron 233 casos humanos? En
1964, se aisló pomona, una leptospira patógena,
en un arroyo donde se nadaba y donde se
habían producido casos humanos en 1959 y
1964, después de que se nadara en él. Esta
corriente era visitada por ganado y otros animales (Diesch y McCulloch,
1966). En Washington, después de nadar en agua contaminada por
ganado infectado, se produjeron 61 casos humanos (Centro Nacional de Enfermedades Transmisibles de los Estados Unidos, Informe 7,
1965).
Entre 1951 y 1960, la pérdida anual para la
industria lechera y de productos lácteos se
calculó en más de EUA$12 millones por año
(Manual de la Secretaría de Agricultura de los
Estados Unidos 291, 1965). En 1969, el Comité
de Leptospirosis
de la Asociación de Salud
Animal de los Estados Unidos declaró que la
leptospirosis no es erradicable. Es probable que
el agua siga sirviendo de vehículo de transmisión, a animales y al hombre, de leptospirosis, la que continuará como una de las
enfermedades
esporádicas
más importantes
asociadas a la transmisión por el agua.
Antrax. Además de ser una de las enferme4W. F. McCulloch, 1969. Comunicación personal.
Diesch
.
ENFERMEDADES
POR ORGANISMOS
dades que afecta al hombre y a los animales que
se conoce desde hace más tiempo, el ántrax fue
la primera zoonosis asociada a un agente etiológico.
Las esporas de ántrax son unas de las
bacterias patógenas más resistentes. Las esporas
almacenadas en tierra dentro de una botella con
tapón de goma permanecieron viables durante
60 años (Wilson y Russell, 1964). Observaciones
sobre el terreno indican una duración similar de
viabilidad en suelos alcalinos no desaguados, en
climas cálidos (Blood y Henderson,
1968).
Hubo casos de animales infectados en regiones
de ántrax, 25 años después de producirse los
casos originales de la enfermedad (Merchant y
Packer, 1961).
Un mecanismo principal de diseminacion de
esporas es por aguas superficiales que inundan
suelos contaminados y causan la transferencia
de esporas a áreas mayores. Muchos cursos de
agua en distritos de ántrax, en los Estados
Unidos,
están contaminados
(Stein,
1942;
Jones, 1963).
En los últimos 50 afíos los casos humanos de
ántrax
disminuyeron
Constantemente
(Brackman,
1964). La mayoría de los casos
humanos registrados en los Estados Unidos
últimamente están relacionados con el pelo de
cabra y lana basta importados.
Hace una
década, los cálculos indicaban que la incidencia
anual mundial
estaba entre los 20,000 y
100,000 casos (Glassman, 1958).
Los animales se infectan más comúnmente
por ingestión de agua y de alimentos contaminados. La infección potencial
continuará
durante muchos años, especialmente
en los
distritos contaminados de ántrax donde el agua
superficial
tiene un papel importante
en la
transmisión.
Tularemia. Es una enfermedad contagiosa
muy diseminada y que ha sido aislada en más de
100 tipos de animales silvestres y domésticos
(Steele, 1968). En los animales agrícolas de los
Estados Unidos la enfermedad se encuentra más
comúnmente en la oveja. La bacteria no forma
esporas. Los investigadores registraron la contaminación del agua y barro y la aparición de
tularemia en el castor y la rata almizclera como
HIDRICOS
319
fenómenos comunes en el noroeste de los
Estados Unidos. En todas las corrientes examinadas con cualquier frecuencia en el valle Bitter
Root (área de Hamilton)
en el estado de
Montana, se han encontrado organismos de
tularemia (Parker et al., 195 1).
Se cree que los organismos pueden multiplicarse en el barro, moho de las hojas y material
que forma los lechos y orillas de las corrientes.
El organismo aerobio sólo es recuperable en las
aguas corrientes y no se ha encontrado nunca
en las corrientes quietas o estancadas. En una
corriente, y durante un período de siete años,
se recuperó Francisella tularensis en aproximadamente un 30% de los especímenes examinados.5
La tularemia puede transmitirse por muchas
vías (Shaughnessy, 1963). Hay pruebas de que
la bacteria penetra la piel intacta (Quan,McManus y von Fintel, 1965).
Cuatro casos clínicos y cuatro casos probables, todos ellos humanos, se asociaron al agua
contaminada (Jellison et aZ., 1950). Dos de los
casos estaban relacionados
con el abastecimiento de agua contaminada (agua de manantial). Se aisló bacteria de tularemia del agua
sacada del grifo. En otro informe (Jellison et
al., 1942) se encontró contaminación en cuatro
corrientes. Una de ellas quedó contaminada
durante 33 días después que los castores se
hicieron presentes. Ya que la contaminación del
agua puede persistir durante meses y hasta años,
debe evitarse tomar agua de corrientes en
regiones endémicas. Durante una epidemia de
tularemia que ocurrió en Vermont, 47 casos
humanos tenían relación con ratas almizcleras y
el organismo de la tularemia se aisló del barro y
agua de un lugar de caza (Young et al., 1969).
Este fue el brote más grande en Norteamérica
de tularemia ligado a mamíferos
acuáticos.
Dado que la enfermedad se establece en poblaciones de animales silvestres, actualmente no
parece pasible de control.
Brucelosis. Es una enfermedad contagiosa
de los vacunos, porcinos y caprinos y una de las
enfermedades ocupacionales del hombre más
importantes.
5Cora R. Owen, 1969. Comunicación personal.
320
BOLETÍN
DE LA OFICINA
La bacteria se aloja en las excreciones y
secreciones, especialmente
uterinas,
de los
animales infectados. En apacentaderos y corrales, las brucellas han sobrevivido de 65 a 182
días o más en fetos muertos y membranas
fetales, y por dos meses en el abono (Bosworth,
1934). En agua del grifo el organismo continúa
viable de 10 a 120 días a 25OC; en la orina
bovina hasta 4 días (Van der Hoeden, 1924).
Las brucellas sobrevivieron en el pasto hasta
100 días en invierno y 30 días en verano.
Sobrevivieron
a temperaturas
de congelación
por más de 824 días en la orina del ganado,
agua de lago, agua del grifo, leche cruda, heces
bovinas y suelo (Ogarkov,
1962). En los
Estados Unidos, 1975 es la fecha límite para la
erradicación
de la brucelosis. Según Harris,
1950, el agua, excepto cuando esté muy contaminada de organismos de brucella, no parece
fuente probable de infección.
Erisipela. La bacteria,
de mayor importancia y más ampliamente
difundida, causa
erisipela en los porcinos y afecta también a los
pavos. Ocasionalmente causa erisipeloide en el
hombre.
El organismo es resistente al secamiento y
permanece viable un mes o más en la oscuridad
y de 10 a 12 días a la luz (Morse, 1964). Existe
en el suelo como saprófito y retiene la virulencia. La persistencia en el suelo es variable y está
determinada por la temperatura,
pH y otros
factores. Se informa que queda viable de cuatro
a cinco días en agua potable y de 12 a 14 días
en aguas servidas (Reed, 1965). El suelo, la
comida y el agua se contaminan fácilmente por
animales infectados a través de grandes cantidades descargadas por la orina. De suelo inoculado experimentalmente
se recuperaron organismos hasta después de un máximo de 21 días.
Se observó más persistencia durante el invierno
y la primavera (Roswell,
1958). Las aguas
superficiales pueden transmitir la enfermedad
de una hacienda a otra (Karlson, 1967). Puesto
que la bacteria puede pasar a través del estómago sin pérdida de viabilidad, los animales
portadores pueden contaminar el suelo continuamente (Roswell, 1958).
Tuberculosis.
Aunque
en los Estados
SANITARIA
PANAMERICANA
.
Octubre 1970
Unidos la tuberculosis bovina ya no es una
enfermedad de primordial importancia, todavía
lo es en algunas regiones del mundo.
La bacteria es resistente a los agentes químicos y físicos (Middlebrook,
1965). En algunos casos, los bacilos tuberculosos
bovinos
virulentos pueden sobrevivir a seis meses de
exposición en el suelo, en mezcla de tierra y
estiércol y en estiércol (Maddock, 1933). Se
informa que el agua potable estancada puede
causar infección
hasta 18 días después de
haberla usado un animal tuberculoso (Blood y
Henderson, 1968; Christiansen, 1943). Se aislaron del suelo organismos viables durante seis u
ocho semanas después de la deposición de las
heces pero la duración varía ampliamente,
siendo mayor en tiempo
húmedo.
Según
Karlson, 1967, el bacilo se transmite a través de
alimentos y, a veces, del agua.
En los Estados Unidos, en los últimos años,
sólo algún caso humano raro es causado por la
cepa bovina (Feldman, 1963).
Tétanos. Esta enfermedad está muy diseminada y se relaciona generalmente con la entrada
de la bacteria en una herida. El organismo,
formado de esporas, se encuentra ampliamente
distribuido en la naturaleza y es abundante en
las heces animales o humanas, especialmente de
caballos y de otros animales herbívoros (Sterne
y Van Heyningen,
1965; Merchant y Packer,
1967). La espora resiste a la ebullición durante
más de una hora. Las esporas son capaces de
persistir en el suelo durante varios años (Blood
y Henderson, 1968). Con el rápido aumento de
la población equina en los Estados Unidos es
muy probable que aumente la consiguiente
contaminación del suelo. Es posible que el agua
de superficie tenga un papel importante en la
diseminación de las esporas del tétanos.
Colibacilosis.
Distribuida
por todo
el
mundo, está relacionada, en ciertas condiciones,
con las infecciones entéricas del hombre y de
los animales. Se encuentra universalmente
en
los intestinos del hombre y de los animales.
Generalmente, el organismo se destruye en 30
minutos a 6OOC. Las cepas resistentes al calor
pueden sobrevivir (Merchant y Packer, 1967) y
las células individuales sobreviven a la congela-
ción en hielo durante 6 meses. El organismo se
transmite por el agua, las heces y las moscas
contaminadas de materias fecales. Ciertas cepas
son un riesgo para el hombre y los animales y
pueden causar enfermedad al recién nacido
(Morgan, 1965). Para indicar la contaminación
fecal del agua se evalúan los organismos E. coli.
Las tentativas para documentar la relación entre
los casos de animales agrícolas y los humanos
no parecen concluyentes,
Enfermedades
causadas por rickettsias
Los agentes de estas enfermedades, exceptuada la fiebre Q, dependen de vectores artrópodos para la transmisión de la enfermedad y
de huéspedes humanos o animales para su
mecanismo (Fox, 1964).
Fiebre Q. Está muy diseminada y se encuentra, en todos los continentes,
tanto en el
hombre como en los animales. Tiene una amplia
variedad de huéspedes (Babudieri, 1959). En los
Estados Unidos tiene significación agrícola en
ovejas, cabras y vacunos. Los organismos, parásitos intracelulares, tienen mayor resistencia a
los agentes físicos y químicos que cualquier
otro patógeno Rickettsia y más resistencia que
la mayoría de las bacterias no esporogénicas. El
agente es viable en leche desnatada durante 42
meses y en agua del grifo durante 36 (Ignatovich, 1959-b). Welsh et al., 1959, aislaron el
organismo del agua quieta (albercas superficiales), en haciendas de ovejas infectadas, en
California, durante un período de seis semanas
durante la paridera; y del suelo, hasta después
de 148 días. Stoenner, 1964, informó que el
papel de los microambientes
en los fomes
móviles era significativo al extender los riesgos
de la enfermedad a diversos grupos ocupacionales, normalmente considerados como fuera de
riesgo. Calculó que, en los Estados Unidos, por
lo menos un 25% de los rebaños lecheros y un
porcentaje más alto de rebaños de ovejas y
cabras están infectados. La fiebre Q parece
generalmente una infección que no se manifiesta en el ganado doméstico. Se desconoce la
forma exacta de transmisión pero se consideran
importantes
el aire cargado de polvo que
contenga desecho animal y las garrapatas. Se
sugiere que un organismo es una dosis infecciosa para el hombre (Tigertt, Benenson, y
Gochenour,
1961). No se ha determinado el
papel del agua en la transmisión.
Enfermedades
v íricas
Se conocen aproximadamente
unos 500
virus animales (Green, 1965). En los animales
domésticos se encuentran también tres contrapartidas de los principales virus que se sabe
infectan al hombre. Según Abinanti, 1964, no
se ha hecho una investigación a fondo para
determinar qué virus pueden aparecer en la
leche y otros subproductos animales o en qué
condiciones se destruyen.
En un extenso examen de los virus entéricos
de animales se llegó a la conclusión de que
dicho problema corresponde al registrado en el
hombre y que puede aislarse una multitud de
organismos de las heces de diferentes especies
animales (Kalter, 1964). Reconociendo que la
salud humana está íntimamente relacionada con
la salud de los animales, los virus se consideran
como los agentes infecciosos menos estudiados
(Sinha, Fleming y Scholes, 1960).
Por lo general, los virus no sobreviven durante largos períodos fuera del animal huésped
(Gratzek, 1967). Los virus poseen más o menos
el mismo grado de resistencia al calor, secamiento y agentes químicos que las formas vegetativas de las bacterias. La mayoría no se ve
afectada por concentraciones
de antibióticos
que destruyen las bacterias.
Según Prier y Riley, 1965, se dispone de
cierta información sobre la supervivencia de los
virus en el agua pero la mayor parte de la información se obtuvo de estudios de agua destilada
a temperaturas controladas. Establecieron que,
en comparación con los agentes bacteriales y
protozoarios, se supone que los virus en aguas
naturales, excepto en circunstancias
excepcionales, sólo sobreviven por un corto período.
Sin embargo, Brown y McLean, 1967, afirmaron que los virus entéricos son más resistentes a los halógenos que las bacterias y que, a
menos que el residuo de cloro libre sea lo
suficientemente
alto, el agua, aunque libre de
bacterias viables, puede contener virus activos.
Un estudio de lagunas, durante más de seis
meses, no reveló virus entéricos o bacteriófagos
específicos (Joyce y Weiser, 1965). Experimentalmente,
los virus entéricos sobrevivieron
durante largos períodos (hasta 21 días) a extremos simulados de temperatura, y sobrevivieron
durante períodos aún más largos, por encima de
escalas pH de extremos encontrados en aguas
naturales de lagunas. En aguas ligeras y altamente contaminadas,
los virus sobrevivieron
más tiempo que en aguas de contaminación
moderada. Las sustancias químicas que se
encontraron en las lagunas no parecieron afectar la supervivencia vírica. Los autores concluyeron que el agua de lagunas ofrece un lugar
definido para el almacenamiento de virus entéricos.
Se sabe menos sobre el papel del agua en la
transmisión de virus que de bacterias. Muchas
de las enfermedades víricas son transmitidas por
artrópodos. Se han clasificado unos 200 virus
como arbovirus (Merchant y Packer, 1967). En
los Estados Unidos hay menos enfermedades
víricas no transmitidas por artrópodos pero
muchas están relacionadas con la ganadería.
Muchas clases de virus se eliminan en las
heces de los animales. Están incluidos los picornavirus (virus entéricos), los virus respiratorioentéricos, virus herpéticos, adenovirus y myxovirus (Gratzek, 1967).
Según Prier y Riley, 1965, el agua natural es
de menor significación cuando se compara con
otros factores que afectan la transmisión vira1
de enfermedades entre individuos y rebaños.
Geldreich, 1965, cuando describe el origen
de la contaminación
microbiológica
en las
corrientes afirma que el agua contaminada por
las heces también puede contener virus eliminados por animales de sangre caliente.
Aunque el hombre está implicado principalen la transmisión de la hepatitis vírica,
este agente, de alta resistencia y capaz de transmitirse por las aguas superficiales, puede servir
de modelo de estudio. Mosley, 1963, registra un
total de 31 epidemias humanas, presumiblemente transmitidas por el agua. La cloración o
pasteurización no destruyen el virus de la hepatitis (Anderson, Arnstein, Lester, 1962). Según
mente
Mosley, 1963, sólo el agente vírico de la hepatitis infecciosa ha sido asociado claramente a la
transmisión por el agua en el agua potable del
hombre. Es probable también que el agua tenga
un papel en la transmisión de poliovirus, virus
Coxsackie,
ECHO y adenovirus (Clarke y
Chang, 1959; Brown y McLean, 1967; Chang,
1968).
Todavía no se ha documentado, ni tal vez
considerado adecuadamente, el papel del agua
en la transmisión de las enfermedades víricas.
Las enfermedades víricas de animales domésticos que se discuten a continuación son ejemplos que muestran la variación en la resistencia
vírica.
Enfermedad de Newcastle. Este virus, que
causa una infección sistémica aguda en las aves,
puede infectar al hombre y es altamente resistente a los factores nocivos del medio. Entre las
plumas abatidas de las gallinas y el polvo, el
virus permanece activo durante varias semanas a
temperatura ordinaria (Bernkoph, 1964).
Cólera porcino. Esta enfermedad aguda de
los cerdos, altamente contagiosa, es causada por
un virus relativamente estable. Un informe estableció que el virus sobrevivió durante siete días
pero sin llegar a 15, a una temperatura de 37OC
(Bruner y Gillespie, 1966). El tiempo de supervivencia puede ser mayor y varía con las condiciones del medio. Se supone que la transmisión
se hace principalmente por contacto con cerdos
infectados o, indirectamente,
por secreciones y
excreciones. La fecha límite para la erradicación del cólera porcino en los Estados Unidos es
1975.
Fiebre aftosa. Esta enfermedad sumamente
contagiosa y aguda de todos los animales de pie
hendido raramente afecta al hombre. El virus es
resistente a las influencias externas, incluso a
los desinfectantes
comunes. Puede persistir
durante más de un año en los lugares infectados. El virus es bastante sensible al calor y al
cambio de pH e insensible al frío. Hay muchos
métodos de transmisión considerándose el más
común la ingestión de alimentos contaminados
(Blood y Henderson, 1968).
Otros agentes víricos de enfemzedad. Se
desconoce el papel del agua en la transmisión de
Diesch
.
ENFERMEDADES
POR ORGANISMOS
muchos agentes de enfermedad. Hay tres variedades de enfermedad de reciente interés que
causan desórdenes neurológicos crónicos similares: el prurigo lumbar de los ovinos, la
encefalopatía
en el visón y el kuru en el
hombre. Los agentes etiológicos son sumamente
resistentes y tienen períodos de incubación
largos ( McDaniel, 1969). El agente del prurigo
lumbar en la oveja resiste exposición a 75OC
durante una hora; el tejido del cerebro en
IO-12% de formalina todavía era viable después
de 4-28 meses y también resistente al éter
(Merchant y Packer, 1967). Se desconoce el
papel del agua en su transmisión.
Enfermedades
producidas por hongos
Micosis sistémicas profundas. Los principales agentes de enfermedades sistémicas micóticas son de la actinomicosis, la nocardiosis, la
aspergilosis, la ficomicosis,
la moniliasis, la
histoplasmosis, la blastomicosis norteamericana,
la coccidioidomicosis,
la criptococosis
y la
esporotricosis. A excepción de los de la moniliasis, los demás viven libres en la naturaleza y
no se consideran zoonóticos. Estas enfermedades se conocen como hongos ocupacionales.
Los hongos se cultivan fácilmente en suelos que
contienen estiércol de pollo, de estorninos y
heces de palomas (Harrell, 1964). El hombre y
los animales son propensos a estos hongos que
se encuentran en el medio; las esporas se
transmiten por el aire. No se considera a los
animales infectados como reservorios para la
transmisión
de la enfermedad
al hombre
(Menges, 1963; Maddy, 1967).
ffistoplasmosis.
La infección por histoplasma del hombre y de los animales está muy
diseminada en la región centro-oeste de los
Estados Unidos. En los animales es esporádica
(Blood y Henderson, 1968). No hay pruebas
sobre el papel del agua en la transmisión de las
enfermedades fungosas. Gordon et al., 1952,
informaron
sobre el aislamiento, por primera
vez, de la espora del H. capsulatum del agua de
río.
Experimentalmente
el hongo permanecerá
viable en agua hasta 621 días (Metzler, Retter y
323
HIDRICOS
Culp, 1956). El hongo crece en agua de río
común. Se observó que las esporas son más
resistentes al cloro que el virus del polio o las
bacterias entéricas. Según Furcolow, 1965, no
se considera importante la evidencia actual de
transmisión por abastecimiento de agua. Dado
que las esporas se arrastran fácilmente a las
corrientes, su contenido en depósitos de agua
debe tomarse en consideración
en regiones
endémicas.
Tiña Entre las micosis superficiales se cuentan las tiñas, algunas de las cuales se transmiten
del hombre al animal y la mayoría existen
como parásitos (Bridges, 1963). Se consideran
una zoonosis importante.
La transmisión directa es el mecanismo común de transmisión.
En un ambiente seco las esporas del hongo
permanecen viables durante años (Blood y
Henderson, 1968). No se ha determinado el
papel del agua en la transmisión de las esporas.
Enfermedades
parasitaribs
Las enfermedades
relacionadas
con los
helmintos y otros parásitos son el objeto de una
antigua ciencia. Hasta el descubrimiento
del
microscopio los helmintos se consideraban importantes. Después, se desarrolló la era de la
bacteriología
y llevó rápidamente las formas
macroscópicas de los parásitos a segundo plano.
Hace aproximadamente
unos 60 años, con el
desarrollo de la medicina tropical, los vermes se
hicieron importantes nuevamente como agentes
que causan enfermedades (Cameron, 1962). Las
enfermedades
de protozoarios
y helmintos
están muy diseminadas en animales relacionados con la agricultura. Los helmintos incluyen los trematodos, cestodos o tenias y nematodos o nematelmintos.
Los trematodos son raros en Norteamérica,
excepto los conocidos como “comezón de los
nadadores” de los lagos septentrionales.
Las
enfermedades cestoideas no son problemas importantes
de salud pública en los Estados
Unidos. Los nematodos causan muchas enfermedades en el hombre y en los animales,
incluso en los peces (Steele, 1968).
Por lo general, las larvas y huevos de los
parásitos son relativamente resistentes al medio
324
BOLETíN
DE LA OFICINA
externo. Se ha informado que durante estaciones relativamente secas y de poco pasto, el
abono preparado puede servir de reservorio
para las larvas hasta durante cinco meses en el
verano, y de siete a ocho meses en el invierno
(Blood y Henderson, 1968). En condiciones
cálidas y húmedas, los parásitos helmintos
sobreviven en gran cantidad de seis hasta ocho
semanas y parecen relativamente resistentes al
frío, pudiendo sobrevivir al invierno.
Los ascárides y las larvas del anquilostoma
pueden adquirirse del agua o del suelo (Faust,
Beaver y Jung, 1968). Los trematodos completan el ciclo en un molusco, generalmente en los
caracoles. El verme trematoideo de la “comezón de los nadadores”
se desarrolla en un
caracol. De un solo huevo emergen en el agua
miles de cercarias, que atacan a cualquier
animal de sangre caliente, incluso al hombre.
Los huevos de la tenia pasan en las heces y
todos necesitan un huésped intermediario para
completar el ciclo.
Balantidiosis.
Es una enfermedad
protozoaria de distribución cosmopolita en todo el
mundo, que se observa generalmente en los
climas cálidos. Es un parásito intestinal y se
encuentra más comúnmente
en los cerdos,
monos y en el hombre (Faust, 1963, Van der
Hoeden, 1964). La infección humana resulta de
la ingestión de agua y de alimentos contaminados. Según Hoare, 1962, en algunos países
más del 90% de la población está infectada.
Toxoplasmosis.
Debida a un protozoario
intracelular
que infecta al hombre y a los
animales, tiene amplia variedad de huéspedes.
No se conoce el mecanismo de transmisión
(Jacobs, 1964). Según Jacobs, 1965, a pesar de
lo extendida que está la infección por toxoplasma a nuestro alrededor, todavía no hay
seguridad sobre el mecanismo de transmisión.
Ascariasis. Un ascáride hembra produce
hasta 200,000 huevos por día (Faust, Beaver y
Jung, 1968). Los huevos son muy resistentes al
frío y sobreviven más fácilmente en ambientes
húmedos. Se han registrado supervivencias de
hasta cinco años (Blood y Henderson, 1968).
Estrongilosis. Se trata de una dermatitis que
se desarrolla en cazadores de pieles y de
SANITARIA
PANAMERICANA
.
Octubre 1970
animales y en los que trabajan con el petróleo,
en las regiones pantanosas meridionales
de
Luisiana. Se asoció la enfermedad con las larvas
infecciosas de la especie estrongiloides
que
infectaban los mamíferos que habitan los pantanos (Burks y Jung, 1960).
Teniasis. La carne de vaca infectada de
cisticercosis, la tenia de los vacunos, causa
teniasis en el hombre. La tenia es transmitida al
ganado por defecación humana en corrales y
apacentaderos de ganado o por distribución de
aguas servidas humanas y de tanques sépticos de
los apacentaderos. En Gran Bretaña, los investigadores llegaron a la conclusión de que los
huevos de tenia pueden sobrevivir a la mayoría
de los tratamientos urbanos y rurales de aguas
servidas y pasar después en eliminación final o
aluvión seco por el aire. Si se utiliza en los
apacentaderos o llega a las corrientes, este
material puede infectar el ganado (Silverman y
Griffiths, 1965). En el año fiscal de 1968, en
los Estados Unidos, se informó que en las
matanzas había 12,723 canales de bovinos
infectados (División de Inspección de Matanza
de Animales, Secretaría de Agricultura de los
Estados Unidos). Se desconoce la prevalencia en
el hombre.
Resumen y conclusiones
Hay un creciente interés público por el
medio ambiente y por la necesidad de reevaluar
el papel del agua como vehículo de transmisión
de zoonosis relacionadas con la agricultura.
Casos documentados de enfermedades infecciosas de origen animal en el hombre y los
animales se han asociado a la transmisión por el
agua. Después de examinar la literatura correspondiente, es evidente que no se ha considerado
adecuadamente esta transmisión. En muchos
informes sobre casos examinados, no se hicieron estudios epidemiológicos para determinar la
fuente de infección.
Gran parte de la documentación
anterior
sobre transmisión de enfermedades por el agua
se relaciona con agentes bacterianos. Se desconoce prácticamente el papel de los virus animales y otros agentes y los métodos disponibles no
Diesch
.
ENFERMEDADES
POR ORGANISMOS
permiten evaluar la importancia del agua como
vehículo de transmisión de enfermedades. En
las aguas superficiales se encuentran organismos
patógenos de animales, pero por una serie de
factores la enfermedad sólo ocurre ocasionalmente en el hombre o en los animales. Los
factores implicados pueden ser la dilución del
agua, encontrándose así una baja densidad de
organismos; que no se desarrolla la cadena de
acontecimientos necesaria para producir el proceso de la enfermedad
infecciosa; que el
hombre o los animales no se exponen; o
finalmente, que, si se produce la enfermedad,
no se descubre o no se notifica.
Aunque en estos últimos años se ha prestado
mucha atención a las enfermedades crónicas del
hombre, el potencial de las zoonosis, por la
exposición
ocupacional
y recreativa,
puede
aumentar considerablemente
en el futuro. El
agua es sólo uno de los medios de transmisión
de las enfermedades pero es esencial para la vida
y tanto el hombre como los animales están
expuestos a ella.
En los Estados Unidos, la esperada concentración de poblaciones de animales que producen alimentos puede facilitar el control y
erradicación de zoonosis por medio de medidas
preventivas más que por tratamiento. Los problemas resultantes, como eliminación de desechos animales y el consiguiente efecto en el
medio ambiente, aumentan con la concentración de ganado. El futuro aumento de la
HIDRICOS
325
población y los nuevos acontecimientos
cambiaran los métodos ocupacionales y recreativos,
lo que perturbará los sistemas ecológicos de la
naturaleza que existen hoy día. En virtud de
dichos cambios, no se puede predecir el futuro.
Los estudios ecológicos de la enfermedad en
el ambiente de la naturaleza están llenos de las
variabilidades
del complejo
agente-huéspedmedio, difícil
de definir. Esta investigación
necesita nuevos enfoques.
El efecto futuro de las variables prácticas
agrícolas,
crecimiento
y concentración
de
poblaciones humanas y animales, y la creciente
exposición
del hombre al agua servirán de
estímulo para que todas las disciplinas científicas evalúen las asociaciones de enfermedades
relacionadas entre sí. q
Agradecimiento
Se agradecen sus esfuerzos y comentarios en
la revisión de este manuscrito al Dr. H. Orin
Halvorson, del Departamento
de Bioquímica,
de la Escuela Superior de Ciencias Biológicas; al
Dr. Theodore A. Olson, de la División de
Saneamiento del Medio, de la Escuela de Salud
Pública, de la Escuela Superior de Ciencias
Médicas; y al Dr. Benjamín S. Pomeros, del
Departamento
de Microbiología
Veterinaria y
Salud Pública, de la Escuela Superior de Medicina Veterinaria, todos ellos de la Universidad
de Minnesota.
Anexo 1
Declaración conjunta del Consejo de Salud Pública y Medicina
Veterinaria Reguladora, de la Asociación Médico- Veterinaria Americana,
y del Consejo de Salud Rural de la Asociación Médica Americana
PREOCUPACION
POR LA CONTAMINACION
El 4 de noviembre de 1969, se realizó en
Chicago una reunión conjunta del Consejo de
Salud Pública y Medicina Veterinaria Reguladora de la Asociación Médico-Veterinaria
Americana y del Comité del Consejo de Salud Rural
de la Asociación Médica Americana. Los cretientes peligros de la contaminación
en los
Estados Unidos y en el mundo entero nos
causan seria preocupación que deseamos compartir, a través de nuestras organizaciones nacionales, con todos los niveles de la sociedad.
La vida y la salud humanas se ven amenazadas por la contaminación
del aire, del agua,
de la tierra y del ruido. Además nos preocupa la
amenaza a la ecología de la vida animal y
vegetal en kas áreas agrícoias productivas y en
las regiones vírgenes. No sólo existe amenaza
para la salud sino también para la calidad de
vida que engendran el aire puro y el agua y la
vida vegetal y animal no contaminadas.
Reconocemos sobriamente las necesidades
de la creciente población mundial: máxima
producción
de alimentos, fibras y productos
manufacturados.
Reconocemos la necesidad de
protegernos contra las pestes agrícolas, la necesidad de utilizar materiales que aseguren la
máxima producción de cosechas, la necesidad
de eliminar los desechos industriales y la necesidad de aumentar las fuentes de energía.
Estamos convencidos de que una investigación
adecuada permitirá que la tecnología sea efectiva sin los subproductos de la contaminación.
Pedimos que todos los niveles de la sociedad
que cuenten con los recursos humanos y económicos necesarios presten su apoyo inmediato a
esta investigación y que se asigne alta prioridad,
a nivel nacional, estatal y local, a las soluciones
lógicas para los problemas de la contaminación
del aire, del suelo y del agua.
Se recomienda que la Asociación MédicoVeterinaria Americana, a través de su Consejo
de Salud Pública y Medicina Veterinaria Reguladora, y la Asociación Médica Americana, por
intermedio de sus Consejos de Saneamiento del
Medio y Salud Pública y de Salud Rural,
continúen abogando por el control de la contaminación; que estas organizaciones llamen la
atención y consigan interesar a sus organizaciones estatales en dichos problemas y que los
niveles federales ejerzan toda la influencia
posible a fin de promover programas efectivos y
bien fundados que aseguren las investigaciones
y regulaciones necesarias.
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Diesch
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ENFERMEDADES
POR ORGANISMOS
Disease transmission
of water-borne
There is a growing public concern over ihe
environment and the need for a re-evaluation of
water’s role as a vehicle iu the transmission of
animal diseases associated with agriculture.
Documented
cases of infectious
diseases of
animal origin in man and animals have been
associated with water transmission. A review of
the literature makes it apparent that adequate
consideration
has not been given to water
In many of the case reports
transmission.
reviewed,
no epidemiological
studies were
carried out to determine the source of infection.
Many of the past studies of water transmission have dealt with bacteria1 agents. The role
of animal viruses and other agents is practically
unknown,
and with available methods the
significarme of disease transmission via water
cannot be measured. Pathogemc organisms of
animals are found in surface waters but, owing
to multiple factors, disease only occasionally
occurs in man or animals. Among the reasons
for this may be the fact that the water is
diluted, and consequently only a low density of
organisms is found; the chain of events necessary to produce the infectious disease process
does not develop; man or animals are not
exposed; or if disease does develop, it is not
diagnosed or reported.
Although in recent years chronic diseases of
man have been a major consideration,
the
potential risks of contracting zoonotic diseases
HIDRICOS
329
organisms of animal origin (Summary)
through occupational and recreational exposure
may be increasingly significant in the future.
Water is only one of the methods of disease
transmission, but water is essential for hfe and
al1 men and animals have exposure to water.
In the United States, the predicted concentration
of populations
of food-producing
animals may better facilitate the control and
eradication of animal diseases through preventive medicine practices rather than by treatment. New problems, such as animal waste
disposal and the subsequent effects on the
environment, increase with livestock concentration. Future population
growth
and new
developments
wiI1 change occupational
and
recreational
methods, and these factors will
upset the ecological systems in nature that exist
today. One cannot predict what will happen in
the future as a result of these ecological
changes.
Ecological studies of disease in the environment of nature are fihed with the variabihties
of the agent-host-environment
complex and
these are difficult to define. This research needs
new approaches.
The future effect of changing agricultura1
practices, growth and concentration
of animal
and human populations, and man’s increasing
exposure to water will challenge all scientific
disciplines to assess the interrelated
disease
associations.
Transmissão de doenqas por organismos hídricos de origem animal (Resumo)
Há um crecente interêsse público pelo meio
ambiente e pela necessidade de reavaliar o papel
da agua como veículo de transmissão de zoonoses relacionadas com a agricultura. Casos documentados de doencas infecciosas de origem
animal no homem e nos animais têm-se
associado à transmissão pela agua. Após examinar a literatura correspondente, é evidente que
não se tem considerado adequadamente essa
transmissão. Em muitos relatórios sobre casos
examinados, não se fizeram estudos epidemiológicos para determinar a fonte de infeccão.
Grande parte da documentacão
anterior
sobre transmissão pela agua relaciona-se com
agentes bacterianos. Não se conhece, pràticamente, o papel dos virus animais e de outros
agentes e os métodos disponíveis náo permitem
aval& a importancia da agua como VeícuIo de
transmissao de doencas. Nas águas superficiais,
encontram-se
organismos
patogênicos
de
animais, porém, por urna série de fatôres, a
doenca só ocorre ocasionalmente no homem ou
nos animais. Os fatôres responsaveis podem ser
a diluicão da agua, encontrando-se assim urna
baixa densidade de organismos; que não se
desenvolve a cadeia de acontecimentos necessária para produzir o processo da doenca infecciosa; que o homem ou os anirnais não se
expóem; ou, finalmente,
que, se ocorre, a
doenca não é descoberta ou notificada.
Embora nestes últimos anos se tenha prestado muita atencão às doencas crônicas do
homem, o potencial de doencas zoonóticas,
pela exposicão no trabalho e na recreacão, pode
aumentar consideràvelmente no futuro. A agua
é apenas um dos meios de transmissão das
doencas, mas é essencial à vida e tanto o
homem como os animais estão expostos a ela.
Nos Estados Unidos, a esperada concentracão de populacóes de animais que produzem
330
BOLETíN
DE LA OFICINA
alimentos pode facilitar o controle e a erradica@o de zoonoses por meio de medidas preventivas, mais que por tratamento. Os problemas
resultantes, como elimina&0 de sobras animais
e o conseqüente efeito no meio ambiente,
aumentam com a concentracão de gado. 0
futuro aumento da popuhacão, o que perturbará
os sistemas ecológicos da natureza que existem
hoje. Em virtude dessas modificacões, não se
pode predizer o futuro.
Os estudos ecológicos da doenpa no amTransmission
SANITARIA
PANAMERICANA
.
Octubre 1970
biente da natureza estão cheios das varia
bilidades do complexo agente-hospedeiro-meio,
difícil de definir. Esta investiga@0 necessita
novos enfoques.
0 efeito futuro das variáveis prácticas agriCOhS,
CreSCimentO
e concentrdcão de popukdcóes humanas e animais, e a crescente exposicão
do homem à agua serviráo de estimulo para que
todas as disciplinas científicas avaliem as associacóes de enfermidades relacionadas entre si.
de maladies par des organismes hydriques d’origine animale (Résumé)
Le public porte un intérêt croissant au
miheu environnant et à bd nécessité de réévaluer
le role de l’eau comme agent de transmission à
l’homme de maladies d’origen agricole. On a
relevé chez l’homme et chez les animaux des cas
bien documentés
de maladies infectieuses
d’origine animale transmises par l’eau. Cependant, l’examen de la littérature correspondante
révèle que les modalités de cette transmission
n’ont certainement pas été examinées à fond.
Dans de nombreux rapports sur les cas examinés, on n’a pas fait d’études épidémiologiques pour déterminer la source de l’infection.
Une grande partie de hi documentation
mentionnée ci-dessus sur la transmission par
l’eau traite des agents bactériens. Mais, d’une
part, pratiquement
on ignore le role des virus
animaux et des autres agents, et d’autre part, les
méthodes
disponibles
ne permettent
pas
d’évaluer l’importance
de l’eau comme agent
vecteur de makddies. Dans les eaux superficielles, on rencontre
des organismes pathogenes animaux, mais du fait d’une série de
facteurs, ces organismes provoquent rarement
des makddies chez l’homme
ou chez les
animaux. Les facteurs en cause peuvent être la
dilution de l’eau, ce qui entrame une faible
densité d’organismes; l’absence de la série de
faits nécessahes pour déclencher le processus de
la mahddie infectieuse; les précautions prises par
l’homme
et les animaux et enfin le nondépistage ou ka non-déchnation
de ka mabddie
lorsqu’elle survient.
Bien que pendant ces dernières années on ait
accordé beaucoup d’attention
aux maladies
chroniques de l’homme, les risques de maladies
transmises par les animaux, du fait des risques
consécutifs aux loisirs ou au travail, peuvent
augmenter considérablement
a l’avenir. L’eau
n’est qu’un des moyens de transmission des
maladies mais comme ehe est essentiehe a la vie
des hommes aussi bien que des animaux, ils en
font une large consommation.
Aux Etats-Unis, du fait de la concentration
prévue des populations
d’animaux
qui produisent des aliments, il se peut qu’il sera plus
facile de juguler et d’éradiquer les mk+dieS
transmises par ces animaux, en adoptant des
mesures préventives plutôt que des mesures
curatives. Les problèmes consécutifs, tels que
l’élimination des déchets animaux et leurs effets
sur le milieu environnant, augmentent avec la
concentration
de l’élevage. L’augmentation
future de la population et l’évolution nouvelle
changeront les méthodes de travail et les loisirs,
ce qui va perturber les systèmes écologiques
actuels de la nature. En raison de ces changements, il n’est pas possible de prédire l’avenir.
Dans les études écologiques de ka maladie
dans le milieu naturel environnant , abondent les
variables du complexe agent-hôte-moyen,
dont
la définition est difficile. Cette recherche exige
de nouvelles approches.
L’effet
futur
des pratiques
agricoles
variables, la croissance et la concentration des
populations humaines et animales, l’utilisation
croissante de l’eau par l’homme stimuleront
toutes les disciplines scientifiques
et les encourageront
à évaluer les associations des
maladies connexes.