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Comentario de Coyuntura
[Volumen 4, número 4]
Publicación 9 noviembre de 2008
Barack el Hombre
y el Imperio *
Dagoberto Gutiérrez
Cuando se piensa a Estados Unidos, es necesario situarse en dos
universos: El Imperio Estadounidense y La República de Estados
Unidos; estas dos realidades aparecen siempre en la historia de cada
imperio existente y normalmente se complementan y aunque es la
República el punto que origina el Imperio este llega a sustentar, en los
momentos de esplendor, a esta República; pero cuando el imperio
tambalea amenaza, en primer lugar, la lógica de la República.
El imperio Capitalista de USA, se configura a nivel planetario, desde la
segunda Guerra Mundial mediante el pacto de Bretton Wood y el BM y
el FMI.
No son escasos los presidentes como el Republicano Bush, expertos
en hundir en el desastre a su país y a su imperio y en cultivar las
condiciones para que USA pierda la hegemonía en el planeta y se
abra, forzosamente, al planeta multilateral, pluricentrista, donde USA
no tiene
la manija, perdida en la actual debacle financiera
estadounidense.
Esta realidad tiene que verse desde la periferia, porque sin ser hombre
o mujeres de occidente ni del oriente si lo somos de la periferia frente a
un centro imperial.
”
Esta realidad
tiene que verse
desde la
periferia,
porque sin ser
hombre o
mujeres de
occidente ni
del oriente, si
lo somos de la
periferia frente
a un centro
imperial.
”
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La campaña electoral de USA enfrentó el desastre de Bush republicano y la necesidad de esa
sociedad de tener esperanzas y aquí se sitúa Barack Obama un mulato, joven, con buena salud,
inteligente, culto, de buena palabra y con encanto. No siempre esa sociedad puede contar con alguien
que haga danzar al mismo tiempo la cabeza y los sentidos, eso hizo Barack, mientras que McCain el
Republicano, siendo copia fiel de Bush que significa el fracaso, no pudo derrotar a la sombra de los
dos gobiernos y así aunque esa sociedad adolece de problemas racistas, fue la Crisis Económica de
la República la que pesó, mas que el color de Barack a la hora de votar.
Resulta lógico que ese tenia que ser el discurso del demócrata y que la confrontación electoral se
situara en los temas relacionados con la República y el estomago de los y las votantes, mucho mas
que en los aspectos relacionados con el imperio. Conviene observar que en este terreno ambos
candidatos coincidieron porque de su salvación dependerá su lugar en la historia; y esto (la salvación)
solo se hará desde la República.
Es Obama el hombre que el imperio necesita en estos momentos para remontar la ruina Republicana,
porque se requiere a alguien que siendo imperial sea multilateral, que entienda que no son ya el único
poder, que asimile la realidad de ser los mayores deudores y que pueda negociar a partir de nuevas
realidades como la reunión del G-20 del 15 de noviembre.
Siendo las cosas así y pensándolas desde la periferia resulta ser que para un país como el salvador
se trata de prepararnos con la mayor prisa y oportunidad posible para sobrevivir al desastre
económico planetario que tenemos encima sin esperar, infantilmente, que ningún salvador, de donde
sea, atienda nuestras urgencias.
El primer aspecto a enfrentar es como evitar que los pobres del país paguen los mayores costos de las
crisis y como lograr que los mas beneficiados paguen, por lo menos, los impuestos que deben pagar.
La manida frase de que enfrentar la crisis es tarea de todos, no nos ayuda mucho porque se trata de
que los mas responsables respondan mas.
Estando quebrados el neoliberalismo y sus instituciones es inevitable un viraje en la economía de tal
manera que se construya una economía social y solidaria que asegure protección a productores,
consumidores y medio ambiente asegurando la vida para todos y no solo las ganancias para unos
pocos.
El país necesita protegerse del hambre que nos amenaza en cada esquina y hoy, cuando se caen las
mascaras y los discursos muestran sus huesos, se necesita un sistema de intervención estatal que
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estabilice los precios del mercado, que defienda la producción agrícola del país,
controlando
las
importaciones y defendiéndose de los productos transgénicos que aniquilan las agriculturas. El apoyo
a los pequeños y medianos agricultores ha de asegurar a la sociedad la comida necesaria para
producir y reproducirse de una forma humana y sustentable.
* Dagoberto Gutiérrez es Vicerrector de la Universidad Luterana Salvadoreña