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Inoculante
Es indudable que los suelos se han
degradado en su fertilidad química y física.
Estos procesos se han originado a
principios de siglo como consecuencia de
una agricultura que no tuvo en cuenta
principios de conservación, acelerando los
procesos de erosión de suelos y
nutrientes.
La remoción del suelo con la consiguiente
oxidación de la materia orgánica y la
consecuente pérdida de nitrógeno,
sumando a esto una crecientes extracción
de nutrientes con cultivos de altos
rendimientos, que no fue acompañada
con la reposición de los mismos por medio
de fertilizantes, desemboca en la actual
situación de deficiencia.
Las leguminosas forrajeras, especialmente
la alfalfa se caracterizan por tener altos
requerimientos de nitrógeno, en algunos
casos mayores a los que el suelo puede
brindar.
FBN (Fijación Biológica de
Nitrógeno)
El inocular semillas de especies leguminosas
forrajeras (alfalfa, melilotus, trébol, lotus, vicia, etc) con
cepas seleccionadas, proveyéndolas de un adecuado
número de bacterias altamente eficientes en FBN, nos
provee de varios beneficios:
Alto contenido proteico de la especie leguminosa.
Mayor cantidad final de forraje.
Un
forraje
con
alto
contenido
de
nitrógeno,
significando alto contenido de proteína. Por este
motivo los animales consumirán una ración de alta
calidad. Con una ingesta de estas características
aumentará la conversión de carne y leche.
Aprovechamiento del nitrógeno remanente por los
cultivos sucesores.
Práctica no contaminante, ya que proveemos al suelo
de importantes cantidades de nitrógeno, sin las
contaminaciones producto de los fertilizantes
químicos.
RIZOBIOS
Los rizobios son bacterias Gram negativas y estas son
habitantes comunes del suelo donde están presentes
las leguminosas. Sin embargo no todos los rizobios
pueden formar nódulos y/o fijar nitrógeno con todas
las leguminosas. Por ejemplo Sinorhizobium meliloti
La diferencia entre lo que el suelo aporta y lo que la
planta realmente necesita, puede ser obtenido de la
fijación biológica a través de la asociación simbiótica
entre bacterias y plantas.
es la bacteria específica para alfalfa. Esto permite
diferenciar a los rizobios por su infectividad o
capacidad de nodulación. Ocurre la misma situación
con el proceso de FBN, no siempre las cepas
altamente infectivas poseen alta efectividad o alta
capacidad de fijación de N.
Si bien las bacterias que infectan las raíces están
naturalizadas en muchos de nuestros suelos, con la
inoculación estamos incorporando cepas más
eficientes en la fijación biológica de nitrógeno (FBN).
Es decir que hay especificidad en la asociación o par
simbiótico. En otras palabras, determinadas especies
de leguminosas combinan mejor con determinadas
especies de rizobios e inclusive hay situaciones donde
la especificidad es tal, que variedades de una
leguminosas combina en forma específica con
determinadas cepas de rizobios.
Cuando en los suelos donde se cultiva la leguminosa
los rizobios requeridos están ausentes o no son
eficientes, se procede a la inoculación. La alfalfa no
es una especie nativa, por esta razón, los rizobios
específicos no se encontraban presentes en
nuestros suelos cuando se introdujo esta forrajera.
RIALFA es un inoculante específico que contiene
bacterias Sinorhizobium meliloti.
Cepas Especiales
Rialfa se produce con cepas de bacterias fijadoras de
nitrógeno especialmente seleccionadas. Este
producto contiene a la elaboración >1x109 bacterias/g
de inoculante y a su vencimiento >1x108 bacterias/g
de inoculante. Aplicando este inoculante de acuerdo
a las instrucciones enunciadas, proporciona 2x102
bacterias por semilla al vencimiento, cuando el
producto se almacena en condiciones refrigeradas.
Trabajos realizados en alfalfa mediante la utilización
de metodología isotópica (15N), con valores
promedios de biomasa seca variable entre 5600 y
17200 Kg /ha y un contenido de nitrógeno de 190 a
570 Kg / ha , señalan que la cantidad de nitrógeno
derivada de la fijación biológica varía entre 110 y 360
Kg/ ha. (datos correspondientes a Argentina).
Tecnología OsmoProtectora (TOP)
El formulado de Rialfa es único en el mundo por
realizarse bajoTecnología Osmo Protectora (TOP) que
produce un engrosamiento de la pared celular de la
bacteria. TOP es una Tecnología Innovadora que
promueve un alto rendimiento metabólico y
fisiológico de las bacterias con la inclusión de
sustancias osmoprotectoras, generando:
Mayor Protección celular.
Mayor viabilidad bacteriana en los envases.
Mayor supervivencia bacteriana sobre semilla.
El proceso de elaboración TOP conlleva las
siguientes ventajas:
• Mejora el estado fisiológico de las bacterias.
• Mejora la performance del inoculante ante
diferentes situaciones de stress con las que se
encuentra cuando se realiza el tratamiento de la
semilla.
• Aumento de la supervivencia bacteriana.
• Resistencia en mayor grado a la desecación.
• Permite mejorar la compatibilidad con terápicos
químicos.
• Es una formulación estable en el tiempo.
MARCA
COMERCIAL
CULTIVO
TIPO DE
BACTERIA
DOSIS
SOPORTE
ESTERIL
SOPORTE
RIALFA TOP
Alfalfa (Medicago sp)
Trébol de olor
Sinorhizobum
meliloti
200 mL/ 25 kg
de semilla
Sí
Líquido
(Meliotus sp)
Presentación Individual
200 mL para inocular 25 kg de semilla.
Respete la fecha de vencimiento.
Emplee solamente para semillas indicadas en este
envase.
No exponga el inoculante al sol y consérvelo a la
sombra en lugares frescos.
Modo de uso
Recubrimiento
Caja de 25 sachets de 200 mLc/u.
Dosis
El contenido de 1 sachet de Rialfa alcanza para
inocular 25 kg de semillas de alfalfa (Medicago sp.)
y tréboles de olor (Melilotus sp.). Semillas de otros
cultivos requieren inoculantes específicos.
Método húmedo
En un lugar a la sombra, protegido del viento y sobre
piso limpio, humedezca la semilla con agua potable
(1/2 litro/50 kg de semilla). Inmediatamente agregue
Rialfa en la proporción indicada: Remueva bien para
que todas las semillas se cubran con el inoculante.
Cargue la sembradora y proceda a sembrar.
Consiste en mojar las semillas con un adhesivo que
se mezcla conjuntamente con el inoculante, se
recubre la semilla con el polvo de revestimiento
(carbonato de calcio o dolomita). Por medio de esta
técnica se logra la protección de las bacterias de
factores adversos tales como la acidez del suelo, o de
los tegumentos de las semillas, los rayos solares, la
sequía, etc. Empleando este método se puede
adelantar la inoculación hasta 15 días antes de la
siembra, siempre que la semilla tratada se conserve a
una temperatura inferior a 150C.
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