Download ¿Qué tan efectiva es la política fiscal?

Document related concepts

Política fiscal wikipedia , lookup

Finanza funcional wikipedia , lookup

Estabilizador fiscal automático wikipedia , lookup

Conservadurismo fiscal wikipedia , lookup

Política económica anticíclica wikipedia , lookup

Transcript
MACROECONOMÍA
Profesor:
Rodrigo Fuentes
Ph.D. UCLA, EE.UU.
MIÉRCOLES 24 DE AGOSTO DE 2016
La clase ejecutiva es una alianza entre "El Mercurio" y la UC, fundada en 1998, para apoyar la formación profesional en Chile
I
Más información de este curso y diplomados en www.claseejecutiva.cl
¿Qué tan efectiva es la política fiscal?
La respuesta a esta pregunta es “depende”. Los resultados pueden ser diferentes, según el instrumento
que se utilice y las condiciones macroeconómicas del momento.
Para salir de la situación internacional de paupérrimo crecimiento, algunos economistas han
planteado la necesidad de estímulos fiscales. ¿Existe espacio para dicho estímulo?
ESTÍMULOS FISCALES
La política fiscal se refiere
al manejo de los instrumentos que tiene el gobierno
para cumplir su papel en
una economía moderna.
Estos instrumentos incluyen
modificar los distintos tipos de
impuestos (IVA, impuesto a la
renta, impuestos específicos
como a los cigarrillos, gasolina,
etc.), transferencias a personas
y empresas, gasto público
(educación, salud, administración del Estado, etc.), inversión
pública y emisión de deuda
pública.
En macroeconomía se habla
de un estímulo fiscal o una política fiscal expansiva cuando
el gobierno, utilizando alguna
combinación de estos instrumentos, intenta expandir la
demanda agregada (por ejemplo, bajando impuestos, aumentando gastos y/o inversión
y/o transferencias) y de esta
forma generar mayor actividad
económica. Esta idea proviene de la tradicional escuela
keynesiana que planteaba la
noción de que una política
fiscal expansiva generaba un
efecto multiplicador sobre la
actividad económica.
EL EFECTO MULTIPLICADOR
El diagnóstico desde el
punto de vista keynesiano de
la Gran Depresión del año
1929 era que existía capacidad
ociosa en la economía y que
se requería de un estímulo
de demanda agregada para
hacerla crecer. Así, una mayor
demanda llevaba a las empresas a producir más, generando
más empleo y más ingresos
para los individuos, quienes a
su vez incrementan el consumo, lo cual vuelve aumentar la
demanda agregada generando así más actividad y más
ingreso, lo que multiplica el
impacto de la política inicial.
Este análisis no es válido en
cualquier estado de la economía que involucre un alto
desempleo y un nivel de actividad inferior al de “tendencia”,
ya que las consecuencias de
la política fiscal dependen en
forma importante de la situación en la cual se encuentre la
economía.
En primer lugar es necesario
conocer cuál es la capacidad
que tiene el gobierno de implementar una política activa;
es decir, es necesario conoce
cuál es su situación presupuestaria.
En segundo lugar, en caso
de poder realizar un estímulo
fiscal, su efecto dependerá de
cómo reaccionarán los agentes
privados ante este cambio de
condiciones. A continuación
me referiré muy brevemente a
estos dos puntos.
LA RESTRICCIÓN
PRESUPUESTARIA
Al igual que cualquier agente
en la economía, el gobierno
enfrenta una restricción presupuestaria. Este tema, el de
la restricción presupuestaria,
es de la mayor importancia en
economía y ha cobrado mayor
relevancia en la crisis actual,
precisamente debido a los
serios problemas fiscales que
enfrentan las economías desarrolladas. Al igual que en las
teorías modernas del consumo,
la dimensión temporal de las
acciones del gobierno juega un
rol crucial.
Cada año el gobierno debe
solventar sus gastos, transferencias, inversiones y pago de
intereses de la deuda. Esto es
financiado con impuestos y con
emisiones de nueva deuda. En
el caso chileno, así como en
varios otros países, no existe
la posibilidad de financiar el
déficit fiscal con impuesto
inflación (emisión de dinero),
ya que el Banco Central, por
ley, no puede prestar dinero
al fisco. Un gobierno puede decidir disminuir la deuda, de un
período a otro, lo cual requiere
que la recaudación vía impuesto supere al gasto público más
los intereses.
El superávit fiscal primario se
define como la recaudación tributaria menos todos los gastos
de gobierno, transferencias e
inversiones (se excluye el pago
de intereses). Si un gobierno tiene un stock de deuda,
necesita generar un superávit
primario, a lo largo de los años,
de forma tal que el valor presente de todos esos superávit
primarios sea igual a la deuda
más sus intereses. Esto es la
restricción intertemporal del
gobierno. Note que no requiere generar superávit inmediatamente, sino que puede hacerlo
a lo largo de los años.
La importancia de la restricción es vital para poder aplicar
un estímulo fiscal, ya que esto
debe ser financiado con deuda
para que sea realmente un
estímulo (en ausencia de la posibilidad de impuesto inflación).
Si el gobierno no cumple con
la condición anterior, de ser
capaz de generar un superávit
que en valor presente pague la
deuda inicial, probablemente
no será sujeto de crédito y no
podrá aplicar una disminución
de impuestos o un aumento
de gastos para incrementar la
demanda agregada.
Otra implicancia muy
importante de una restricción
presupuestaria para un agente
económico es la existencia de
un costo de oportunidad. Si
bien mencionar este concepto,
el de costo de oportunidad,
puede resultar obvio para
muchos lectores, al parecer no
lo es tanto cuando uno escucha
opiniones como que el Estado
puede dar pensiones más altas
sin sacrificar otras cosas como
educación, seguridad, etc.
La alternativa es financiarlas
con impuestos, pero estos en
general tendrán efectos sobre
la actividad económica a través
de menor inversión y menor
consumo.
Por otra parte, debido a
la restricción presupuestaria
intertemporal, la vía de endeudamiento no siempre está disponible o, si lo está, se deben
tomar en cuenta las transferencias intergeneracionales;
es decir, futuras generaciones
pagan por las actuales.
La escuela macroeconómica
más neoclásica reaccionó al
enfoque keynesiano tradicional que planteaba la idea de
un efecto multiplicador de la
política fiscal sobre la actividad económica. Esta escuela,
liderada por los precursores
de las expectativas racionales,
plantea que en presencia de
agentes privados que toman
decisiones en un horizonte
intertemporal y forman expectativas respecto a las variables
económicas relevantes para
sus decisiones, la política fiscal
puede tener un efecto distinto
al esperado.
En este contexto, los
agentes privados toman en
cuenta que un mayor gasto
fiscal corriente (manteniendo
constante los impuestos del
período) debe ser financiado a
futuro con mayores impuestos.
Esto cambiará las decisiones
de consumo e inversión de los
agentes hoy día, para enfrentar esos mayores impuestos
futuros, haciendo que la
efectividad de la política fiscal
expansiva disminuya.
Estos elementos de formación de expectativas han sido
incorporados por los seguidores de la corriente keynesiana
en su análisis de forma que, a
través de diferentes mecanismos, han dado cabida para la
existencia de un efecto multiplicador de la política fiscal. De
cualquier forma, la magnitud
de dicho efecto depende de
la capacidad del gobierno de
financiar dicho estímulo fiscal.
Pero en definitiva, ¿qué tan
efectiva es la política fiscal?
Esto sigue siendo una pregunta sin una respuesta clara en
la literatura, depende de las
condiciones de la economía
y del tipo de política que se
implemente. Los resultados
pueden ser diferentes si se
rebajan impuestos o si se
aumenta el gasto público en
general, o partidas específicas
de gasto.
de algunos países para 2013
y 2014. Salvo Alemania, con
uno pequeño, los otros países
muestran déficit importantes; es
decir, su política fiscal ha tendido
a ser expansiva, salvo en el caso
de Grecia que se vio obligada a
hacer un ajuste importante del
déficit fiscal.
Pero más importante aún,
es el enorme nivel de deuda
pública que muestran estos
países. La Figura 3 representa
los niveles de deuda pública
como porcentaje del PIB, la cual
alcanza al 80% en 2014, donde
nuevamente destacan Grecia
y también Italia. Estos gráficos
obviamente no son conclusivos,
pero dan una idea de lo difícil
que es pensar en un estímulo
fiscal para estas economías.
Por otra parte, las tasas de
interés en el mundo están
bastante bajas, pero esto no es
cierto para países o gobiernos
altamente endeudados. La
razón es que la tasa de interés
que enfrentan en el mercado
tiene que ver con el riesgo de
no pago, el cual a su vez está
relacionado con el nivel de
endeudamiento.
EFECTIVIDAD DE
LA POLÍTICA FISCAL
RECETAS FISCALES PARA ENFRENTAR LA CRISIS
La crisis financiera de 2008 y
la posterior crisis en varios países
de la Unión Europea generaron
una serie de discusiones en
torno a posibles soluciones para
salir de la crisis. Los organismos
internacionales procedieron a
dar créditos a los países más
complicados con el objeto de
enfrentar la crisis a cambio de
hacer ajustes importantes en sus
economías.
Desde el momento en que
se desató la crisis, Europa
ha entrado en una fase de
crecimiento muy bajo, tal como
lo señala la Figura 1. En los años
previos al 2008, la economía
crecía algo por sobre el 3%, el
2009 experimentó una fuerte
recesión con una disminución
en el PIB de 4,4%. Desde allí
la economía se ha recuperado,
pero sin alcanzar las tasas de
crecimiento previas.
Para salir de esta situación de
paupérrimo crecimiento, algunos
economistas han planteado la
necesidad de estímulos fiscales.
Pero, ¿cuál es la situación fiscal
de estos países? ¿Existe espacio
para dicho estímulo? La Figura
2 enseña el superávit fiscal
PUBLICACIÓN DE HOY: Selección del curso "Macroeconomía" de los Diplomados de Ingeniería Industrial UC-la clase ejecutiva.