Download No existe evidencia científica: teoría genética de la homosexualidad

El pasado 14 de abril el Dr. Jokin de Irala impartió una conferencia en el colegio,
organizada por el APA, bajo el título:
“Homosexualidad ¿tendencia, opción, alternativa, trastorno?”
En la entrevista que publicamos podemos conocer sus opiniones sobre el tema.
No hay evidencia científica sobre la teoría genética de la
homosexualidad”
“
Introducción
La homosexualidad se ha convertido en los últimos años en un frecuente tema de
conversación y, más aún, en un verdadero debate social. ¿Es la homosexualidad
una forma de vida, un trastorno o una simple alternativa? ¿Qué papel
desempeñan en ella la educación y la formación en valores dentro de un
ambiente abiertamente permisivo? ¿Existen personas homosexuales que han
modificado su conducta?
¿Cómo se ha extendido tanto la percepción pública de que la
homosexualidad es una opción tan normal como la heterosexual?
Existe mucha documentación que describe cómo la Asociación de Psiquiatras
Americanos (APA) eliminó la homosexualidad como “alteración” en el manual de
clasificación de enfermedades en los años 70. El cambio se realizó después de
una presión sin precedentes de los activistas homosexuales y por votación de
una minoría de los miembros de la APA. No fue fruto de un debate o un análisis
científico sereno y serio; esto debería preocuparnos (Rondeau P. Selling
Homosexuality to America). No creo que haya ningún precedente similar en la
medicina.
Pero ahora quien sostenga una idea distinta a los colectivos de gays es
tachado de “homófobo”.
No debemos rasgarnos las vestiduras cuando alguien opine que la
homosexualidad no es una orientación normal . Expertos como Spitzer, que fue
uno de los activistas que luchó para que no se considerara la homosexualidad
como una enfermedad, se dedican ahora al tratamiento de la homosexualidad.
Spitzer cambió de opinión y trabaja en una asociación de especialistas, ayudando
a personas homosexuales a reencontrarse con su heterosexualidad
(http://www.narth.com).
Deberíamos también respetar a los científicos que valoran la homosexualidad
como una alteración de la identidad sexual.
¿La homosexualidad tiene raíces biológicas?
No hay, a día de hoy, ninguna evidencia científica seria que apoye la teoría tan
furibundamente sostenida por algunos de un origen genético de la
homosexualidad (Nicolosi J. A parents guide to preventing homosexuality).
¿Cómo surge la homosexualidad en una persona?
La homosexualidad es la autodenominación que hace uno de sí mismo cuando
tiene actividad homosexual. El proceso comienza por un desarrollo inadecuado
de la afectividad. Hay muchas causas (como relaciones afectivas deficientes con
el padre del mismo sexo o la exclusión y rechazo en un colegio) que pueden
conducir a una persona a tener una baja autoestima como varón o como mujer.
Esta baja autoestima se manifiesta en la pubertad como una orientación sexual
de tipo homosexual. Los padres y educadores deben saber que en la infancia y la
adolescencia el joven puede tener una cierta confusión sobre su identidad sexual,
lógica porque está en un periodo de maduración biológica y psicológica. Esto no
es homosexualidad. Con una buena orientación las dudas se resuelven con
normalidad estas ambigüedades propias de la adolescencia. Un problema
añadido es cuando, por su entorno o por tener una familia desestructurada, no
consigue esa buena orientación.
¿Un homosexual puede modificar su comportamiento sexual?
Como es sabido, los colectivos de gays y lesbianas iniciaron hace tiempo una
campaña sistemática para crear en la opinión pública la convicción de que la
homosexualidad no tiene marcha atrás, y que pretender intentarlo es fruto de la
homofobia o de la ignorancia –en el mejor de los casos- y empeora siempre la
situación del que la padece. Debemos respetar que haya personas que quieran
vivir conforme a una orientación homosexual, pero también entiendo que se
debe respetar a las personas que desean intentar un cambio hacia la
heterosexualidad, coincidiendo con lo que dice su sexo biológico y sus valores.
Existen, muchos especialistas que trabajan a diario en la ayuda y terapia de
homosexuales que quieren, y consiguen, superar su homosexualidad (p.ej. Van
den Aardweg GJM. Homosexualidad y esperanza; Cohen R. Comprender y sanar
la homosexualidad). Algunos de estos terapeutas, como Richard Cohen, son
incluso exhomosexuales que, después de un largo camino de sufrimiento y
esfuerzo, ahora viven su heterosexualidad con toda normalidad y saben de lo
que hablan por experiencia propia.
¿Qué eficacia tiene la terapia reparativa?
Es cierto que la terapia que se dirige a modificar la conducta y orientación
homosexual, conocida como “terapia reparativa” tiene sólo varios decenios de
vida y por lo tanto es mejorable; aunque también es cierto que la Asociación
Americana de Psicología ha reconocido su eficacia y su validez ética
(“Psychotherapy: Theory, Research, Practice, Training”, 2002; 39: 66-75).
Afortunadamente ya hay estudios en revistas de prestigio como el publicado en
el Archives of Sexual Behavior (2003; 32: 403-17), con 200 casos que reflejan la
eficacia de esta psicoterapia. La mayoría obtuvieron cambios hacia la orientación
heterosexual. Estos cambios fueron sobre todo hacia una orientación
predominantemente heterosexual, y en menor número de forma exclusiva.
A mí, lo que me sorprende es que se defienda la “plasticidad” de la orientación
sexual para que alguien con cierta orientación homosexual se le recomiende una
psicoterapia afirmativa con objeto de desarrollar su incipiente homosexualidad y
“elimine” lo que tenga de heterosexual, y no se use el mismo argumento para lo
contrario. Me sorprende que no se respete la libertad del paciente a elegir qué
hacer con su vida y se le quiera privar de un medio lícito para conseguir una
reorientación sexual o disminuir el distrés psicológico que puede estar sufriendo.
Me sorprende el interés de los colectivos gays por desanimar o desacreditar
(“homofobia internalizada”) a aquellas personas con orientación homosexual que
desean vivir conforme a sus valores morales o sus creencias, y no se les ayuda
como ellos quieren que se les ayude, por un dudoso paternalismo con tintes
pseudocientíficos. Por último, con el dineral que algunas administraciones están
gastando en operaciones de transexualidad, no estaría de más que invirtieran en
formar terapeutas que puedan ayudar a todas aquellas personas homosexuales
que deseen redescubrir su heterosexualidad y que no tienen a dónde acudir o no
cuentan con los medios económicos necesarios.
¿Se puede decir que la homosexualidad esconde alguna enfermedad
interior?
En EE.UU. han aumentado las protestas de personas exhomosexuales
reclamando para otros el derecho a poder buscar ayuda y a poder reencontrarse
con su heterosexualidad perdida por causas complejas y múltiples y que los
terapeutas identifican y ayudan a superar (http://www.peoplecanchange.com/).
Se sienten oprimidas por la corriente intolerante que no acepta más que una
opinión sobre el tema y sin cuya aceptación uno es etiquetado de homófobo.
Cualquiera puede valorar la información científica exhaustiva presentada por
profesionales de la salud en internet (http://www.narth.com/). La orientación
homosexual es una defensa ante el dolor. Hablando de modo no científico se
podría comparar la homosexualidad con la fiebre, en el sentido de que nos avisa
sobre una dolencia anterior que está provocando daños en el organismo. Una
persona homosexual presenta una orientación homosexual como reacción a un
sufrimiento en su autoestima de varón o mujer. Si se les ayuda a descubrir esta
causa y a superarlo puede reaparecer su heterosexualidad.
Desde su posición como médico, ¿cómo valora la defensa del episcopado
del matrimonio heterosexual?
Por mucho que se quiera difundir que la Iglesia o sus obispos odian a los
homosexuales, el punto número 2358 del Catecismo de la Iglesia Católica dice
claramente que las personas homosexuales "deben ser acogidos con respeto,
compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de
discriminación injusta". Habría que distinguir entre el respeto por una persona y
la no aceptación de sus actos como indiferentes o buenos . Esta distinción no es
un atentado contra la libertad ni es discriminación. Sin embargo, obligar a
alguien a aceptar como bueno lo que hace otra persona, cohíbe su libertad. La
Iglesia está evidentemente en la línea del respeto, aunque no dé por bueno un
estilo de vida.
¿Qué tipo de problemas médicos tienen las personas homosexuales?
Según varios estudios científicos de reciente publicación, se dan alteraciones en
la personalidad, como la neurosis autocompasiva, caracteres obsesivo
compulsivos, y varios datos que nadie quiere sacar: se dan el doble de casos de
violencia doméstica en hogares homosexuales que en heterosexuales; entre este
colectivo existe el doble de casos de intentos de suicidios que en los
heterosexuales y otros problemas serios que no son opiniones mías sino que
cualquiera puede encontrar en revistas médicas.
¿Qué piensa sobre la posibilidad de que los homosexuales puedan
adoptar?
Primero hay que decir que la adopción no es ningún derecho y que prima el
interés y la protección del niño. Centenares de estudios aseguran y verifican que
cualquier indicador de salud como el nivel de educación alcanzado, el grado de
integración social y delincuencia, el consumo de substancias, los trastornos de
comportamiento alimentario como la anorexia son mejores entre niños parejas
heterosexuales establemente comprometidos en comparación con cualquier otra
opción. La cuestión no hay que plantearla en casos extremos sino en la
normalidad: ¿Cuál es la mejor opción para un niño? Me parece muy grave que se
experimente en este campo, porque está en juego la felicidad y la buena
educación de los niños. No es lógico plantear la adopción por personas
homosexuales cuando en todo el país hay listas de espera de parejas
heterosexuales idóneas, es decir cuando existen opciones mejores para los niños.
Por cierto, los estudios, como el de Sevilla, que se han presentado recientemente
y que dicen que no existe diferencias entre niños adoptados por parejas
homosexuales y los adoptados por heterosexuales, están mal realizados y no se
puede extraer ninguna conclusión.
Ahora mismo, ¿dónde está centrado el debate sobre la homosexualidad?
Es una pena, pero realmente el debate actual no tiene nada de científico y es
demasiado emocional. Creo sinceramente que éste es un problema que nos
afecta a todos. Necesitamos que haya padres activos en la lucha por sus
derechos porque los grupos de presión homosexuales han conseguido que no se
pueda tener ideas distintas a las suyas porque, en cuanto lo dices, te tachan de
homófobo. Pienso que no hay que ser ingenuos y hay que educar a los hijos con
nuestros criterios. A cualquier joven que tuviera dudas sobre su orientación
sexual, le invitaría a que visite la interesante página web
http://www.freetobeme.com. Los padres y educadores pueden sacar también
provecho de ella. Si alguien no estuviera de acuerdo con todo esto, que lo
investigue personalmente antes de descalificar.
Jokin de Irala es Doctor en Medicina por la Universidad de Navarra y Doctor en
Salud Pública por la Universidad de Massachussets. Con amplia experiencia
docente e investigadora en los campos de Epidemiología General, Reproducción
Humana y Medicina Preventiva, Jokin de Irala es también profesor del
recientemente creado Master de Matrimonio y Familia. Es además experto en
Planificación Familiar Natural y autor de numerosos artículos y libros sobre los
temas de su especialidad.
Selección de enlaces interesantes:
http://www.peoplecanchange.com/
Testimonios y protestas de personas exhomosexuales reclamando para otros el
derecho a poder buscar ayuda y a poder reencontrarse con su heterosexualidad.
http://www.narth.com/
Profesionales de la salud en Internet.
http://www.freetobeme.com
Resuelve las dudas más comunes sobre orientación sexual. Tiene apartados en
castellano. Especialmente buena.
http://www.unav.es/preventiva
Documentos diversos que se van actualizando, sobre tabaquismo, sexualidad,
etc.