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Religión en Mesopotamia wikipedia , lookup

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Las excavaciones arqueológicas, que comenzaron en el siglo XIX,
revelan la existencia de asentamientos humanos en Mesopotamia a
partir del 10.000 a.C. La presencia del hombre en épocas tan remotas
demuestra que las características geográficas y climáticas eran
favorables para que sus habitantes dejaran la vida nómada, basada
en la caza y la recolección, por el sedentarismo, apoyado en la
agricultura.
Es importante recalcar que en esta región no se desarrolló una sola
civilización llamada Mesopotamia, sino que se sucedieron diferentes
pueblos -sumerio, acadio, asirio y babilónico, principalmente-,
que fueron adoptando los adelantos de sus predecesores. Esto,
porque a diferencia del valle del Nilo, Mesopotamia carecía de
defensas naturales, por lo que periódicamente era invadida por
pueblos guerreros, provenientes de las zonas montañosas y los
desiertos circundantes, que buscaban mejores condiciones de vida.
Geográficamente, esta zona se encuentra dividida en dos: al norte, la
alta Mesopotamia, de llanuras altas, montañosas y frías, donde se
instalaron los asirios y acadios; y al sur, la baja Mesopotamia,
formada por llanuras fértiles de clima cálido que fueron habitadas por
sumerios y babilónicos.
Durante el gobierno del
rey Hammurabi se elaboró
el primer código de leyes
escritas que se conoce en
la historia de la
Humanidad. El código de
Hammurabi, conocido por
la célebre sentencia “ojo
por ojo, diente por
diente”, estaba
conformado por 282 leyes
y decretos.
• Si un ciudadano acusa a otro de homicidio,
pero no puede demostrarlo, entonces el que lo
acusó será muerto.
• Si un niño ha pegado a su padre, a ese niño
se le cortarán las manos.
• Si un hombre ha destruido el ojo a un
hombre libre, a él también se le destruirá un
ojo.
• Si ha roto un hueso al otro, a él se le
romperá un hueso.
•
Los datos sobre las religiones mesopotámicas provienen de las tablillas de arcilla halladas en
las ruinas de Babilonia, Nippur y Ur, de la gran biblioteca reunida por Assurbanipal en Nínive
(siglo VII a.C.) y de los restos arqueológicos de templos, vasos pintados y estelas con bajos
relieves.
•
Alrededor del 4000 a.C. se empezó a practicar el culto a las fuerzas de la naturaleza,
consideradas divinidades de la fertilidad.
•
El rey o emperador era la autoridad
máxima. Su poder era absoluto,
hereditario y de carácter divino; pero no
era considerado un dios como entre los
egipcios, sino un intermediario entre los
dioses y sus súbditos. Por lo tanto, era el
primer sacerdote y quien administraba el
Estado y dirigía el ejército. En las
decisiones importantes era asesorado por
un grupo cercano de sacerdotes.
•
No existía la propiedad privada, ya que los
terrenos adyacentes a la ciudad
pertenecían al dios.
•
Respecto a las diferencias sociales,
estaban los hombres libres, entre los que
se contaban la nobleza, los sacerdotes, los
funcionarios reales, los pequeños
propietarios y los comerciantes; los
meshkin u hombres insignificantes, ex
esclavos que habían comprado su
libertad; y los que no eran nada,
esclavos y prisioneros de guerra.
•
La principal riqueza de la región era la
agricultura.
•
Para clasificar el arte
mesopotámico se han
considerado tres factores:
• La guerra fue una
preocupación constante, lo
que determinó que gran
parte del arte se dedicase a
la glorificación de las
victorias militares.
• El rol destacado de la
religión en los asuntos del
Estado, por lo que se dio
primordial importancia a los
edificios religiosos. Gran
parte de las esculturas eran
con fines espirituales.
• La influencia del
entorno natural. Como no
habían piedras ni madera en
el valle, a excepción de lo
que se importaba, debieron
utilizar en sus
construcciones ladrillo y
adobe -mezcla hecha en
base a lodo arcilloso-, que
son materiales de menor
duración. Por eso han
quedado tan pocos vestigios
de esta cultura.
Los egipcios fueron indudablemente un pueblo adelantado, que junto con desarrollar un
considerable poderío territorial se anticipó a muchas actividades que conocemos hoy en día, como
el arte, los cultivos o la astronomía. Desde los inicios de su historia crearon una sociedad
basada en la agricultura, aprovechando las bondades del río Nilo, que de no existir
habría hecho imposible la existencia humana en ese lugar. Por lo mismo, el gran
historiador griego Herodoto se refería a Egipto como el “don del Nilo”.
•
Desde tiempos remotos el
desarrollo de Egipto estuvo
vinculado con el valle del Nilo.
Este cauce determinó
asentamientos agrícolas
tempranos y generó una
cooperación social
absolutamente necesaria para
poder controlar las aguas
durante las crecidas del río.
Egipto es reconocido como el
primer Estado importante en la
historia de la humanidad, y
surgió a partir de la unificación,
hace casi 5.000 años, de los
pequeños asentamientos que
entonces existían en el Alto y
Bajo Egipto.
•
Los egipcios fueron un pueblo tremendamente apegado a los
mandatos divinos. Su religión se desarrolló a lo largo de unos tres mil
años, en los que escasamente recibió alguna influencia externa. Para
ellos, la concepción del mundo estaba dada por la idea primigenia de
un caos que amenazaba con volver a ocurrir, siendo la voluntad de los
dioses la única forma de mantener un equilibrio, y la razón por la cual
la religión -de características rituales- buscaba asegurar el favor
divino y la vida después de la muerte.
•
Antes de que se produjera la unificación de Egipto (3100 a. C.), en el
valle del Nilo existían numerosos cultos y dioses locales, que por lo
general se representaban bajo la figura de un animal o mezclando
esta con la de un ser humano. Sin embargo, al quedar todo bajo un
mismo imperio, los faraones se presentaron como la encarnación del
dios Horus, hijo de Osiris y de la diosa Isis, pero no se suprimieron
los cultos locales. Así, el dios Ptah era el creador de la mitología de
Menfis; y Atón, relacionado con Ra, el dios Sol, en la de la Heliópolis