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MIÉRCOLES
Dinámica de Presentación
Presentarnos de manera rápida sin entrar demasiado.
Se les dice que piensen estas frases incompletas.
Soy...
A lo que más me dedico.... ¿Cómo me visualizo?
Qué/Quién me dio el empujón....
Primeros sentimientos al aterrizar en este lugar....
Juego de la silla.
Presentación del lema
Se va sacando el dibujo por partes
Lluvia de ideas: ¿Qué te sugiere?
Se pone el lema: ENTRA EN EL CORAZÓN DE DIOS.
Entrar primero en nuestro propio corazón
Visita al cardiólogo y hacernos un chequeo de forma personal.
Se les entrega el documento...
Párate y despacio ausculta tu corazón:
A qué ritmo palpita últimamente...
¿Qué música te habita? (piensa en alguna canción)
Por quién late...por quién está habitado...
Arritmias: Lo desconcertante, lo incoherente, los descentramientos...
Taquicardias: Motivos ilusionantes por los que se te acelera....
¿Hay alguna parte poco oxigenada? ¿Qué te lo obstruye o ahoga?
¿alguna parte muerta, necrosada? (algo en tu vida que des por perdido...)
¿Ha entrado en parada? (Algunos golpes que lleves....)
Marcapasos o baypasss (las ayudas que en tu vida te posibilitan centrarte,
reconducirte, oxigenarte....
¿Por qué suspira? Las grandes esperas de tu corazón, lo que esperas de la vida,
de los demás, de Dios, de esta Pascua...
Dinámica escuchar nuestro corazón
Dios nos ha traído hasta aquí para que lleguemos a conectar con su corazón pero no
cada uno por libre, sino en comunidad, hoy quiere hacernos comunidad de discípulos
“Tenían una sola alma y un solo corazón”, vamos hacer el ejercicio de conectar con los
corazones de los que estamos aquí.
Nos vamos levantando y vamos a intentar escuchar el corazón de este grupo que quiere
ser comunidad en torno a Jesús.
Se realiza el gesto.
¿Cómo me he sentido?
Apuntamos (en papel continuo alrededor del cartel actitudes que han sido claves para
poder realizar el gesto.
Escucha, cercanía, abajamiento, salir de mí, atención, delicadeza....
Con estas actitudes escogemos a alguien para compartir (Escuchar el corazón del otro)
lo que hemos puesto en nuestro chequeo.
Puesta en común
A medida que compartimos ponemos nuestro nombre (possit) alrededor, simbolizando
que queremos ser comunidad de discípulos a la escucha....
Celebración de la noche
Se decora con el cartel de la tarde y un cofre donde estarán las llaves.(símbolo de la
Pascua)
o Se puede empezar cantando: Señor Jesús enséñanos a ver...
o Introducción: A partir del gesto de Juan: Recostarse sobre el pecho de Jesús.
Nuestros corazones son complicados y fascinantes y todos nosotros seríamos más amables con nosotros
mismos y encontraríamos nuestras vidas más interesantes si escucháramos con más regularidad sus
latidos. Ése es también el secreto en nuestra relación con Cristo. Necesitamos poner un estetoscopio
contra su corazón y escuchar su ritmo complejo y fascinante. ¿Cómo lo hacemos?
En el evangelio de Juan se nos da para esto una imagen mística. En el relato de Juan de la Última Cena
hay un discípulo, a quien él describe como “aquel a quien Jesús amaba”, que se reclina en el pecho de
Jesús. Obviamente está demostrando una profunda intimidad, pero también intenta transmitir algo más. Si
apoyas tu oído sobre el pecho de alguien, puedes oír el latido de su corazón y ese sonido comienza
finalmente a expandirse suavemente a través de todo tu propio cuerpo.
Así pues, para Juan ésta es la imagen del perfecto discipulado. Nosotros somos “aquel a quien ama
Jesús” y necesitamos reclinar nuestras cabezas en el pecho de Jesús de forma que oigamos el latido de
su corazón y, desde ahí, asomarnos al mundo. El estar en sintonía con el latido del corazón de Jesús y el
recostarnos en su pecho con intimidad nos dará a la vez la visión y alimento que necesitamos para vivir
nuestras vidas como deberíamos.
Como sabemos, “aquel a quien Jesús amaba” podría haber sido históricamente el mismo Juan. Pero aquí
el evangelio se refiere también a cada uno de nosotros. Efectivamente, cada uno de nosotros tiene que
ser el “discípulo amado”, que se reclina en el pecho de Jesús con especial intimidad.
Y ése es nuestro reto y nuestra llamada: Tener tal intimidad con Cristo que nos lleve a reclinarnos sobre
su pecho, a oír sus latidos, y a mirar al mundo desde esa perspectiva. Pero, ¿cómo hacemos eso en la
práctica?
Cuando estemos escuchando el latido del Corazón de Jesús y mirando al mundo desde allí, percibiremos
lo que significa simple y llanamente amar, por encima de nuestras opiniones y de las de los demás.
o Power point: (musiquita y latidos) ¿Qué necesito mirar con tu corazón Señor?
Quédate con una o dos imágenes que lo expresen...
o LLAVES
Es necesario disponernos, las actitudes que veíamos esta tarde que nos eran útiles para
escuchar el corazón de los demás también lo pueden ser en esta Pascua para escuchar el
corazón.
La Palabra también nos presenta y ofrece distintas actitudes-llave para vivir esta
experiencia de Pascua.
Se va leyendo la Palabra y se ponen los verbos, escritos sobre llaves grandes, de colores
que se van poniendo alrededor del cofre.
Llaves:
1. Llave: Escucha
“Cada mañana me espabila el oído, para que escuche como los discípulos. El Señor me
ha abierto el oído y yo no me he resistido, ni me he echado atrás” (Is 50, 4-5)
“El primer día de los ácimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, sus discípulos
preguntaron a Jesús: ¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la cena de pascua?” (Mc
14, 12)
Escucha atenta, a lo que Dios quiera decirme, atreverse a preguntar, preguntarle al
Señor tus planes contigo, y atreverse a esperar que te responda.....
Piensa cómo vives tú esto de callar y de escuchar, esto de esperar con paciencia...
2. Llave: Confiar
“El Señor me ayuda por eso soportaba los ultrajes...sabiendo que no quedaría
defraudado. Mi defensor está cerca...Sabed que me ayuda el Señor ¿Quién me
condenará?” (Is 50, 7-9)
Otra actitud clave para Jesús para vivir su Pascua, la de dejarse en manos del Padre,
también a ti se te propone, confiar en que Él es quien te ha traído hasta aquí, y que está
más interesado que tú mismo en que vivas esta Pascua, en hablarte, en entrar en tu
corazón... ¿Cómo vienes tú de confianza?
3. Llave: Derrochar
“Estaba Jesús en Betania, en casa de Simón el leproso, sentado a la mesa, cuando llegó
una mujer con un frasco de alabastro lleno de perfume de nardo puro, que ra muy caro.
Rompió el frasco y se lo derramó sobre su cabeza. Algunos indignados comentaban
entre sí:
- ¿A qué viene este despilfarro de perfume?...Y la criticaban.
Jesús, sin embargo, replicó: - Dejadla, ¿Por qué la molestáis? Ha hecho conmigo una
obra buena” (Mc 14, 3-6)
Este pasaje marca el inicio de la Pasión, puesto estratégicamente al indicio nos marca
otra clave importante la del no reservarse, la de la generosidad llamativa y la gratuidad
incomprensible, la del darse sin medir, la de dejar las razones.
¿A qué se te invita con esta actitud en esta Pascua?
4. Llave: Despojarse.
“Tened los sentimientos de Cristo Jesús...se despojó de su grandeza, tomó la condición
de esclavo...” (Flp 2, 6)
“Se levantó de la mesa, , se quitó el manto, tomó una toalla y se la ciñó a la cintura” (Jn
13, 4)
En su pasión Jesús va aceptando el ser despojado progresivamente de todo, solo se
quedará con su fidelidad al Padre.
También a ti se te propone entrar en el corazón del Señor despojándote, de tanto como
nos estorba y aleja; nuestros miedos, nuestras teorías bien montadas, nuestras
preocupaciones, nuestra poca sencillez...
¿De qué tendrías que despojarte para recostarte de verdad sobre el pecho de Jesús y
percibir su latido?
Dale nombre a tu llave y si quieres entrar hazlo.
Coge cada uno la llave, expresa lo que significa para él y entra.
Detrás de unas telas o papel continuo habrá un texto con el nombre de cada uno:
¡X cuánto deseo celebrar esta Pascua contigo!
Acabamos escuchando la canción: En ti vivo en ti.
En ti
En ti, vivo en ti. En mi, vives en mi, y muy adentro.
Para ti y por ti, vivo y sueño y en mi vivir en ti a los demás me entrego.
A los demás me entrego en mi vivir en ti.
Y es que mi más bello poema es vivir mi vida en ti,
es señalar los caminos y tratar de sonreír…
Y ES QUE MI MÁS BELLO POEMA NACE DEL ECO DE TU VOZ
NACE DEL CALOR DE LAS MANOS QUE SE UNEN EN TU AMOR.
POR ESO VUELVE A SENTIR EN TU ROSTRO LA LUZ DE DIOS
SIENTE EN TU VIDA SU CANCIÓN.
DIOS TE ESPERA SIEMPRE PUES ÉL TE QUIERE BIEN
SUELTA LOS HILOS DE TU CUERPO QUE LO IMPIDEN MOVER
Y todas mis canciones y todos mis poemas los dedico a ti, mi Señor.
En todos los momentos, en cada verso que pienso estás conmigo, mi Señor.
… SUELTA LOS HILOS DE TU CUERPO QUE LO IMPIDEN MOVER