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Textos premiados
Villancicos
por Teresa Núñez
SI PONEMOS AMOR
( Villancico al estilo de Francisco de Asís )
En Belén de Judea ya no hay pastores
que canten y que bailen toda la noche.
Ya no hay pastores,
que sólo hay odio helando
los corazones.
Ay, qué bueno, Señor,
si donde el odio
ponemos el amor.
El Niño tiene pena sobre la escarcha
porque el rencor lo hiere como una lanza.
Sobre la escarcha,
el Niño Dios tirita
llanto de plata.
Ay qué bueno sería,
si donde el odio
ponemos la alegría.
Niño Jesús del cielo, pequeño mío,
no llores más que el mundo muere de frío.
Pequeño mío,
ven a alegrar la sombra
con tu cariño.
Ay qué bueno, rezando
se nos ha ido el odio
sin saber cuándo.
Que suenen las guitarras, no la tristeza,
y se apaguen los vientos de tantas guerras.
De tantas guerras
que sólo quede el brillo
de las estrellas.
Ay qué bueno cantar,
si donde el odio
hoy ponemos la paz.
Primer Premio de Letras para Villancicos
Madrid, 1995
QUE HAY UN NIÑO DORMIDO
Callad, callad,
que hay un niño dormido
en un portal.
No mováis los laureles,
que la voz de la luna
velarlo puede.
Sabanita de holanda,
corales finos.
En un trono de paja
duerme mi niño
Venid, venid,
que ha llegado diciembre
color de abril.
Y no dejéis que llore
si la escarcha es un río
con flor de noche.
Sonajeros de plata,
nieve y armiño.
El amor es un pan
recién nacido.
Corred, corred,
que un cometa se cae
sobre Belén.
Suenen ya los panderos
pues su luz son los ojos
del Rey del Cielo.
Pájaros de Betania,
volad al son.
Hoy le llevo a ese Niño
mi corazón.
Segundo Premio de Letras para Villancicos
Madrid, 1994
VILLANCICO DE LOS PASTORES GORRONES
Venimos bien temprano
y de muy lejos.
Tenemos los pies rotos
y malo el cuerpo.
Pero reímos
para que no nos vea
llorar el Niño.
María, María,
sírvenos los pasteles
con nata fría.
Nadie nos dio su asilo
en esta noche.
No hay en el mundo patria
para los pobres.
Pero cantamos
porque Dios ha nacido
y va a salvarnos.
José, José,
sírvenos en la taza
mucho café.
No traemos presentes,
nada de nada.
Pero sí que sentimos
hambre en el alma.
Dulce Señor,
deja que degustemos
todo tu amor.
Jesús, Jesús,
sírvenos esta noche
un ambigú.
RESPUESTA DEL NIÑO A LOS PASTORES
Como manjar os guardo
carne de armiño.
De beber os ofrezco
el mejor vino.
Por si queréis fresón,
una rosa encendida
del corazón.
Y en manteles de cielo
os serviré muy pronto
tibio cordero.
Cena de príncipes
para que nunca más
estéis ya tristes.
Pedid, pastores,
y comed de este Infante
tierno derroche.
Con mis mejores deseos para estas fechas
Teresa Núñez
Navidad de 2008