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Nutrición
Beneficio de los probióticos
Los probióticos pueden ejercer muchos beneficios
en la salud de los consumidores. Entre los más
documentados se encuentra
la capacidad de regular la flora intestinal
(incrementando bacterias consideradas benéficas
como lactobacilos y bifidobacterias) y la
estimulación del sistema inmunológico (sistema de
defensas). Estas dos propiedades a su vez están
íntimamente relacionadas
ya que cambios en la flora intestinal afectan
directamente al sistema inmunológico.
En cuanto a patologías específicas en las cuales se
probó (en muchos casos utilizando animales de
laboratorio como modelo experimentales) el uso de
probióticos, se encuentran principalmente las
ligadas al tracto gastrointestinal, especialmente
teniendo en cuenta que la mayoría de los productos
que contienen estos microorganismos son alimentos
que ingresan a nuestro organismo por vía oral.
Entre las patologías, se los estudió con buenos
resultados para intolerancia a la lactosa, diarreas
de diferentes etiologías, ya sean causadas por
microorganismos enteropatógenos, por el uso de
antibióticos, la diarrea del viajero, etc.; además
también se los estudió en alergias alimenticias,
hipercolesterolemias, enfermedad inflamatoria
intestinal, la que a su vez encuentra estrechamente
ligada al cáncer de colon, entre otras.
Cabe destacar que también se encuentran trabajos
que muestran el efecto beneficioso del consumo de
probióticos en patología no intestinales como
infecciones respiratorias y cáncer de mama.
La mayoría de los efectos probados son
preventivos, especialmente ligados al sistema
inmunológico, al que mantendrían alerta, en un
estado de vigilancia, lo que llevaría a poder
enfrentar estas patologías de un modo diferente, y
a su vez se relaciona con menor incidencia o menor
tiempo de convalecencia en las enfermedades
antes mencionadas cuando se consumen
probióticos.
2. ¿En qué tipo de productos es frecuente
encontrar estos organismos?
En esta pregunta habría que separar los probióticos
que se encuentran como medicamentos y que se
venden en las farmacias de aquellos que forman
parte de alimentos que incluimos habitualmente en
nuestra dieta. En ambos casos es importante
considerar que existen distintos microorganismos
con documentación probada como probióticos, los
cuales pertenecen a diferentes géneros y especies
bacterianas. En cuanto a los alimentos, las
bacterias lácticas son los microorganismos más
comúnmente utilizados como probióticos. Esto se
debe a que son parte de nuestra flora normal y se
encuentran en una variedad de productos que
incluimos en nuestra alimentación como por
ejemplo leches fermentadas, quesos, carnes y
embutidos, jugos frutales, bebidas fermentadas
(vinos, cerveza), pan, productos derivados de soja,
etc. Sin embargo, no todos estos productos son
probióticos por tener bacterias lácticas; para serlo
debe haberse documentado que los
microorganismos que contiene ese producto
determinado aportan un efecto beneficioso sobre la
salud de quien lo consume.
Desde este punto de vista, los productos lácteos
fermentados, como yogur, otras leches
fermentadas, quesos son en nuestros días los más
utilizados como vehículos para estos
microorganismos.
3. ¿El consumo es variable en cuanto a la edad?
Es muy importante considerar que si hablamos de
alimentos que contienen microorganismos
probióticos, en la mayoría de los casos pueden ser
consumidos por toda la población y adaptados a
sus dietas cotidianas.
Hay que remarcar que en el caso de los niños, se
recomienda no consumir este tipo de alimentos
antes del año de edad, lo cual está relacionado con
el hecho de que antes de esa edad, la microbiota
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intestinal está formándose y como lo expresé
anteriormente el sistema inmunológico está muy
ligado a ello, por lo que tampoco esta desarrollado
completamente como para recibir este tipo de
alimentación y pensar que tendrá un efecto
beneficioso como se observa en un individuo
adulto.
Sin embargo un niño menor de un año de edad
puede recibir los beneficios de los probióticos, y de
todos los nutrientes, a través de la leche materna,
la cual, su calidad esta altamente ligado a la
alimentación que tenga la madre
4. ¿En qué etapa de la vida es indispensable su
consumo?
Considerando la respuesta de la pregunta anterior,
en todas las etapas de la vida (salvo en bebés
menores de un año) pueden requerirse estos
suplementos alimenticios ya que siempre es
deseable tener nuestro sistema inmunológico
estimulado y alerta. En épocas de mucho stress, de
mala alimentación, cambios bruscos de clima
pueden ayudar a hacer frente a muchas patologías
que se relacionan con estas circunstancias,
principalmente porque refuerzan nuestro propio
sistema de defensas.
Esto también puede ser aplicable a niños en edad
escolar, donde una alimentación saludable, con el
agregado de microorganismos probióticos puede
ayudar también a enfrentar patologías comunes de
una manera distinta y en muchos casos
disminuyendo las inasistencias en las escuelas y
ayudando así al mejor rendimiento escolar.
5. ¿En qué posición se encuentra Costa Rica en
esta materia?
Contestado por Lic. Milagro Mora, Nutricionista Dos
Pinos.
En Costa Rica, el mercado de alimentos con
probióticos ha sido un tema que Dos Pinos ha
desarrollado desde la década de los noventa. Costa
Rica, es uno de los países de Centroamérica en
que el posicionamiento de los probióticos es más
desarrollado, ya que la población tiene fácil acceso
a muchos alimentos lácteos fermentados con este
ingrediente funcional.
Dos Pinos como experto en probióticos en Costa
Rica, comercializa alimentos de gran calidad como
el yogurt, leche fermentadas y mas recientemente
suplementos lácteos con probióticos como Bioplus
y va mas allá, dándose a la tarea de brindar mucha
información nutricional para que la población
reconozca a estos microorganismos como aliados
para conservar la salud.
6. ¿Qué tanto conoce el consumidor sobre este
tema?
Creo que poco a poco el consumidor conoce más
sobre el tema de los probióticos. En nuestros días
es una palabra que está siendo incluida cada vez
más en el vocabulario de los consumidores y en
este sentido tiene mucha influencia la publicidad de
los productos probióticos.
Lo importante es manejar el tema con seriedad,
que en las etiquetas de los productos se exprese si
contienen microorganismos probióticos, lo cual le
da al consumidor la tranquilidad de saber qué está
consumiendo.
Como conclusión hay que tener en cuenta que no
existen soluciones únicas para todos los problemas
de salud y que en este caso en particular hablamos
de alimentos que podrían ayudar frente a estos
problemas ya que además de sus aportes
nutricionales dan beneficios a los que los
consumen, pero sin dejar de considerar que
principalmente son alimentos que forman parte de
un estilo de vida en el que se adopta una dieta
considerada saludable.