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APUNTES HISTORICOS DE LA ANESTESIOLOGIA EN MONTERREY
Para nosotros es un privilegio y un honor dar a conocer este bosquejo histórico de los
inicios de la anestesiología en Monterrey y al mismo tiempo rendir un homenaje a
aquellos Médicos que aún es circunstancias adversas crearon la especialidad organizando
el Departamento de Anestesiología.
En 1936 las cirugías se llevaban a cabo en el viejo Hospital Civil “Dr. José Eleuterio
González”, el cual estaba situado por la calle de 15 de Mayo con Cuauhtémoc
comunicándose los edificios que los constituían por un patio que ahora es la calle de Juan
Ignacio Ramón.
En esa época no se conocía ningún Médico cuya actividad profesional estuviera limitada a
la anestesia, ni que se interesara e n esa rama de la Medicina.
Para tan importante misión se aceptaban voluntarios, con mayor o menor habilidad y
conocimientos para hacer “dormir” al paciente. El encargado de dormir al paciente usaba
mascarilla de malla de alambre, cubierta con una gasa que se impregnaba con el
anestésico que generalmente era éter o cloroformo, éste método se llamaba “A la reina”.
Después se utilizó un aparato que se llamaba Ombredane, que no era otra cosa que un
depósito que se llenaba de anestésico, actuando como un filtro para dosificar el
medicamento, por un lado tenía entrada de aire y por el otro una bolsa inspiratoria y
espiratoria que se llenaba y se vaciaba con los movimientos respiratorios, además tenía
una mascarilla que se aplicaba a la boca y nariz del paciente. Al administrarse la anestesia
con éstos métodos el enfermo protestaba, se movía mucho y tosía y a veces tenía
vómitos, esto naturalmente porque no había una medicación previa.
La sala se llenaba de olores anestésicos.
Una vez terminado el período de excitación del paciente, el equipo quirúrgico ya
dispuesto, esperaba la orden para iniciar la intervención.
En la cabecera del enfermo, el improvisado colaborador estaba al tanto de los reflejos
palpables, conjuntivales y pupilares, teniendo también la importante tarea de mantener
“el sueño” del paciente, que pocas veces era tan profundo como se necesitaba y muchas
otras alternaba con un despertar violento. No eran raros los accidentes que se
presentaban durante el trans y postoperatorio. Después de esta era tormentosa se
comenzó a usar la raquianestesia, que era aplicada por el mismo cirujano, efectuando una
punción en la duramadre, para llegar al espacio subaracnoideo, extraer líquido
cefalorraquídeo y mezclarlo con el anestésico que se iba a administrar. Al principio se
utilizaba Novocaína o sea la Procaína, que venía en cristales de 15 centigramos, dosis que
se usaba para una anestesia raquídea.
Se hicieron algunas modificaciones a la técnica de raquianestesia tales como el Método
de Koster que consistía en la aplicación de un bloqueo raquídeo con un nivel alto, para lo
cual se utilizaban soluciones anestésicas de 20 ó 30 centigramos, o cantidades mayores
para obtener la anestesia deseada. Otra modificación importante fue el método de
anestesia discontinua de Lemmon, en ésta se utilizaba el Cojín de Lemmon que consistía
en un cojín con un hueco en área lumbar, que permitía el dejar insertada una aguja
flexible en esa zona para que en caso necesario administrar dosis extra de anestésico
subaracnoideo.
En 1939, el Dr. Rodolfo Rodríguez practicó las primeras anestesias epidurales en la
Republica Mexicana.
En esas fechas empezaron a utilizarse otros fármacos para administrar anestesia general
inhalada, tales como el Etilo o Cloro etileno, el Balsóformo que era una combinación de
éter, cloroformo y gomenol, ingrediente que se agregaba para hacer menos irritante la
solución. Se inició también el uso de Oxido nitroso.
Al construirse el actual edificio del Hospital Universitario, en la época en que fue
gobernador Don Francisco Cárdenas, fue designado Director el Dr. Francisco L. Rocha, el
mismo doctor planeó éste hospital en conjunto con técnicos traídos de Estados Unidos.
Cuando en 1940 inició el funcionamiento del nuevo hospital, el Dr. Rocha nombró como
Jefe del Servicio de Anestesiología al Dr. Rodolfo L. Rodríguez. El Dr. Rodríguez
previamente había tomado un curso de Anestesiología en los E. U., siendo el primer
Médico regiomontano especializado en ésta rama de la Medicina.
Habiéndose iniciado la especialidad, hubo otros médicos que se interesaron en seguir esta
carrera.
El Dr. Enrique Peña, el Dr. Guillermo Tuñón, el Dr. Luis Antonio Canales y el Dr. Rafael
Quijano, comenzaron a dedicarse exclusivamente a la Anestesiología. El Dr. José Guerra
Quiroga, comenzó a dedicarse a la especialidad, posteriormente emigró a los E. U.
Para que el servicio a su cargo funcionara como tal el Dr. Rodolfo L. Rodríguez encaminó
todos sus esfuerzos hacia la adquisición de equipo adecuado y que ofreciera seguridad a
los pacientes y comodidad en su trabajo al personal Médico. Se luchó intensamente para
salvar los obstáculos presupuestales y dotar al departamento de todos los adelantos
científicos y técnicos que había al alcance. Equipó el servicio a su cargo con aparatos de
anestesia marca Foregger que dosificaban los gases con columnas de agua, teniendo
capacidad para administrar oxígeno, oxido nitroso y ciclo propano, también se podía usar
éter. Tenían adaptado un vaporizador por el cual se pasaba una corriente de oxígeno para
después pasar al paciente, esto se usaba en circuito cerrado, con una canastilla de cal
sodada para fijar el CO2.
Esto creó un grupo idóneo y despertó más interés, de forma que muchos médicos
comenzaron a dedicarse a esta especialidad.
Al mismo tiempo cambió la idea equivocada que se tenía en esa época, no solo de la
especialidad sino del Anestesiólogo, ya que en no pocas ocasiones se menospreció la labor
del Anestesiólogo por aquellos médicos “cirujanos “con los que colaboraban llevándose
ellos todos los honores frente a los pacientes, quedando el Anestesiólogo en el
anonimato.
La tarea no fue nada fácil, pero en poco tiempo se logró que se le diera el respeto debido
y el nombre de qué se le daba de “Anestesista” cambió al de Anestesiólogo
El 9 de Mayo de 1944 el Dr. Ángel Martínez Villarreal, distinguido cirujano de esa época y
Director de la Escuela de Medicina, tuvo la idea de crear los Departamentos por
especialidad, ya para entonces se había iniciado el Servicio de Anestesias.
En 1945 al dejar la Dirección del Hospital el Dr. Francisco l. Rocha, el Dr. Rodolfo Rodríguez
dejó la Jefatura quedándose el Dr. Enrique Peña como Jefe de Anestesias.
En ese año fueron aceptados en el servicio para su entrenamiento el Dr. Raúl Treviño Faz y
el Dr. José María González Lozano, posteriormente el Dr. Raúl Taboada.
En 1946 ya había iniciado sus actividades el Instituto Mexicano del Seguro Social, el que al
no contar con unidades hospitalarias propia tenía subrogados los servicios hospitalarios de
la siguiente forma: Cirugía General, Pediatría, Gineco Obstetricia , Urología y otros
servicios en el Hospital Civil; Traumatología, Ortopedia, Cirugía Plástica y Quemados en el
Hospital Muguerza. Los Anestesiólogos del IMSS se separaron en dos grupos para poder
dar servicio en ambos hospitales.
El Dr. Enrique Peña dejó la Jefatura del Hospital Civil al quedar como Jefe de
Anestesiólogos del Seguro Social. Ocupando la Jefatura vacante del Hospital Civil, el Dr.
Guillermo Tuñón Morales.
En 1949, al terminar su carrera de Medicina, los Drs. Carlos Adame Barocio y Oscar
Elizondo García entraron al Departamento de Anestesias como practicantes o pasantes de
Medicina.
En ésa época el Hospital Civil pasó a ser Hospital Escuela dependiente de la Universidad de
Nuevo León, cambiando su nombre por el Hospital Universitario.
En 1950 fueron aceptados los Drs. Carlos Adame Barocio y Oscar Elizondo García como los
primeros Residentes del servicio de Anestesiología por la Universidad de Nuevo León.
En ese año los únicos Anestesiólogos de la ciudad eran los siguientes:
Dr. Rodolfo Rodríguez, Dr. Enrique Peña García, Dr. Guillermo Tuñón Morales, Dr. Rafael
Quijano Torres, Dr. Luis Antonio Canales, Dr. Raúl J. Treviño Faz, Dr. José María González
Lozano, Dr. Raúl Taboada, Dr. Carlos Adame Barocio y Dr. Oscar Elizondo García.
Al terminar su residencia en la especialidad los Drs. Adame y Elizondo, entraron al Hospital
Universitario, otros médicos, algunos a capacitarse y otros como residentes, tales como
los Drs. Rodolfo Villarreal, Raúl Amador Vargas, Juan José Garza, Virgilio Zapata, Bertha
Martínez de Zapata, Juan Antonio de la Garza.
Los Drs. Horacio Moreno y Fernando Villarreal, hicieron su residencia en la ciudad de
México: los Drs. Luciano Valero, Gilberto Montiel, Eduardo Lozano, Hugo Quintanilla, Delia
de la Garza, hicieron su entrenamiento en los E. U.
De 1950 en adelante la Anestesiología avanzó enormemente, llegando nuevos
medicamentos y por tanto nuevas técnicas para el manejo de los pacientes. La anestesia
endovenosa (barbitúricos como el Pentotal y Kemital sódico) empezaba a utilizarse en la
inducción y en algunos casos como anestésico.
Se utilizaban las técnicas de anestesia rectal, caudal continua, epidural y epidural
continua.
En Obstetricia se usaba como analgésico el Trilene – compuesto de tricloroetileno más
timol, después vinieron los relajantes musculares, la tubocurarina (derivado del curare),
que facilitó la intubación endotraqueal y la relajacióbn muscular. Después la succilicolina
desplazó a la tubocurarina, actualmente existen muchos relajantes musculares que dan
excelentes resultados sin los efectos colaterales indeseables.
En 1955, aparecieron en el mercado nuevos anestésicos inhalados como el Fluotane y el
Pentrane que se manejaban con vaporizadores especiales.
Al hacer estas remembranzas también debemos de involucrar otros temas que están muy
relacionados con la Historia e la Medicina y en especial con el grupo de Anestesiólogos
que iniciaron las actividades en el Departamento de Anestesiología del Hospital
Universitario y tuvieron la idea de formar la Sociedad de Anestesiología de Monterrey, la
inquietud de la formación de la sociedad misma nació del Dr. Raúl Taboada, vale la pena
mencionar que ésta fue la primera Sociedad Médica de la región.
Dicha Sociedad fue fundada en febrero de 1950 por el siguiente grupo de Anestesiólogos:
Dr. Rodolfo Rodríguez, Dr. Enrique Peña García, Dr. Rafael Quijano Torres, Dr. Luis Antonio
Canales, Dr. Guillermo Tuñón Morales, Dr. Raúl Treviño Faz, Dr. José María González, Dr.
Raúl Taboada Garza, Dr. Oscar Elizondo García, Dr. Carlos Adame Barocio.El objeto de ésta
sociedad era mantener unido al grupo de Anestesiólogos, promover, fomentar y
patrocinar estudios inherentes a la Anestesiología, entre otras cosas buscar el
mejoramiento académico y dar protección a cada miembro de la asociación y defender
sus derechos dentro de la especialidad.
Una de las personas que más se preocupó por el mejoramiento académico y por el deseo
de estar a la altura de los últimos adelantos fue el Dr. Rafael Quijano Torres, el cual invitó
a Anestesiólogos radicados en el extranjero a compartir sus experiencias académicas con
los Anestesiólogos de la ciudad de Monterrey, entre los muchos invitados estuvieron el Dr.
Antonio Aldrete de la Universidad de Colorado, Edward A. Brunner MD de la Escuela de
Medicina de la Universidad Northwestern en Chicago Illinois, GR Stephen MD de la Escuela
de Medicina de la Universidad de Washington, H A Ferrari MD Jefe del Departamento de
Anestesiología del Hospital Charlote Memorial. El Médico que más nos ha visitado en este
grupo es Charles R. Allen MD Profesor y Jefe del Departamento de Anestesiología del
Hospital John Sealy de Galveston Texas.
Entre otros muchos médicos que vinieron a dar conferencias, se encontraba el Dr. Digby
Leigh, Médico Anestesiólogo de Toronto Canadá, especialista en anestesia pediátrica e
inventor de la válvula que lleva su nombre. También estuvo con nosotros el Dr. Laborit
procedente de Paris Francia, quién impartió una plática sobre el Método de Hibernación
artificial.
Tanto el Dr. Quijano como el Dr. Tuñón invitaron a muchos otros conferencistas
auspiciados por la escuela de graduados perteneciente a la Universidad de Nuevo León. En
1958 se iniciaron las labores en el Hospital de Zona # 21 del IMSS, y todo el grupo de
Médicos Anestesistas que pertenecían también al Hospital Universitario renunciaron para
seguir trabajando únicamente en el IMSS, el Dr. Enrique Peña que era el Jefe de
Anestesias en el Seguro Social dejó la Jefatura y quedó como encargado del departamento
el Dr. Oscar Elizondo García. Los primeros servicios subrogados que se concentraron en el
Hospital de Zona fueron los de Ginecología, Obstetricia, ORL y Pediatría.
PRIMERA SESION
En la Reunión efectuada en el departamento de Anestesias del Hospital Universitario “ Dr.
José Eleuterio González”, habiendo invitado a todo el grupo de anestesiólogos de la
ciudad de Monterrey, para que asistieran a dicha Junta se acordó formar la Sociedad de
Anestesiología.
Asistiendo los doctores Anestesiólogos:
Dr. Guillermo Tuñón, Dr. Raúl Taboada, Dr. Raúl Treviño, Dr. Rafael Quijano, Dr. Enrique
Peña, Dr. Rodolfo Rodríguez, Dr. José María González, Dr. Oscar Elizondo García y Dr.
Carlos Adame Barocio.
Se acordó formar la Mesa Directiva:
Presidente
Dr. Guillermo Tuñón.
Secretario
Dr. Raúl Treviño
Tesorero
Dr. Raúl Taboada
Acordándose comisionar al Dr. Raúl Treviño Faz para que formulara los Estatutos, apoyado
por el Dr. José María González y por el Dr. Oscar Elizondo García
Febrero 20 de 1950
Agradezco la colaboración, en que participaron para llevar a cabo esta historia a los
doctores:
Dr. Guillermo Tuñón Morales
Dr. Rafael Quijano Torres
Dr. Raúl Treviño Faz
Dr. Oscar Elizondo García