Download 5 Orar en relación con las experiencias personales y las realidades

Document related concepts
no text concepts found
Transcript
5 Orar en relación con las experiencias personales y las realidades del
mundo
Nuestras Constituciones insisten en que “Encontramos a Dios, no solo en la profundidad de nuestro
ser, sino también a través del encuentro con personas, y eventos. Entonces descubrimos su
presencia en el corazón del mundo, en el sufrimiento de las personas, y en sus deseos del Bien.” 1
Eso hace eco de Sta. María Eufrasia cuando dice para animarnos: “Sea su oración una oración llena
de celo… Sea, en fin, una oración “apostólica” ”.2
Os invitamos hoy a orar con algunos de los eventos o experiencias en su vida y también con la
realidad del mundo. “Orar nuestras experiencias nos permite reflexionar y entrar de manera
sincera en nuestras experiencias diarias para tomar consciencia de la Palabra de Dios en ellas y
para ofrecernos a Dios a través de ellas.”3
Cuando reflexionas sobre las experiencias ordinarias en tu vida, descubres su importancia y como te
pueden llevar a Dios. Tal vez tomarás consciencia de tus emociones, que te arrastran en diferentes
direcciones y, al mismo tiempo, de la bondad de Dios que actúa en y a través de todas las
circunstancias. Entra en contacto con el “poder revelatorio”4 de tus experiencias. A través de ellas,
puedes oír la Palabra de Dios y como te llama a contestar.
Orar una experiencia personal
Puedes elegir una experiencia/un evento de tu vida, con que quieres orar ahora. Sino, puedes orar
con una experiencia de cambio en tu vida, por ejemplo un cambio de casa, de comunidad, de
trabajo, de país, la pérdida de un ser querido, etc.
Reflexiona silenciosamente y recuérdate las circunstancias de este evento. ¿Cuanto preparada
estabas? ¿Lo elegiste libremente? ¿Era algo que tenías que aceptar de todos modos? ¿Como te
sentiste entonces? ¿Cuando te acuerdas de esta experiencia, cuales son tus sentimientos,
pensamientos, recuerdos y deseos? ¿Como te sientes ahora? Elije una imagen que representa esta
experiencia. ¿Quién eres ahora, quién es la persona que ha sido afectada y que pasó por esta
experiencia? ¿Para ti, dónde está Dios en esta experiencia? ¿Que te está diciendo ahora al evocar
este periodo de transición en tu vida?
Pasajes de las Escrituras
Tal vez algunos pasajes de las Escrituras te recuerdan tu experiencia. Si es el caso, quédate con ellos
o utiliza los siguientes:
Ruth: 1:15-20; Ester 4: 3-19; Juan 16:32-33; Mt 26:36-41
Vínculos con las experiencias de Sta. María Eufrasia
“Usted se enteró antes, querida Hermana, que la elección de Tours tuvo lugar en su debido tiempo
y que recayó en la querida Hermana M. de San Pablo Bodin, como también de la obediencia que
nos dió de inmediato Monseñor para remplazarla en Angers. Usted comprenderá cuánto me costó
separarme en ese mismo día de nuestra querida Comunidad, objeto de mi adhesión y de un afecto
indecible, pero fue necesario dejar a Dios por Dios y someterse con toda justicia. ¡Cuántos
sacrificios en un día y cuántos le seguirán!” Sta. María Eufrasia 5
Tal vez algo en esta experiencia de Sta. María Eufrasia, Ruth o Ester, te hace pensar en la tuya.
Únete a Jesús, a su ansiedad en el Jardín de los Olivos, al momento en que se enfrenta a unos
cambios importantes. Cuando pide a su padre que “pase de el esta copa”, quédate con el. Pídele que
Constituciones de las Hermanas de Nuestra Señora de la Caridad del Buen Pastor
Conferencia No 13 de Sta. María Eufrasia
3 Schmidt, Joseph F., Praying Our Experiences, (Minnesota, St. Mary’s Press: 1980) p 7
4 Ibid, p 10
5 Carta de Sta. María Eufrasia, Vol 1, No 30 a Hna María del Calvario LE GRAND, Superiora de Versailles
1
2
1
te hable de su experiencia. Quédate tranquila y escucha lo que te está diciendo de tu experiencia del
cambio. Habla con el de manera simple, abierta, franca y personal. Invítale a quedarse contigo y a
revelarse a ti.
Poema: God is in the bits and pieces of Everyday (Patrick Kavanagh – The Great Hunger)
Canto: Everyday God
Orar con la realidad del mundo
Una ventana en el mundo
Ser Cristiano supone tener una relación personal con Jesús que nos urge movernos hacia afuera,
hacia nuestros prójimos, en el amor. El mandamiento más importante es “ama a Dios y ama a tus
prójimos como a ti mismo/a”. En este periodo de información y conocimiento global, nuestro reto,
es decir contestar a aquellos en necesidad, nos puede abrumar. Podría ser útil abrir nuestros ojos a
las realidades del sufrimiento causado por las guerras, la esclavitud, las catástrofes naturales, etc.
¿Que podemos hacer? La respuesta es: hacemos lo que podemos, no lo que no podemos hacer. Al
abrir nuestros ojos a la creación, les abrimos también al sufrimiento del mundo. Toda la creación
experimenta una crisis. La explotación de la tierra y de sus habitantes está desenfrenada. Se necesita
tomar consciencia de esto, orar y luego actuar.
La foto de nuestras Hermanas en Brasil, orando frente al Santísimo Sacramento con la Biblia por un
lado y el periódico por el otro, es una imagen ponderosa. En estos tiempos, cuando lees el periódico
o miras la televisión, ¿que asuntos te tocan más profundamente? ¿Como te afectan? Tal vez sientes
que puedes hacer tan poco o nada para cambiar estas circunstancias. Hoy habla con Dios de estos
sentimientos cuando oras y pide una intercesión para las personas que sufren.
Te sugerimos pensar en particular en la realidad mundial actual del tráfico de seres humanos y de
orar por esto durante el día. Como ya sabes, cada día se venden y se compran mujer, niños/as y
hombres – esclavizados para una explotación sexual, domestica o laboral. Tenemos aquí la foto de
una mujer que se llama Lydia, con su historia, para que puedas orar con ella. (Cada participante
recibe una.)
Refiriéndose a la esclavitud moderna, el Papa Francis desea que “se escuchara el grito de Dios
preguntándonos a todos: « ¿Dónde está tu hermano?» (Gen 4,9). ¿Dónde está tu hermano esclavo?
¿Dónde está ese que estás matando cada día en el taller clandestino, en la red de prostitución, en
los niños que utilizas para mendicidad, en aquel que tiene que trabajar a escondidas porque no ha
sido formalizado? No nos hagamos los distraídos. Hay mucho de complicidad. ¡La pregunta es
para todos! En nuestras ciudades está instalado este crimen mafioso y aberrante, y muchos tienen
las manos preñadas de sangre debido a la complicidad cómoda y muda. “ 6
Cuando estaba en la isla de Noirmoutier Sta. María Eufrasia oyó por primera vez “del comercio de
esclavos y del tráfico horrible de niñas africanas… Estas historia me rompieron el corazón.”7
Habla con Jesús de como este asunto te afecta. Expresa todos tu sentimientos – conmoción,
indiferencia, desconfianza, enfado, impotencia – y habla de como esto “te rompe el corazón”. No
dudes en hacer las preguntas que te vienen a la mente, por ejemplo: “¿Como puede ser que un Dios
de amor no intervenga para terminar esta esclavitud moderna”? Pregúntate también: ¿Estoy
mirando a otro lado? ¿Como tu silencio te puede mantener en una complicidad cómoda?
Referencias en las Escrituras: Job 1:13-22; Ezek 16:1-14; Salmo 94:3; Gen 4: 6-16; Lucas 17:20-35;
Juan 2:13-22
6
7
Evangelii Gaudium 211
Proceso de Canonización de Sta. María Eufrasia: Hna. Testimonio de Fernandez Concha, p. 468
2
Pide a Jesús la sabiduría y la fuerza necesarias para enfrentarte con la realidad del sufrimiento y del
mal en el mundo sin que la pasividad y la desesperanza te sumerjan. Ora para tener coraje, de modo
que con el puedas volverte en una servidora activa y portadora de esperanza para los otros.
Somos el cuerpo de Cristo.
Que no menosprecies el poder de la oración para realizar cambios y traer curación.
Haz lo que puedes dentro de tus propias circunstancias.
Manténgate alerta ante los asuntos mundiales en tu propio corazón, por ejemplo:
¿Como estoy esclavizando a alguien?
¿Como estoy rebajando a alguien?
¿Como estoy violenta en mis palabras o acciones?
¿Como puedo desarrollar un corazón compasivo?
3