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FORMULARIO DE COMUNICACIONES X Congreso Nacional de Organizaciones de Mayores FORMULARIO DE COMUNICACIONES 13 de abril de 2011 1. Nombre y Apellidos Viviana Patricia Alegre Obligado 2. Entidad Dirección: c/ San Francisco, 2 Bis Población/Provincia: Cizur Mayor Código Postal: 31180 Cargo del Comunicante: Coordinadora del Programa Senior – Universidad de Navarra Teléfono: 948-425600 Ext. 2144 Fax: 948-425619 Correo electrónico: [email protected] Página Web: http://www.unav.es/servicio/actividades/senior 3. Título de la Comunicación La competencias sociales y el compromiso cívico como sostén en la calidad de vida del adulto mayor. Nota: Si no se cumplimentan todos los datos del formulario, no se dará por aceptada la comunicación Página 0 de 6 FORMULARIO DE COMUNICACIONES 4. COMUNICACIÓN Resumen Objetivo: enfatizar la importancia de las competencias sociales y su repercusión en el compromiso cívico como estado de bienestar, satisfacción y posiblemente máxima de la calidad de vida en el adulto mayor. El presente trabajo puede abrirse sobre la base de un interrogante: En el abanico de expectativas de logros de esta sociedad del conocimiento, es factible atribuir a las competencias sociales y al compromiso cívico un papel determinante (no único ni excluyente) para mantener ese estado de plenitud que se supone óptimo en el adulto mayor y que puede entenderse como una máxima en su calidad de vida? Un estudio cualitativo, interpretativo-comprensivo, en base a los testimonios recogidos en un lapso de tres años, con los participantes del Programa Senior de la Universidad de Navarra conforma el trabajo de campo que se ha realizado tras siete años de experiencia. Los instrumentos fueron la observación directa, entrevistas de manera aleatoria a 30 participantes, cuestionario con preguntas previamente validadas por los programas universitarios para adultos mayores e historias de vida. Las principales medidas de resultado destacan dos significantes: el estado de plenitud alcanzado en el reconocimiento de una acción social significativa como sinónimo de bienestar y el logro de competencias sociales y cívicas como máxima en la calidad de vida. Del análisis general emergen los siguientes temas: - El hombre considerado un ser biopsíquicosocial, en el que lo físico y lo psíquico se condicionan mutuamente y condicionan su entorno. - El fenómeno de encuentro social y su compromiso como parte constitutiva del ser. - La calidad de vida como constructo conceptual multidiciplinar, condicionante del estado de bienestar y satisfacción. - Las competencias sociales desarrolladas en los programas universitarios para mayores, ostensiblemente determinadas por el compromiso cívico que se pretende, ocupan un papel preponderante. Introducción El presente estudio se desarrolla en el marco del Programa Senior de la Universidad de Navarra. Institución que desde el año 20032004 viene ofreciendo a la comunidad de Pamplona un programa cultural asentado en una firme base pedagógico-didáctica, en respuesta a las necesidad de un nuevo perfil de estudiante: el adulto mayor. El diseño curricular es el punto de partida de una programación multidisciplinar que presentada en bloques temáticos de variado carácter alterna sesiones teóricas con actividades complementarias y tiene principalmente en cuenta los temas de actualidad que preocupan a la población, como también los que han despertado el interés desde los tiempos más remotos. Casi medio centenar de personas se dan cita, año a año, en cada edición del Programa Senior. Página 1 de 6 FORMULARIO DE COMUNICACIONES Desarrollo o El hombre es el único sujeto activo en ese proceso natural de envejecimiento que experimentan todos los seres vivos. Es un ser que a efectos de la ciencias naturales y sociales puede ser abordado desde distintas disciplinas. La gerontología, la psicología - psiquiatría y la sociología se ocupan de los cambios que sufre el hombre en su acontecer biológico, psíquico y social. Para Gonzalo Sanz (2002), la influencia de lo psíquico sobre lo somático y viceversa a lo largo de la vida, se vuelve todavía más pronunciada en la senescencia. El hombre participa activamente en su envejecimiento, tanto en sentido positivo como negativo. El alcoholismo, el tabaquismo o el sedentarismo provocan una alteración orgánica negativa y una mayor vulnerabilidad del sujeto ante las relaciones externas. Contrariamente, se puede participar en forma positiva en pos de un buen envejecimiento y es esa actitud, tomada de forma electiva y deliberada, la que determina la calidad de vida que puede llegar a forjarse. Para Dewey (1950) esa capacidad electiva del individuo sobre el medio en que vive, conformándolo y conformándose a él en un proceso de ajuste, es lo que le da sentido a la acción. Lo social, afirma Krzeimen (2001) es determinante en la medida en que las relaciones con los demás sean reconocidas como significativas y vividas como prolongación de un proceso vital, su falta de reconocimiento provocaría el aislamiento social del adulto mayor y su consecuente declinación funcional. o Tal como enunciara Dilthey (2000), la luz que funda la comprensión brota en los acontecimiento de interferencia del hombre con la realidad y cada realidad con el conjunto del que forma parte. Los fenómenos de interferencia sugieren un acto de participación, creación y re-creación o co-creación en vinculación con el entorno, lo que demanda una concepción básica de la realidad. De ahí que López Quintás (1978) afirme, siguiendo a Rof Carballo, que la realidad humana se constituye por vía de encuentro. Rof Carballo (1972) sostiene que el hombre se constituye, no nace de una constitución: …en la dotación genética del ser humano está programado, dispuesto, que su último acabado ha de hacerse al despertarse potencialidades biológicas latentes, por la acción de las primeras relaciones interpersonales. Por necesidad constitutiva del recién nacido se establece un vínculo con el entorno, que está presupuesto en el caudal genético y epigenético, como el cordón umbilical o los párpados. El recién nacido no recibe el ambiente pasivamente, forma el ambiente, moviliza el ambiente, irrumpe en él y lo re-estructura. La realidad del hombre se va constituyendo paulatinamente en virtud de las relaciones de diversa índole que muestran una estructura básica común. La relación con la madre, la familia y los demás hombre, la relación con los objetos de conocimiento, el lenguaje, las categorías lógicas y esquemas mentales, el juego, el tiempo y el espacio, la historia, la cultura, el trabajo, la sociedad, los valores… le permite a Página 2 de 6 FORMULARIO DE COMUNICACIONES Martín Heidegger (1980) atisbar la condición racional del fenómeno del encuentro, que como tal ofrece posibilidades de acción con sentido y conforma un proceso creador que hace accesible el grado más intenso de inteligibilidad de lo real. Esa entrega a la participación como auténtica forma de creación dialógica y colaboradora marca una cumbre en la vida humana. o Calidad de vida es un complejo concepto. Un concepto que ha evolucionado desde una noción sensibilizadora hasta convertirse en un agente de cambio social y cultural, es un objetivo compartido que guía las prácticas profesionales de todos los ámbitos: político, económico, social, educacional y cultural. Es un constructo conceptual cuya definición operacional es altamente difícil, pues una de sus condiciones específicas es su multidisciplinariedad, con su consiguiente pluralismo metodológico y multivariados diseños de investigación. Desde el punto de vista semántico hace referencia a un nivel de excelencia en relación a los aspectos esenciales de la existencia humana (Verdugo, Gomez, Arias, 2009). Según Fernández-Ballesteros (1997) calidad hace alusión a ciertos atributos o característica y condiciones de un objeto, que en el presente caso es “la vida” misma. Las diversas perspectivas que analizan la calidad de vida establecen indicadores creados y utilizados para esclarecer la situación: determinan el PIB (Producto Interior Básico) o la Renta per Capita, como indicadores socioeconómicos; o las tasas de criminalidad, violencia de género, desintegración familiar, como indicadores sociales; o datos epidemiólogicos o sociodemográficos, como la mortandad o la esperanza de vida. Sin embargo, estos indicadores y sus resultados, no parecen dar cuenta, ni siquiera aproximada, de esa idea de bienestar humano que encierra el constructo conceptual “calidad de vida”. Escalas de evaluación acerca de la calidad de vida han fijado las dimensiones que resultan significativas, sus indicadores determinan que la inclusión social queda en segundo término, muy cercana a la puntuación del bienestar material y seguida por seis dimensiones que se ubicarían en el siguiente orden: bienestar emocional; relaciones interpersonales; desarrollo personal y bienestar físico con la misma puntuación; derechos y por último autodeterminación (Escala FUMAT, 2009). El buen funcionamiento físico es predictivo respecto al grado de satisfacción con la vida y es un supuesto de las dimensiones mencionadas, lo que se desprende es que en un estado de bienestar material (vivienda, posesiones, ingresos), la dimensión de inclusión social (participación, integración, apoyos) resulta determinante en esta búsqueda de la calidad de vida. Otra dimensión a destacar es la de los derechos (ejercicio de los derechos, responsabilidades, dignidad, información, respeto) que queda por encima de la autodeterminación (metas y preferencias personales, autonomía, elecciones, decisiones). Atentos a los resultados se torna necesario que los objetivos de los proyectos dirigidos al adulto mayor deban tener relación directa con su inclusión social y el ejercicio Página 3 de 6 FORMULARIO DE COMUNICACIONES de sus derechos, reduciendo los riesgos de discriminación a causa de la edad y garantizando el acceso y disfrute de recursos para vivir con plenitud esta etapa de la vida. o La adopción de un modelo de formación basado en las competencias supone un nuevo paradigma educativo, rector y eje de la concepción del aprendizaje a lo largo de la vida (Gavari, Lara, 2010). El aprendizaje permanente o lifelong learning forja su estructura en la adquisición de un conjunto de competencias que incluyen tanto conocimiento como destrezas prácticas, orientadas al desarrollo integral del individuo de manera tal que le permitan una presencia y permanencia efectiva y eficiente en la sociedad del conocimiento. (García Garrido y Egido Gálvez, 2006). Las habilidades básicas que fijó el informe Delors, elaborado por la UNESCO (1996) son aprender: a conocer, a hacer, a vivir juntos y a ser. La OCDE reinterpreta las competencias en su proyecto de Definición y Selección de Competencias (DeSeCo, 2003): Actuar con autonomía, Utilizar las herramientas de manera interactiva, Interactuar en grupos heterogéneos. Se constata entonces que en esta sociedad del conocimiento el reclamo se dirige hacia una reducción en la distancia entre el desarrollo científico y sus aplicaciones sociales. Desde este punto de vista la pretensión de un aprendizaje permanente a lo largo de la vida no sólo aspirar al logro de una mayor competitividad, sino que atisba un mejoramiento en la cohesión social, la igualdad y la calidad de vida. El diseño curricular del Programa Senior incluye temas interdisciplinares que apuntan a la conciencia global, el alfabetismo económico, financiero, cívico, de la salud y el medio ambiente. La experiencia del trabajo de campo y los instrumentos de medición destinados a establecer el grado de satisfacción en relación al logro de competencias ha dado como resultado que las competencias básicas en el orden de la comunicación lingüística, conocimiento del medio natural y social, cultural y artístico, la informática y otras, quedan condicionadas por las competencias en el orden social y cívico, en las que se destaca el compromiso ético-cívico y la responsabilidad ciudadana. El adulto mayor reclama su integración y participación social para el ejercicio de sus derechos y obligaciones de manera responsable y digna, como base de un estado de satisfacción en relación a su calidad de vida. No sorprende entonces que sus miras se fijen en el logro de competencias en ambos campos como sinónimo de plenitud. Conclusiones La capacidad electiva del hombre regula el proceso de ajuste que le da sentido a la acción, la cual resulta significativa al ser reconocida socialmente, posibilitando un proceso creativo, dialógico y colaborador que marca una cima en la vida humana. En total relación, los indicadores de inclusión social y derechos reflejan su radical importancia en el grado de satisfacción y bienestar del adulto mayor, marcando las competencias sociales y cívicas como condicionantes de los diseños curriculares de programas para adultos, las Página 4 de 6 FORMULARIO DE COMUNICACIONES que podrían sostener sobre sus espaldas la máxima presupuesta en el constructo conceptual calidad de vida. Los adultos mayores gozan de una mejor calidad de vida y de una madurez plena, cuando viven como sujetos activos de la sociedad a la que pertenecen. Actividades de Participación social y cívica del Programa Senior - Los alumnos participan o han participado en los siguientes proyectos: o Parlamento Cívico o “Cómo elegir la mejor residencia de mayores”, del Proyecto “Fronteras y cultura” del ICS de la Universidad de Navarra y el Foro QPEA o Proyecto de investigación en neuroimágen funcional, CIMA. o En la actualidad prepara un Proyecto de Cooperación Internacional destinado a la ayuda de los indios Tobas, en la provincia de Chaco, Argentina. Página 5 de 6