Download Ambiente Animador: Miembro del grupo Canto Salmo 118 Lector

Ambiente
Lugar preparado con una imagen o afiche de Cristo
resucitado, Cirio pascual signo de Cristo, flores, música
ambiental adecuada.
Animador:
La resurrección de Jesús nos embarga de alegría y de
esperanza.
Por nosotros Cristo nuestra pascua fue inmolado en la cruz,
pero resucitó glorioso y su resurrección es la fiesta que nos
alegra profundamente a los cristianos. Por esta razón la
liturgia de todos estos días es jubilosa afirmando en los
cristianos la verdad que fundamenta y da vida a su fe.
Miembro del grupo
Nos reunimos en oración para compartir la esperanza y la
alegría de la resurrección de nuestro Salvador.
Canto Salmo 118 (117):
Antífona: Este es el día en que actuó el Señor, sea
nuestra alegría y nuestro gozo.
Lector: Evangelio de San Juan 20, 1 – 9
(Tener el Cirio Pascual encendido).
Reflexión y oración con base en el texto leído
Animador
Puede hacerse un comentario sobre el texto leído:
¿Qué es lo que narra el texto? Tener en cuenta el
hecho, las circunstancias, el tiempo, quiénes los que
intervienen, qué hacen o dicen.
El animador, luego del comentario, puede ayudar a
profundizar dando pistas, como:
En silencio: (Puede escucharse música suave)
María, Pedro y Juan no vivieron la experiencia de la
resurrección en soledad, cada uno…
Personaje con el que me identifico, razón.
Sentimientos que me animan ahora.
En común:
¿Qué lecciones nos dan los discípulos, a qué nos
invitan?...
¿Qué fue lo que los movió, los motivó?..
¿Cómo nos ayuda esta reflexión a vivir una experiencia
personal de la resurrección de Jesús?... En las personas que
me rodean en mi familia, trabajo, etc. ¿Qué signos de
resurrección descubro?
¿Con qué convicción o reflexión me quedo?
Animador: Dios nos quiere activos, vivos en su viña, en
comunidad, en su Iglesia. Cristo, está vivo y esta verdad de su
resurrección sostiene nuestra esperanza en resucitar para la
eternidad.
Para finalizar
Invita a los participantes a expresar espontáneamente su fe en Jesús resucitado. Cada
intervención la puede intercalar con un estribillo de resurrección cantado.
Oración final o también
un canto de resurrección
• Padre Santo, llenos de alegría por la resurrección gloriosa de Jesucristo
tu Hijo y nuestro hermano, te damos gracias por unirnos a la fe que los
primeros discípulos testimoniaron con su propia vida. Amén.