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Congreso de la Asociación Española de Ciencia Regional (XXX Reunión de Estudios
Regionales)
PROPUESTA DE UNA ARQUITECTURA DE GESTIÓN DEL
CONOCIMIENTO APLICADA A ENTORNOS ECONÓMICOS LOCALES
Manuel Expósito Langa, Emilio Golf Laville, Josep Capó Vicedo, Enrique Masiá Buades
Grupo de Investigación “Cluster del Conocimiento Territorial de la Comunidad Valenciana”
Escuela Politécnica Superior de Alcoy (Universidad Politécnica de Valencia)
{maexlan, emgolla, pepcapo, emasia}@omp.upv.es; www.cctcv.upv.es
RESUMEN
Las actuales teorías del crecimiento endógeno inciden en la importancia del
conocimiento y el desarrollo tecnológico como verdaderos motores del cambio
estratégico localizado. Siguiendo el discurso de estas teoría s, se puede decir que
existe un stock mundial de conocimiento que estaría codificado y que sería
libremente accesible para todos los agentes económicos y al cual dichos agentes
pueden contribuir sin costo. Este stock tendría las características de los bienes
públicos que serían la fuente de los rendimientos crecientes de las inversiones en
estas formas de capital intangible. Por tanto, si en los procesos de crecimiento
económico el conocimiento tácito fuera complementario con el stock de
conocimiento codificado, el crecimiento de este último vendría determinado por
los factores que gobiernan el crecimiento del componente tácito.
Así, pues, la codificación del conocimiento resultaría necesaria para abordar el
proceso de transformación del mismo a un formato que hiciera posible su
conservación y transferencia como información.
En esta comunicación, se presenta una propuesta de arquitectura de gestión del
conocimiento aplicada a una constelación de pymes, integradas en clusters
territoriales, cuya finalidad principal es, a través de la codificación del
conocimiento, servir de factor coadyuvante a la toma de decisiones estratégicas a
los agentes económicos que componen el mismo. De esta forma, se pretende
ayudar a que las empresas puedan tomar decisiones de tipo proactivo, activando
los cambios de sus entornos, frente al modelo reactivo preponderante en la
actualidad.
1. INTRODUCCIÓN
La globalización y la consecuente mundialización de la economía , está dando
lugar a una importante transformación en la actividad económica. Así, autores
como Freeman (1985), Porter (1991) o Drucker (1994), desde el enfoque de la
economía industrial, insisten en la existencia de dos vías alternativas para
competir en este nuevo contexto global (Méndez, 2000):
a) Por un lado, abaratar costes para conseguir ventajas comparativas
estáticas, estrategia que lleva a efectos de precarización de empleo, bajos
salarios o sobreexplotación de recursos
b) Por otro lado, introducir innovaciones y mejoras constantes con capacidad
para generar ventajas competitivas dinámicas y más duraredas
Estudiar la línea de trabajo de la alternativa (b), permite observar la importancia
que tiene en nuestros días la innovación como instrumento para la mejora en la
competitividad de las empresas.
Por otra parte, cabe destacar que los procesos de innovación surgen y se
desarrollan normalmente asociados a territorios donde los recursos, tanto
humanos, de capital, infraestructuras y de conocimiento son suficientes, así como
los agentes locales capaces de ponerlos en valor (Méndez, 2000).
Por tanto, y siguiendo las actuales teorías del crecimiento endógeno, se reafirma
la importancia del conocimiento y el desarrollo tecnológico como verdaderos
motores del cambio estratégico localizado.
2. EL NUEVO ENTORNO COMPETITIVO
Para los países en la vanguardia de la economía mundial, el equilibrio entre
conocimiento y recursos ha cambiado hasta tal punto en los últimos años, que el
conocimiento se ha transformado en el factor determinante de los niveles de vida
(más que la tierra, las máquinas o el trabajo). Según la OCDE (1996), las
economías basadas en el conocimiento son aquellas en las cuales la producción,
distribución y usos del conocimiento constituyen el motor principal del crecimiento
económico, de la creación de riqueza y del empleo en todos los sectores.
Uno de los principales objetivos de las economías basadas en el conocimiento
será por tanto cómo convertir el saber en un recurso estratégico clave, por lo que
aquellas experiencias orientadas hacia la incorporación de conocimientos que
añadan valor al trabajo realizado tendrán un seguimiento especial, ya que la
calidad de la información y de los conocimientos organizativos supondrán el
nuevo arsenal competitivo de la empresa. Las empresas, en definitiva, deberán
procesar información procedente tanto de fuentes internas como externas y
gestionarla de forma eficaz.
Es por esto, que conviene a tal fin promover los principios de la difusión de las
buenas prácticas y de la comparación de resultados. Esto es importante para las
pequeñas y medianas empresas (PYME) que representan buena parte de la
mano de obra europea y para las que la innovación desempeña un papel crucial1.
Sin embargo, tanto en el caso europeo, como en el español, y de forma más
acusada generalmente en empresas del sur europeo, esta preponderancia de
PYME representa una barrera incuestionable para que se produzca la transición
de las economías tradicionales a las economías basadas en el conocimiento. En
este sentido, conviene no olvidar que este tipo de empresas cuentan con una
restricción de recursos importante que les impiden poder afrontar por sí mismas
los procesos de cambio estratégico, imprescindibles en los actuales y turbulentos
escenarios de la nueva economía globalizada.
Esta circunstancia se refleja también en el modelo de gestión utilizado por la
mayoría de las PYME, que tiende más a gestionar los problemas a corto plazo en
lugar de enfocarlos con estrategias a medio y largo plazo. En este sentido, se
puede decir que la PYME tiende a adoptar una posición reactiva en lugar de
proactiva a los cambios del entorno, tal y como señala la Comisión Europea
(1996), donde afirma que la PYME tradicional trata la tecnología como una
contingencia que debe ser gestionada, ya que no puede ser evitada, más que
como una oportunidad. Por tanto, no sólo el factor tecnología para la gestión de
conocimiento puede suponer una barrera a la innovación, sino también la actitud
de los responsables de las empresas.
1
Así, en la Unión Europea, según la Comisión (2000), existen unos 19 millones de PYMEs
generadoras del 65,83 % del empleo. Además, 18. millones de éstas son microempresas, con
menos de 10 empleados, que generan más del 33 % del empleo. En España, la importancia
económico social de las PYMES es todavía, más acentuada: Unos 2,6 millones de empresas
emplean un 79,8 % de la población activa y de éstas, tan sólo unas ciento cincuenta mil menos
(2,4 millones) son microempresas que emplean al 47,3 % de la población ocupada.
3. LA IMPORTANCIA DE LOS CLUSTERS COMO MEDIO SINÉRGICO
Tal y como se ha apuntado, el nuevo entorno en el que las empresas deben
competir es un entorno global. Exceptuando las grandes empresas, que
funcionan por sí mismas como verdaderas empresas-red, en la mayoría de
ocasiones las PYME que mejor responden a la situación argumentada se
concentran en áreas determinadas, ya sea aglomeraciones metropolitanas,
ciudades medias o pequeñas e incluso en zonas rurales, donde existen
condiciones necesarias para la generación de ventajas competitivas (Méndez,
2000). Esto ha permitido la generación de espacios ganadores (Benko, Lipietz,
1994) lo suficientemente dinámicos como para hacer frente a los efectos de la
globalización.
Por tanto, conviene tener presente que numerosas actividades industriales están
fuertemente especializadas en territorios muy concretos –también llamados
clusters o distritos-, y han mostrado una capacidad de adaptación y dinamismo
histórico que hace pensar que no siempre lo global tiene una ventaja ante lo local
o pequeño.
El concepto de cluster o distrito industrial tiene sus antecedentes en los trabajos
de Marshall (1890), más tarde retomados por autores relevantes como Porter,
Schmitz, Swann y Prevezer, Becattini o Altenburg.
Existen múltiples definiciones del concepto de cluster, entre otras se reseñan las
siguientes:
Grupo geográficamente denso de empresas e instituciones conexas,
pertenecientes a un campo concreto, unidas por rasgos comunes y que son
complementarias entre sí. Porter (1999)
Un cluster es una concentración geográfica sectorial de empresas. Schmitz
(1999)
Aglomeración bastante grande de empresas en un área espacial delimitada,
que tiene un perfil de especialización característico y en el que la
especialización interempresarial y el comercio son importantes. Altenburg
(1999)
Concentración limi tada geográficamente de empresas interdependientes.
OES (2002)
Se puede observar a raíz de las definiciones, que el concepto de cluster va más
allá de las redes horizontales simples, en las cuales, las empresas que operan en
un mismo mercado de productos finales y que pertenecen al mismo grupo
industrial cooperan en ciertas áreas
En definitiva, mientras que la estrategia de las multinacionales se ha centrado en
la búsqueda de una reducción de sus costes productivos a través de la
fragmentación de la cadena productiva y la reubicación espacial de ciertos
procesos, quedando tan solo las cuestiones de alto valor estratégico en manos de
los grupos matrices, la reestructuración de numerosas PYME industriales, ha
descansado en una estrategia de gestión del conocimiento territorial –la mayoría
de las ocasiones tácitamente- que ha llevado a un mejor aprovechamiento de las
capacidades y conocimientos de las industrias locales.
Así, se ha generado una dinámica de especialización productiva que ha conferido
gran competitividad y flexibilidad a numerosos sectores manufactureros
tradicionales que en la actualidad presentan un alto grado de diversificación. No
es de extrañar, por ello, que muchos de los productos manufacturados de calidad
usados por nuestra sociedad sean fabricados con éxito en los distritos industriales
de todo el mundo, - especialmente en España, Italia, Alemania, Inglaterra, Bélgica
y determinadas zonas de USA, - por agrupaciones de PYMES concentradas
geográficamente, operando en red o clusters, y compartiendo, utilizando y
contribuyendo a una base territorial común de capacidades técnicas, de
conocimientos y de habilidades, poniendo sus excesos de capacidad productiva a
disposición de las demás y controlando implícita y explícitamente la calidad del
conjunto. De esta forma, conservan su flexibilidad, tienen una alta velocidad de
respuesta y un grado de motivación que empresas mayores y más importantes
encuentran difícil de emular, [Becattini, (1989, 1994, 1996)], [Sforzi, (1989, 1990)].
4. EL CONOCIMIENTO, FACTOR CLAVE COMPETITIVO
Como ya ha sido comentado en la introducción, las recientes teorías del
crecimiento endógeno subrayan, el hecho de que son el incremento de los
conocimientos y el consiguiente desarrollo tecnológico los verdaderos motores
del cambio estratégico localizado, frente a la pura y simple acumulación de
capitales, los que desembocan en la enriquecedora innovación de productos y de
procesos. Diversos autores hacen planteamientos similares desde distintos
campos: Charles Sabel del M.I.T.; Michael Porter en Harvard; George Sweeney,
Frank Pyke y Werner Sengenberger, desde U.K.; George Benko y A. Lipietz en
Francia; los ya mencionados G. Becattini y F. Sforzi, a los que cabe añadir el
resto de especialistas italianos: A. Bagnasco, P. Bianchi, S. Brusco, R. Cagmani...
Siguiendo el discurso de estas teorías del crecimiento endógeno, se puede decir
que existe un stock mundial de conocimiento que estaría codificado y que sería
libremente accesible para todos los agentes económicos y al cual dichos agentes
pueden contribuir sin costo. Este stock tendría las características de los bienes
públicos que serían la fuente de los rendimientos crecientes de las inversiones en
estas formas de capital intangible. Por tanto, si en los procesos de crecimiento
económico el conocimiento tácito2 fuera complementado con el stock de
conocimiento codificado, el crecimiento de este último vendría determinado por
los factores que gobiernan el crecimiento del componente tácito. Y, en última
instancia, dichos factores también estarían actuando como restricciones en el
crecimiento de la economía.
Por tanto, la codificación resultaría necesaria para abordar el proceso de
transformación del conocimiento a un formato que haría posible su conservación
y transferencia como información. Igualmente, la importancia de la codificación
residiría en la contribución potencial del conocimiento al crecimiento económico,
puesto que reduciría los costos de adquisición del conocimiento y facilitaría su
difusión y transferencia entre los distintos agentes del territorio.
En definitiva, en el presente la ventaja competitiva de las economías y de las
empresas parece residir sobre todo en su capacidad de innovación. Esta
capacidad corresponde al conocer cómo, que es, precisamente, uno de los
2
El conocimiento tácito es aquel conocimiento que la persona tiene incorporado sin tenerlo
permanentemente accesible a la conciencia, pero del cual el individuo hace uso cuando las
circunstancias lo requieren y que es utilizado como instrumento para manipular el fenómeno
que se está analizando. Este tipo de conocimiento ha recibido distintas denominaciones. Así se
ha dicho que se trata de un “conocimiento individual implícito”, o que se trata de “conocimiento
incorporado”, o que es el “conocer cómo”. En general, el conocimiento tácito es subjetivo y está
basado en la experiencia. Dado que en muchas circunstancias dicho conocimiento es
específico para determinado contexto, resulta difícil, y tal vez imposible, expresarlo en
palabras, oraciones, números o fórmulas. También incluye creencias, imágenes, intuición y
modelos mentales así como habilidades técnicas y artesanales.
Por contraposición, el conocimiento explícito o codificado es el conocimiento objetivo y racional
que puede ser expresado en palabras, oraciones, números o fórmulas, en general
independientes de contexto alguno. También se lo suele identificar como conocimiento
codificado ya que puede ser expresado fácilmente de modo formal y ser transmitido a otros de
modo igualmente sencillo. Cualquier tipo de conocimiento puede ser convertido, hasta cierto
punto, mediante procesos de transferencia.
aspectos del conocimiento tácito. Además, debería considerarse que ambas
dimensiones del conocimiento podrían ser efectivas sólo si son complementadas
con otros factores vinculados con el desarrollo (capital físico, capital social, capital
organizacional).
Cabe señalar que los citados cambios que está sufriendo la actividad económica
en los diferentes territorios afectan directamente sobre el nivel de vida, empleo
estable, calidad… de los habitantes y éstos cambios, a su vez, son conducidos en
una u otra dirección por la competitividad de las empresas allí instaladas. Por
tanto, las medidas implementadas para favorecer el salto a la gestión del
conocimiento de las empresas concentradas territorialmente en torno a un cluster
contribuirían a la elevación general del nivel de vida de todos los ciudadanos que
interactúan con el mismo.
5. FUNDAMENTOS DE LA PROPUESTA
Enlazando con el punto anterior y tal y como se puso de manifiesto en la III
Annual Conference de The Competitiveness Institute “Clusters in the New
Millennium”, organizada por esta institución y por la agencia gubernamental The
Scottish Enterprise, en Glasgow (U.K.) y celebrada del 4 al de 6 octubre 2000, se
precisan desarrollar herramientas específicas para sistematizar la formulación de
estrategias de clustering y encontrar el know how que permita potenciar los
sistemas locales de innovación y, con ellos, los factores determinantes de la
competitividad territorial. No obstante, ya se ha hablado de la limitación de
recursos de las PYME, aspecto que convierte en incierta la transición del modelo
económico actual a la economía del conocimiento.
Con el objetivo de suplir este gap, aparece el modelo STRELNET, desarrollado
en la tesis doctoral de Masiá (1999), que busca generar una metodología
endógena y sistemática de análisis y clusterización de los sectores y/o territorios
que presentan un potencial de desarrollo competitivo.
El modelo plantea la necesidad de tres pilares fundamentales, a saber:
a) Un ente coordinador (EC), que debería ser una institución motor del
cambio territorial. Será un agente con autoridad moral (cámara de
comercio,
agencia
de
desarrollo
local,
universidad…)
con
responsabilidad de aplicar y desarrollar el modelo en un cluster concreto
la
b) La matriz estructural de relaciones (MER), herramienta que permitirá
analizar la cantidad y calidad de las relaciones entre los agentes del
cluster, principales empresas e instituciones líderes
c) El cluster del conocimiento territorial (CCT), herramienta que propicie el
acceso a la información a los agentes económicos territoriales, de tal
forma que registre y gestione conocimiento útil para los mismos.
El objetivo del presente trabajo, es el de proponer una arquitectura basada en las
tecnologías de la información y la comunicación (TIC) para la gestión del
conocimiento que de soporte a la herramienta CCT, la cual deberá ser el lugar
dinámico e interactivo donde cualquier persona con responsabilidad en las
empresas del cluster, pueda encontrar procesados, los conocimientos, la
formación y la información que precise, y en el momento en que lo necesite, para
tomar decisiones adecuadas en el ámbito empresarial.
6. VISIÓN SISTÉMICA DE LA HERRAMIENTA
En primer lugar debe quedar claro que el modelo STRELNET se basa en un
objetivo enfocado y segmentado hacia las necesidades identificadas de las
PYMES. Por tanto, apoyará acciones cooperativas comunes que tienen como
objetivo la dinamización y el desarrollo de la competitividad de redes locales de
empresas.
En esto se diferencia de otros enfoques de gestión de conocimiento global del
tipo oferta genérica. El modelo, desarrollará y/o adaptará una herramienta que
suponga la constitución y gestión de una base de conocimientos accesible, que
sea capaz de distribuir este conocimiento específico y segmentado según las
demandas identificadas de sus componentes. En definitiva, deberá ser capaz de
seleccionar el conocimiento relevante para cada nivel de gestión de la red de
PYME. En la figura adjunta se muestran algunos de los contenidos y técnicas
clave para el desarrollo de la herramienta.
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Figura 1. Contenidos y técnicas de la herramienta. (Masiá, 2003)
Como se puede observar, la herramienta deberá permitir la combinación de
repositorios tradicionales con servicios que ayuden a los agentes implicados a
localizar e integrar fuentes de conocimiento externas con las bases de
conocimiento interno. El CCT, se compondrá básicamente de:
a) Una Base de Datos relacional formada por el conjunto de Fichas
Estructuradas de cada uno de los principales agentes económicos del
cluster (empresas e instituciones), de manera que cada ficha refleje el
perfil informacional del mismo y aparezca el mayor detalle posible de sus
capacidades y habilidades productivas (productos y/o procesos)
b) Un repositorio estructurado de bases documentales con información
relevante sobre mercados, tecnologías, patentes, ofertas y demandas…
relacionas con el cluster, obtenida mediante una búsqueda sistemática de
información a partir del estado del arte de la ciencia y la tecnología,
técnicas específicas de vigilancia tecnológica, inteligencia competitiva y
gestión de la información y del conocimiento
c) Herramientas informáticas de dos tipos: 1) Agentes inteligentes de
búsqueda, capaces de localizar, seleccionar y registrar la información
citada en el punto anterior, archivándola en la base de datos
correspondiente y con capacidad de aprendizaje ante el comportamiento
de los usuarios en diferentes situaciones, y 2) Un software capaz de
relacionar los diferentes archivos de informes, noticias o datos relevantes
con el perfil informacional contenido en las fichas estructuradas de los
agentes económicos, de manera que, al "casar" dicha información
relevante con el contenido de algún o alguno de los campos de las fichas,
pudiera redirigirse el contenido de dicha información (fichero de texto, de
datos, multimedia, etc.) hacia el agente identificado como posible
destinatario interesado.
El CCT actúa así, a la vez, como un filtro y repositorio de la información y de los
conocimientos que precisan las PYMES de la red para desarrollar su
competitividad. El conocimiento sera distribuido de dos formas distintas:
a) System Push, cuando en base a la aplicación de técnicas de inteligencia
artificial sea capaz de recomendar en base a los perfiles qué puede ser útil
a cada agente
b) System Pull, cuando los agentes entren al sistema y lancen sus consultas
personalizadas de búsqueda de necesidades informativas.
A continuación se muestra cómo quedaría, con un enfoque sistémico, la
herramienta CCT:
Figura 2. Enfoque sistémico de la herramienta CCT. Elaboración propia
7. PROPUESTA DE LA ARQUITECTURA PARA LA GESTIÓN DEL
CONOCIMIENTO APLICADA A ENTORNOS LOCALES
Una vez presentada cómo sería la herramienta propuesta, ésta deberá tener una
arquitectura de soporte que sirva de modelo conceptual para la puesta en
práctica de la misma. En la figura siguiente se muestra la propuesta de
arquitectura para la gestión del conocimiento aplicada a entornos locales.
Figura 3. Propuesta de arquitectura de la herramienta CCT. Elaboración propia
Como se puede observar, la herramienta se puede dividir principalmente en dos
partes bien diferenciadas:
a) El Front Office, que será la parte de interacción con los usuarios del
sistema y que estará integrada por tres niveles de interfaz
b) El Back Office, que será la parte interna a la arquitectura y desde donde se
pondrán en práctica las distintas técnicas aplicadas a la gestión de la
información y la gestión documental
Se ha comentado que Front Office de la herramienta se integrará en tres niveles.
La aplicación debería seleccionar el conocimiento relevante según dichos niveles,
estos niveles serán:
a) Nivel “Público”, de acceso general para todos, no precisa validación y
permite tener conocimiento de qué acciones o iniciativas se están llevando
en el cluster.
b) Nivel “Club de empresas”, se denomina de esta manera ya que supone un
nivel de distribución de conocimientos general para empresas de un
mismo cluster. Necesitará validación para poder acceder a sus contenidos
c) Nivel de “Proyectos Ad Hoc”, es decir, la herramienta deberá permitir la
generación de espacios comunes de trabajo creados de forma específica y
puntual, donde la distribución de información y conocimiento sea para
situaciones muy concretas
Para finalizar, en cuanto a lo que respecta a las distintas tecnologías y técnicas
asociadas a la arquitectura, se imbricarán las siguientes:
a) Repositorio Data&Document Warehouse. Una definición clásica al
concepto de Data Warehouse la podemos encontrar en Inmon (1992)
como un conjunto de datos orientados por tema, integrados, variables en
el tiempo y no volátiles que se emplea como apoyo a la toma de
decisiones. Sin embargo, interesará ampliar no sólo a datos estructurados
sino a datos no-estructurados o semiestructurados. Para ello se tratará
también con la tecnología del Document Warehouse, cuyos objetos son
documentos, como por ejemplo una biblioteca digital, una base de datos
con fichas bibliográficas… en definitiva toda la información que la
aplicación del agente inteligente sea capaz de encontrar en Internet y toda
aquella sobre el cluster que se pueda extraer mediante entrevistas,
vigilancia tecnológica o propiamente introducida por los agentes del cluster
b) Minería de textos (Text Minner), supone el descubrimiento de nueva
información a partir de texto no estructurado, es decir, texto libre
generalmente en lenguaje natural (Hernández, 2004). Las tareas más
habituales de la minería de textos son la categorización, la clasificación y
el agrupamiento de los textos. La minería de textos resulta una aplicación
de la lingüística computacional y del procesamiento de textos, y en
principio no precisa de unas necesidades concretas de los usuarios.
c) La recuperación de información, como proceso de selección de
información de un fondo o corpus documental por medios automáticos o
semiautomáticos con el fin de solucionar necesidades de información
específicas de los usuarios del sistema, aquí sí será necesario el perfil
informacional de los agentes participantes. Esta técnica se fundamenta en
la representación de la información que contienen los documentos
mediante la indización, las necesidades de información de los usuarios en
base a su perfil y la colección de documentos con mayor grado de similitud
respecto a esas necesidades de información
d) Un sistema de recomendación de información al usuario, que de forma
automática redirigiera los contenidos de interés para cada unos de los
usuarios mediante el correo electrónico o la distribución de contenidos en
el portal
9. CONCLUSIONES
En definitiva, se ha presentado una propuesta de arquitectura para la gestión y
difusión del conocimiento que integra distintas tecnologías y técnicas
informáticas, as cuales bajo el marco conceptual de las teorías del crecimiento
endógeno, ayudaría n a que las empresas puedan tomar decisiones de tipo
proactivo, activando los cambios de sus entornos, frente a un modelo más
reactivo preponderante en la actualidad.
Este sistema de gestión del conocimiento, tiene con fin último incrementar la
competitividad y la capacidad de innovación de las empresas de un cluster
territorial.
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