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MEGA- EXPOSICIÓN DE FOTOGRAFÍA Y LITERATURA Docentes afiliados de todas las áreas de los DE 13º 19º 20º 21º “María ElEna Walsh: poEMas para rEtratar” Elegir uno de estos 5 poemas. BALADA DEL TIEMPO PERDIDO "Yo dormía pero mi corazón velaba..." Cantares Como a sus vanas hojas el tiempo me perdía. Clavada a la madera de otro sueño volaban sobre mí noches y días. Poblándome de una nostalgia distraída, la tierra, el mar, me entraban en los ojos y por ociosas lágrimas salían. Cuántos papeles ciegos en la tarde vacía. Qué multitud de imágenes miradas como a través de una mortal llovizna. Entorpecidas sombras en vez de manos mías, de tanto enajenarse en los espejos, todo lo que tocaba se moría. Memorias y esperanzas callaban su agonía: un porfiado presente demoraba siempre las mismas ramas amarillas. Qué tiempo sin sentido el que mi amor perdía. Qué lamentable primavera inútil haciendo en vano flores que se olvidan. Pero mi corazón velaba y no sabía. Recuperada su pasión secreta ahora enamorado resucita. Y el tiempo que hoy me guarda entre sus hojas vivas es un tiempo feliz desde hace tantos sueños que nacerán en la vigilia. SERENATA PARA LA TIERRA DE UNO Porque me duele si me quedo pero me muero si me voy, por todo y a pesar de todo, mi amor, yo quiero vivir en vos. Por tu decencia de vidala y por tu escándalo de sol, por tu verano con jazmines, mi amor, yo quiero vivir en vos. Porque el idioma de infancia es un secreto entre los dos, porque le diste reparo al desarraigo de mi corazón. Por tus antiguas rebeldías y por la edad de tu dolor, por tu esperanza interminable, mi amor, yo quiero vivir en vos. Para sembrarte de guitarra, para cuidarte en cada flor y odiar a los que te castigan, mi amor, yo quiero vivir en vos. LA FORMA Dios sigue haciendo piedras y animales con las antiguas formas de la vida. Sigue poniendo pájaros iguales sobre la misma tierra repetida. Pero para la voz recién nacida todas las cosas son originales, y al cantar las descubre sorprendida, desde su cárcel, desde sus umbrales. Si estoy en medio de la noche y siento que otra vez vuelven con la primavera la renovada antigüedad del viento y la luna que vi por vez primera, muero, pero renazco al otro día, húmeda de reciente alfarería. LOS EJECUTIVOS El mundo nunca ha sido para todo el mundo mas hoy al parecer es de un señor que en una escalerita de aeropuerto cultiva un maletín pero ninguna flor. Sonriente y afeitado para siempre trajina para darnos la ilusión de un cielo en tecnicolor donde muy poquitos aprendan a jugar al golf. Ay, qué vivos son los ejecutivos, qué vivos que son. Del sillón al avión, del avión al salón, del harén al edén siempre tienen razón; y además tienen la sartén, la sartén por el mango y el mango también. El mundo siempre fue de los que están arriba pero hoy es de un señor en ascensor a quien podemos ver en las revistas cortando el bacalao con aire triunfador. Lo come para darnos el ejemplo de rendimiento máximo y confort. Digiere por teléfono y después nos vende conciencias puras de robots. El mundo siempre fue de algunos elegidos, hoy es para el que elige lo mejor, dinámico y rodeado de azafatas sacrificándose por un millón o dos. Como él tiene de todo menos tiempo nos aconseja por televisión ahorrar, para tener estatus en la muerte, la eternidad en un reloj. BARCO QUIETO No te vayas, te lo pido, de esta casa nuestra donde hemos vivido. Qué nostalgia te puedes llevar si de la ventana no vemos el mar. Y afuera llora la ciudad tanta soledad. Todo cansa, todo pasa, y uno se arrepiente de estar en su casa, y de pronto se asoma a un rincón a mirar con lástima su corazón. Y afuera llora la ciudad tanta soledad. No te vayas, quédate. que ya estamos de vuelta de todo y esta casa es nuestro modo de ser. Tantas charlas, tanta vida, tanto anochecer con olor a comida son una eternidad familiar que en un solo día no puede cambiar. Y afuera llora la ciudad tanta soledad. Estos muros, estas puertas, no son de mentiras, son el alma nuestra, barco quieto, morada interior que viviendo hicimos, igual que el amor. Y afuera llora la ciudad tanta soledad. Volver atrás