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Una estrategia para la enseñanza de los tiempos verbales en relación con el uso de los pronombres personales Por María José Bravo Cuando enseñamos los tiempos verbales, no escribimos los pronombres al lado de cada forma verbal, es decir, no escribimos: Yo compro Tú compras Vos comprás Él compra etc. Si, al principio del aprendizaje, tenemos que escribir los pronombres para que los alumnos identifiquen la forma verbal con el pronombre a que pertenecen, es decir, la persona que representan, lo hacemos entre paréntesis, así (yo) compro (vos) comprás etc. Una vez que los alumnos aprenden a qué persona corresponde cada forma verbal, no es necesario seguir escribiendo los pronombres al lado de cada forma. Si el profesor recita un verbo, lo hace sin los pronombres y si los alumnos, para memorizar alguna forma, recitan varias personas del verbo, se los alienta a hacerlo sin los pronombres. Esto es así por lo siguiente: el español es una lengua que no tiene la exigencia de aparición del pronombre sujeto junto al verbo, como sí la tienen otras lenguas. En español decimos: Fui al supermercado y compré un kilo de bananas, pero me olvidé de comprar crema. Y no YO fui al supermercado y compré un kilo de bananas, pero YO me olvidé de comprar crema. Al provenir los alumnos de otras lenguas o saber otras lenguas en las que la aparición del sujeto es obligatoria, suelen tender (sobre todo al principio del aprendizaje) a reponer el sujeto, cosa que en español resulta recargado e inadecuado pragmáticamente. De todos modos, faltaremos a la verdad si les decimos a los alumnos que nunca se usa el pronombre con los verbos. De hecho, en español, los pronombres aparecen a veces. Los pronombres aparecen explícitos en dos casos en español: cuando se trata de un tema nuevo y cuando se trata de un contraste. 1) Si empiezo a hablar y el tema es nuevo, usaré el pronombre Él es un chico muy simpático. Si ya es tema, dejaré de usa el pronombre: Él es un tipo muy simpático. Siempre está de buen humor y trata de llevarse bien con todos. 2) Cuando establezco un contraste con algo que se ha dicho o se ha pensado (aunque sea implícitamente) uso el pronombre para macar la diferencia. --Ayer fui al circo. -- ¡No me digas! Yo hace siglos que no voy a un circo. (Es decir, vos / tú fuiste ayer y yo, en cambio, hace mucho que no voy) Estas reglas de aparición de los pronombres personales sujeto se extienden a los pronombres objeto duplicados: 1) Tema nuevo: --Disculpen. Los interrumpo. A mí me parece que esto no es bueno. Tenemos que hacerlo de otro modo. --- A ver, Sra, Raimundio, la escuchamos. 2) Contraste: --¡Me encanta el chocolate! -- ¿Sí? ¿Te gusta tanto? A mí, no. A mí me gusta mucho más lo salado. Cabe señalar que los alumnos aprenden este refuerzo con los pronombres en usos muy controlados y con propuestas muy claras. No debemos pretender que aprendan estos matices según esta diferenciación de modalidad. Lo que sí podemos hacer es ayudarlos a que no digan siempre el pronombre, cada vez que dicen un verbo, porque para el hispanohablante será, como dijimos al principio, recargado y poco adecuado.