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EL ENCUENTRO CON LA MADRE MAGDALENA SOFIA BARAT El 30 de julio de 1804 los Padres Varin y Roger vieron a visitar a Filipina en Santa María de lo Alto (Roma). 13 de diciembre de 1804. fue muy dificil para Filipina acoger de corazón las palabras del padre Varin: las obras de Dios se hacen sin prisa. EL CAMINO DE LA MISION LA DURA VIDA MISIONERA Filipina esperaba y Por fin, le dan el “sí”: quedó decidida la partida, el grupo de viajeras, el local de la futura casa de las religiosas al interior de Luisiana, en el entonces pequeño poblado llamado San Luis. El secreto de la vida de Santa Rosa Filpina D. era sencillo y radical: “QUIEN POSEE A JESUCRISTO LO POSEE TODO” Durante dos meses y medio de viaje enfrentaron diversas dificultades para ellas fueron meses de contemplación y acción de la Providencia en el día a día de la historia de los hombres. Filipina decía que “Estamos aprendiendo por la propia experiencia que se puede alcanzar la felicidad en medio de muchos sufrimientos”, así entendía la dureza de la vida. LOS PUEBLOS INDIGENAS EN TIERRAS DE MISION • bajo la presión y la codicia de los blancos filipina, con la autorización de Magdalena Sofía, abría más casas por la gravedad de los pueblos indígenas. SIEMPRE A LA ESPERA DE LA HORA DE ESTAR ENTRE LOS INDIOS EL RAPIDO DESPERTAR DE UN SUEÑO QUE HABIA DURANTE 35 AÑOS NOMBRES: • El Padre Verhaegen pidió y consiguió que un grupito de religiosas del Sagrado Corazón, se preparase para partir “en misión” al aldo de los indios Potowatomis (nombre que significa “los que hacen fuego” • Hubo quien se extrañara del envío de una religiosa de casi 73 años a la aspereza de aquel viaje y la dureza de la nueva vida • Fue difícil para filipina aprender y entender aquel idioma sin gramatica Su mayor deseo fue estar entre los indios • Los indios la llamaron la mujer que siempre reza FATIMA SANCHES BALERIA PRADO PAULA CALDERON PRISCILA LI PROFESORA: MARIA ZAPATA ANGELICA