Download Primer premio poesía Bachillerato

Creación
Primer premio poesía Bachil erato
Infancia
Paula García Valverde
Yo quiero reír llorando y llorar riendo,
bailar sin que mis pies conozcan el suelo,
hablar en silencio y volar contra el viento;
caer al cielo, y desde allí guiñarte un beso.
Cántame un "te quiero",
vivamos en un cuento.
Alas
Arráncame las plumas
y déjame desnuda;
luego, bésame.
Las rosas serán rojas
si a una se le antoja,
si una quiere.
Cuando duela la sangre
no llames a la Muerte:
calla y siente.
Los suspiros se llenan
de lágrimas y penas;
llorará el ayer.
Ya busca la salida
la amargura sin vida,
temes que entre.
Ve, cierrra las ventanas,
ya se irá a la mañana.
Lo sé, duerme.
¿No agradeces mi ayuda?
Araña mi cordura,
¿huyes, fe?
Arráncame las plumas
y déjame desnuda;
luego, ódiame.
Arráncame las plumas,
que no quede ninguna.
Adiós, alas...
Carta secreta de Romeo a Julieta
Querido amor: poseo papel y tinta de sobra
para escribirte mil poemas y mil canciones,
mas todas las paIabras serán insuficientes
si tus ojos en mi carta no se quieren posar.
Con la vista iluminada por tus dos luceros,
con el vaIor muy presente y el pulso bien firme,
te escribo para contarte un pequeño secreto
que lleva días guardado en silencio, y duele.
Todos estos preámbulos quieren decirte que...
...te quiero.
Y no sólo eso, además quiero decirte que...
¡Ah! ¿Qué será, amor mío, sino muchos más simples
"te quiero"?
Este corazón que arde en mi apasionado pecho
palpita cantando sus amores, y se hace eco
con intención de que le escuches desde tu lecho
y enamorada halles al enamorado dueño.
Ven querida mía, mi alma, mi amor, corazón,
quiero recitarte al oído los mil poemas
que te escribía durante las noches en vela
pensando en ti, en tus besos tu piel, tu calor.
No te importe ser Capuleto o ser yo un Montesco,
¿qué más dan los nombres, si el amor no tiene nombre?
Si así lo deseas, renuncio a él para siempre,
y llevarė el tuyo en la voz grabado a fuego.
YO te esperaré, querida, hoy y hasta mi muerte.
Y si durante una eternidad he de buscarte,
ten por seguro que te buscaré incesantemente
hasta encontrate, y estar juntos eternamente.
Me despido y termino esta carta con más versos.
Te mando un beso cien, mil o millares de besos
esperando los tuyos, suaves cual terciopelo.
Te quiere, Romeo (quien ya no es ningún Montesco).
Vox Populi
71