Download ASI COMO EL MUNDO ME HA ODIADO, ASI TAMBIEN SEREIS

Document related concepts
no text concepts found
Transcript
ASI COMO EL MUNDO ME HA ODIADO,
ASI TAMBIEN SEREIS ODIADOS VOSOTROS
12-3-2016
Mi Dios, vengo a cumplir Tu Voluntad y no la mía, a recibir Tus Santas palabras en lo
profundo de mi pobre corazón que solamente busca servirte, aunque esto muchas veces me
cause tribulación y persecución.
Señor en Ti confió y en ti pongo toda mi causa y solamente con Tu Santa gracia podré
mantenerme firme hasta el fin aunque tenga que ir contra el mundo y ser juzgada por el
mundo. Benditas las tribulaciones de mi alma, las persecuciones por ir tras Tus huellas y dar
testimonio de mi Fe, de Tú Santa presencia en Mi vida. Amen.
---Dichosos los perseguidos por Mi causa, los que son odiados por el mundo,
porque a vosotros os aguarda la Gloria Eterna, a los que se mantengan firmes y Me
sean Fieles hasta el fin. Ténganse por Bienaventurados los que son calumniados,
perseguidos y odiados por dar testimonio de la Verdad, porque no todos aman la
Verdad ni la reciben, en cambio vosotros que Me conocéis y Me tenéis como vuestro
Salvador y Señor, a vosotros os aguarda la recompensa final, la corona de la Victoria
y el gozo Eterno, pero antes debéis ser odiados y perseguidos como El HIJO DEL
HOMBRE también lo fue.
Pruebas mayores vienen aún para Mi Iglesia, la hora de la gran prueba final,
y os digo que no todos perseverarán hasta el final, porque muchos me negarán por
temor a no perder sus vidas; pero, en Verdad, os digo que todo el que quiera salvar
su vida la perderá, y el que la pierda por Mi Causa ése la habrá ganado, ganará en
Mí la Verdadera Vida.
El tiempo se acorta y el verdadero tiempo de Mi Misericordia llega pronto para
toda la humanidad, para todo hombre y nación; el tiempo en que Yo, Vuestro Dios,
os visitaré y tendré un encuentro personal con cada uno de vosotros, en un pequeño
juicio, para que conozcáis, cada uno de vosotros, Mi Amor, Mi DIVINIDAD y MI GRAN
MISERICORDIA, antes de que llegue el día de la gran prueba, porque escrito está que
llegará el día terrible y glorioso, terrible para unos y Glorioso para otros, según
vuestras obras y vuestros corazones.
Ese gran día está ya a las puertas, y son pocas las almas que se encuentran
preparadas, aun entre Mis Pastores están sin ninguna preparación, y no han
preparado a las almas que les confíe para este próximo encuentro, porque se llenaron
de sabiduría humana, sabiduría del mundo, despreciando la sabiduría que adquiere
el hombre sensato y justo, el que en verdad me busca y se llena de Mi sabiduría en
la oración y dialogo conmigo.
Este acto de Misericordia, que daré a toda la humanidad, es UN SEGUNDO
PENTECOSTES, el verdadero encuentro de Dios con cada una de sus creaturas, a fin
de que todos ME conozcan, sepan que YO SOY EL QUE SOY, EL DIOS TRINO Y UNO,
El que gobierna todo, Alfa y Omega, Principio y Fin.
Arrepentíos ahora, que todavía es tiempo, dejadme arrancar de vosotros
vuestros corazones de piedra, y os daré un corazón de carne, un corazón abierto a la
Gracia Divina, que os convertirá en Verdad y os hará hombres nuevos.
Pronto toda la humanidad habrá de tener un encuentro conmigo a fin de
preparar su alma para la prueba final; no endurezcáis más vuestros corazones
rechazando esta Gracia y este encuentro conmigo, porque si lo hacéis, en verdad os
digo, que ciertamente moriréis y no podréis soportar la hora de la prueba final, que
está ya por caer sobre vosotros y este mundo, porque habrán ya de venir muy pronto
esos cielos nuevos y tierra nueva prometidos para los justos, los de corazón puro ,
los que perseveraron hasta el fin.
Esta es también la hora en que se hace la separación del trigo y la cizaña, la
separación de los justos y los injustos, para apartar unos a mi derecha y otros a mi
izquierda, los que Me recibieron y amaron la Verdad, y los que me negaron y amaron
la mentira, porque no todos son hijos de Mi Padre, los verdaderos hijos de Mi Padre
son hijos de la Luz, hijos del día, hijos de quien es la Verdad; y hay otros que son
hijos de las tinieblas, y tienen a otro por padre, al que es príncipe de este mundo,
príncipe de las mentiras y la obscuridad.
Así como se dijo de MÍ que CAUSÉ DIVISIÓN, ASI ES AHORA PARA
VOSOTROS, LOS QUE EN VERDAD DAN TESTIMONIO MIO, os acusan de causar
división, y os señalarán enjuiciándoos injustamente por AMAR LA VERDAD Y DAR
VERDADERO TESTIMONIO MÍO, pero vosotros no temáis a esos juicios, mas os vale
guardar en vosotros el único temor Santo, EL TEMOR A VUESTRO DIOS, A PERDER
MI GRACIA Y LA SALVACION, EL SANTO TEMPOR DE OFENDERME.
YO SOY EL ÚNICO CAMINO, LA VERDAD Y LA VIDA; Y LA VERDAD ESTÁ EN
MÍ porque fuera de Mí no hay otros dioses, pues Uno solo es el Creador de todo
cuanto existe, de todo lo visible y lo invisible; Uno solo es el autor de la Vida y de la
Verdad. Lo demás no viene de Mí, viene del engañador, del mentiroso, el que es el
seductor y destructor, el diablo, Mi Adversario.
Estad atentos y preparados para que os encuentre con vuestras lámparas
encendidas, llenas de aceite, para que no seáis tomadas por sorpresa y estéis en la
obscuridad entre tinieblas.
Los justos aguardan ya esta hora, este pequeño juicio y encuentro conmigo.
Nada temen porque viven en la Verdad, buscando hacer la Voluntad de Mi Padre,
como Yo, EL HIJO, SIEMPRE LO HICE.
AYUDAD, VOSOTROS, LOS QUE ESTAIS EN LA LUZ A VUESTROS HERMANOS
MÁS DÉBILES EN LA FE, ayudadles a prepararse para este encuentro conmigo, porque
para muchos será un encuentro de gozo y de alegría, viendo el fiel cumplimiento de
todo cuanto os ha sido anunciado desde antiguo y de boca de Mis profetas y enviados.
Vosotros, sacerdotes, preparad bien vuestras almas porque al que mucho le
he dado, mucho se le exigirá; y en vosotros recae el estado de las almas que os he
confiado, y grandes serán las penas y dolores que tendréis que soportar, muchos de
vosotros, al ver el incumplimiento de vuestra misión, SALVAR ALMAS.
Hacer vuestra confesión de vida y haced ya, desde ahora, penitencia por
vuestras culpas y las culpas de Mi Iglesia, para que podáis soportar el día de la gran
prueba, el paso de Mi Presencia que os trae el último acto de Mi Gran Misericordia,
en este segundo pentecostés a la humanidad.
Vengo pronto como Rey Justo, pero antes he de venir como Rey Misericordioso
para toda la humanidad.
Dichosos los que guardan Mis Palabras en vuestros corazones.
---Gracias Mi Señor porque siempre buscas nuestro bien, gracias porque Tú nunca haces
nada sin advertirnos y con amor nos preparas porque deseas siempre nuestro bien y nuestra
Salvación.
VEN SEÑOR JESUS, VEN PRONTO SEÑOR, VEN QUE TE ESPERAMOS. AMEN