Download un méxico sin sida - Amigos Contra el Sida en Internet

Document related concepts

VIH/sida en México wikipedia , lookup

VIH/sida wikipedia , lookup

VIH/sida en el Perú wikipedia , lookup

VIH/sida en Argentina wikipedia , lookup

VIH/sida en África wikipedia , lookup

Transcript
1
UN MÉXICO SIN SIDA
UN MUNDO SIN SIDA, UN MÉXICO SIN SIDA.
Dra. Patricia Volkow
Para las nuevas generaciones vislumbrar un
mundo sin SIDA debe resultar difícil, aquellos
que nacieron en el año de 1981, deberán estar
cumpliendo sus 32 años, ya una generación
adulta, que nació en el año cuando fueron
descritos los primeros casos de esta enfermedad
hasta entonces desconocida. Fue en la
primavera de ese año en que salieron
publicados en revistas médicas científicas de
primer orden, los dos primeros trabajos que
daban cuenta de dos formas de presentación de
esta que era una nueva enfermedad: la
Neumonía por Pneumocistis carinii y otro grupo
de casos con Sarcoma de Kaposi. Pero un mundo
sin SIDA fue realidad para aquellos que hoy
traspasamos los 50 años de edad. A nosotros
nos toco como adulto jóvenes la explosión que
representó esta epidemia, conocimos con
conciencia, el antes y el después. Los casos de
Sida, en ese entonces ineludiblemente fatal, empezaron a contarse por centenas y por
centenas igualmente los muertos, pronto por miles y en unos cuantos años fueron
millones de personas afectadas y muertas por esta enfermedad, que no conoció
fronteras, ni razas, ni sexos, ni grupos etarios, ni sociales.
A partir de la fundación de ONUSIDA (la agencia de Naciones Unidas para coordinar la
repuesta contra le epidemia a nivel mundial) en 1994, se visibilizó al público general
la dimensión de la tragedia, resultaba angustiante ver crecer las cifras que la
organización publicaba año con año, millones de personas afectadas, 2 millones de
muertes anuales, 15,000 nuevas infecciones por VIH diariamente en el mundo,
millones de niños huérfanos, particularmente en África subsahariana, donde la
epidemia rompió de un tajo el logro obtenido con los programas de vacunación
infantil, cayendo hasta dos décadas la esperanza de vida en algunos países de esta
región del mundo. ¿Cómo es que ahora hablamos de un Mundo sin Sida?
Si bien es cierto que el SIDA trajo dolor, sufrimiento y muerte a la familia humana,
también hay que decir que movilizó voluntades como ninguna otra enfermedad lo
había hecho antes, impulso la agenda de los derechos humanos, buscando cambiar las
sociedades y las leyes para hacer valer estos derechos: la no discriminación; el respeto
al individuo cualquiera que sea su raza, sexo, religión o preferencia sexual, el acceso a
1
2
UN MÉXICO SIN SIDA
la atención médica. También impulso de una forma impresionantemente intensa la
investigación biomédica, en ciencias básicas y epidemiológicas. El acervo de
información que hoy existe es innumerable, pero también impulso como nunca antes
las políticas públicas basadas en la evidencia científica.
Los políticos actuales no pueden ignorar ni presentarse ignorantes del acervo de
conocimientos sobre prevención y tratamientos que se han acumulado en estas; ya a
más de tres décadas para combatir esta epidemia.
Probablemente después del año de 1981 cuando se hizo evidente el inicio de la
epidemia, y el de 1985 cuando se comercializaron las primeras pruebas que permitían
identificar a personas infectadas, aun sin manifestaciones de la enfermedad, y ello fue
el parteaguas para la prevención de la transmisión del VIH por transfusión sanguínea;
existen otros tres años claves por la presentación de la evidencia científica que marca
pautas fundamentales en la lucha contra la epidemia, uno de ellos es 1994 cuando se
presentó el estudio que mostró que era posible de evitar que una madre transmitiera
la infección a su hijo si recibían ambos tratamiento antiretroviral, el nacimiento se
daba a través de cesárea y el niño no era amamantado. El otro es 1996, en Vancouver,
durante el Congreso Mundial de SIDA se presentaron los primeros estudios con
tratamientos combinados que eran altamente efectivos para suprimir la replicación
del virus y ello permitía que el sistema inmune se fuese recuperando, de suerte que
una persona con enfermedad avanzada, si recibe TARAA , ( se acuño entonces el
acrónimo en ingles HAART) revierte el estado de inmunosupresión y recupera el
bienestar físico que le permite vivir prácticamente de manera normal, a excepción de
tomar ininterrumpidamente el tratamiento antiretroviral. Estos estudios fueron
replicados en la práctica clínica cotidiana y se desarrollaron otros más sofisticados
con nuevos fármacos menos tóxicos, mas amigables de tomar, que facilitan la
adherencia al tratamiento. Ya que si una persona no tomo regularmente el
tratamiento el virus puede volverse resistente a esos fármacos, y volverse inútil el
tratamiento.
El último año clave es precisamente el año pasado; en 2012 se presentó el estudio que
demuestra que además el tratamiento antiretroviral altamente activo (siglas en inglés
HAART) previene la transmisión sexual entre parejas discordantes.
El movimiento social que despertó esta epidemia siguió creciendo, luchando no solo
contra la discriminación y el estigma sino por lograr que cada vez más personas
infectadas tengan acceso al tratamiento, y gracias a la expansión de dicho tratamiento
en diversos países y sectores sociales, hoy se sabe en base a la evidencia científica, que
el tratamiento antiretroviral a nivel de las comunidades también tiene un impacto
preventivo que han permitido disminuir, por vez primera en la historia de esta
2
3
UN MÉXICO SIN SIDA
epidemia, el crecimiento sostenido de los casos, que no había cesado en las tres
primeras décadas.
Eso entonces tenemos que entender que un Mundo sin Sida, un México sin Sida es
aquel donde las personas no mueran de una enfermedad que hoy es controlable a
largo plazo con el tratamiento antiretroviral. El avance científico no ha logrado un
tratamiento curativo, que sea aplicable masivamente, y que permita erradicar el virus
del cuerpo de una persona infectada. Pero si se ha logrado, que si una persona
infectada recibe tratamiento antiretroviral oportuno su esperanza de vida puede casi
igualarse a sus pares no infectados, para ello tiene que saber que está infectada antes
de que el virus haga estragos. El individuo debe tomar ininterrumpidamente el
tratamiento, para evitar que el virus se vuelva resistente a los fármacos.
Es fundamental que las personas se hagan la prueba para saber si están o no
infectadas y no esperar hasta estar gravemente enfermo para hacerse la prueba. Los
mexicanos y las mexicanas tienen que entender que hacerse la prueba del VIH es una
esperanza de vida, ya que el tratamiento antiretroviral en nuestro país es accesible
para todas aquellas personas que los requieren.
Un México sin Sida es aquel donde ningún niño nazca infectado con el VIH, para ello es
indispensable que toda mujer embarazada tenga acceso a la detección del VIH y de
Sífilis y al tratamiento antiretroviral para ella y preventivo para su hijo.
Un México sin SIDA requiere que el programa de Sangre segura continúe con el
mismo impulso que se le dio en la primera década de la epidemia, que se cuente con
un órgano que rija la supervisión del funcionamiento de los bancos de sangre y no
dar marcha atrás en la prohibición del comercio de la sangre y el plasma.
Un México Sin SIDA requiere también de una sociedad libre de estigma y
discriminación, de jóvenes informados; la educación sexual es una herramienta
preventiva, pero se requiere que las personas tengan también acceso a condones, en
particular los jóvenes; debe incrementarse la accesibilidad para el uso del condón.
Todos estos puntos para lograr un México sin SIDA parecen difíciles, en algunos ha
habido logros sobresalientes, como la prevención de la transmisión por vía de la
transfusión sanguínea, y en la última década el acceso al tratamiento antiretroviral,
pero en otras hay rezagos que no alcanzarán dispensa en el juico de la historia como
es la prevención de la transmisión del de VIH madre a hijo.
Un México sin SIDA, requiere que todos aquellos infectados tengan acceso al
tratamiento antiretroviral, que la persona infectada haga conciencia y se
responsabilice de la toma regular y permanente de sus medicamentos. Esto implica
3
4
UN MÉXICO SIN SIDA
decenas de miles de mexicanos recibiendo tratamiento, que les permita vivir sin
enfermedades, que una mujer infectada pueda tener un hijo sin que nazca infectado y
que ese hijo tengan una madre y un padre que puedan cuidar de él y verlo crecer.
Repito, implica decenas de miles de mexicanos recibiendo tratamiento por tiempo
indefinido, que vistos con ojos mercantiles representan jugosas ganancias para la
industria farmacéutica, particularmente para aquellas que ponen precios a México
superiores que los precios a otros países del mismo continente con una epidemia de
dimensiones similares, por ello un México Sin Sida requiere que esto sea modificado,
sea a través de la negociación con compras consolidadas a nivel nacional y/o por la
movilización y la presión social a estas compañías. Sus precios actuales hacen peligrar
la viabilidad del acceso universal al tratamiento antiretroviral en nuestro país,
señalemos la necesidad que estas compañías establezcan su compromiso en logar un
México Sin Sida, y que aquellos que dirigen estas corporaciones sean sensibles no solo
a la ganancia económica sino también al beneficio social que sus productos
comprados a precios justos brindan a la sociedad. Esperemos que en esta lucha
decidan colocarse con una política de precios más justo, en el sitio para que el juicio de
la historia los ubique como verdaderos aliados del país en la lucha contra el SIDA.
Hay otros puntos que como nación tenemos que visualizar y que forman parte
fundamental para lograr un México sin Sida, la educación y el acceso al desarrollo
personal de los jóvenes que los aleje del abuso de sustancias como drogas o alcohol,
que incrementan las conductas de riesgo y disminuyen los mecanismos de protección
a la salud y prevención del Sida.
Por último no quiero dejar de destacar que no podemos esperar a que llegue lo que no
ha llegado, después de décadas de investigación para alcanzar un Mundo sin Sida, no
ha habido hasta ahora vacuna exitosa en prevenir la infección del VIH, pero si se sabe
mucho en materia de intervenciones preventivas y algunos de estos programas en
particular en poblaciones con prácticas de riesgo o en situaciones de mayor
vulnerabilidad, los programas preventivos son escasos y en algunas regiones del país
inexistentes se requiere mayor inversión y esfuerzo para logara la meta planteada.
Construir un México sin Sida es labor de todos, se requieren de todas las voluntades
para construir un México con una sociedad más tolerante a la diferencias, que no
discriminen, ni estigmaticen a sus miembros, urgimos de una sociedad que respete y
aprecie a sus mujeres, a todas sus mujeres, jóvenes, adultas, viejas y ancianas, urgimos
de una sociedad sin violencia, con oportunidades de educación y empleo.
Queremos todos, eso espero, un México sin SIDA.
Texto leído el lunes 11 de febrero de 2013 en la presentación de la
Propuesta de una Nueva Estrategia Nacional en VIH/sida 2013-
4