Download escuchar - Rakel Mateo

“Nos han sido dadas dos orejas pero solo una boca, para que podamos oír mas y hablar
menos”
Zenon de Elea
Las personas en duelo necesitan ser escuchadas, pero ¿qué significa escuchar?. Podría
parecer absurdo preguntárselo, sin embargo, no lo es, porque verdaderamente no es fácil.
Escuchar significa mucho mas que oír, mucho mas que dejar de hablar. Significa poner
atención para oír, significa sobre todo querer comprender, teniendo muy presente que hay
un mundo mas grande detrás de las palabras, tener en cuenta el significado que creemos que
tienen esas palabras para las personas que las pronuncian.
En muchas ocasiones el doliente no tiene claro lo que le sucede, no sabe ponerle palabras a
eso que esta sintiendo, se trata entonces de ayudar desde la escucha, desde una escucha
activa donde el fin ultimo será clarificar a esa persona, ayudarle a nombrar lo que le esta
sucediendo. “Siento miedo, siento rabia, siento dolor...”, es entonces cuando estamos
escuchando desde el corazón, cuando damos permiso a la otra persona a que exprese todo
lo que esta sintiendo, sin entrar en juicios o en consejos, simplemente escuchando.
El que escucha desde el corazón, se convierte en un instrumento de ayuda, porque da
espacio al otro para abrirse con total libertad y confianza y esto permite sentirse
comprendido y afirmado.
Podemos entender la escucha activa como un hospedaje emotivo para el que sufre, es aquí y
ahora donde puedes desahogarte, donde puedes permitirte ser tu mismo y expresar todo lo
que sientes. Dar a la persona en duelo la posibilidad de hablar y de ser escuchada es darle la
posibilidad de reducir en muchas ocasiones la angustia, esa que ahoga y que no nos
permite seguir hacia delante.
Podría decir que el éxito de los grupos de autoayuda radica en esto, en saber escuchar.
Finalmente el espacio compartido se convierte en ese hospedaje emocional, en ese lugar
donde uno se siente comprendido tal y como es, donde uno puede permitirse la alegría y el
llanto, el miedo y la ilusión por una nueva vida, en definitiva es el espacio donde uno puede
ser el mismo.
Estamos muy acostumbrados a reunirnos para reír y a aislarnos para llorar, tal vez sea el
momento de pensar que compartir el dolor es muy positivo, tal vez sea el momento de
darnos cuenta que estamos en esta vida para vivir con los otros.
somos seres sociales que necesitamos de los demás, pero no solo en lo bueno, compartir un
espacio y escuchar realmente, de corazón , al que me necesita no solo ayuda al que tengo
delante, me ayuda a mi mismo .
Rakel Mateo Sebastián