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Arrugas del cuello y escote
A pesar de que la mayoría de las
cremas faciales, aconsejan prolongar
el cuidado hacia las zonas del cuello y
del escote; estas áreas son totalmente
olvidadas, a la hora de realizar nuestra
rutina de cuidado diario.
Lejos de entender que son la extensión
de nuestra cara, quedan aisladas sin
darle atención alguna, pareciendo no
formar parte, ni del cuerpo ni del rostro.
El cuello y el escote, sin lugar a dudas,
es una parte sexy de nuestro cuerpo,
que queda expuesta cuando elegimos
determinados atuendos.
Los cuellos en v, los strapless, los tops,
son algunos de los modelos que nos
revelan el paso del tiempo y nos hacen
prestar atención a esta zona hasta
ahora, siempre relegada.
Anatómicamente son zonas
especialmente delicadas.
Un sostén muscular malo: el
platisma, es un músculo superficial
que desciende desde el maxilar inferior
hasta pasando las clavículas.
Tiene como función la mímica de
bajar el labio inferior y al no estar
conectado con la estructura ósea,
pierde elasticidad ya que además debe
soportar una tensión por el peso del
pecho.
Menos glándulas sebáceas que en
el rostro: la piel que cubre el músculo,
posee menor cantidad de sebo en la
composición de su film hidrolipídico
(manto protector contra las agresiones
externas) siendo entonces, más
vulnerable.
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2009
ESENCIA SEPTIEMBRE
El uso de productos alcalinos
como los jabones, contribuyen
a alterar el ph natural de la piel,
imposibilitando retener la humedad
natural y desarrollando áreas con alta
sensibilidad.
Junción Epidermal más superficial
y sensible: Se trata de la unión de
la Epidermis con la Dermis, donde
se inicia el ciclo de la renovación
celular y donde las células madres se
dividen para emerger y reemplazar la
viejas y dañadas. Al encontrarse más
superficialmente, corre mayor riesgo
de sufrir cualquier tipo de alteración o
deterioro.
Más delgada y estructuralmente
diferente: ya que debe cubrir el
músculo del cuello, las fibras de
elastina se van reduciendo en cantidad,
las pocas que quedan se vencen,
no pudiendo soportar el peso de
la superficie cutánea; finalmente
se rompen alterando incluso la
microcirculación.
Menos melanocitos: Estas células
son las encargadas de producir la
melanina, pigmento natural que da
color a la piel y además la protege de
los rayos nocivos del sol. Menos y más
grandes, comienzan a funcionar de
manera irregular, alterando el color de
la piel, manchándola, sobre todo en la
zona del escote.
Más estable en su nivel hídrico:
Una a favor!
El rostro normalmente posee
diferentes áreas con distintos niveles
de hidratación, generalmente más
humedad a los lados y más oleosa en
la zona T.
Es erróneo creer que el cuello es más
seco que el rostro, si bien empieza a
perder hidratación natural, sus niveles
de humedad suelen ser más estables.
Naturalmente menos protegida y
envejeciendo más rápido que el rostro,
estas causas se conjugan ocacionando
las conocidas arrugas en collar o
“anillos anuales” o “anillos de Venus”;
las líneas en sentido vertical que van
desde el mentón hasta el escote,
llamadas bandas platismales y el
descolgamiento del contorno facial,
llamado también: décolleté o flaccidez,
además del temido doble mentón.
Si bien podríamos utilizar en el cuello
y escote, las cremas de rostro, no
deberíamos olvidar que la piel facial
está naturalmente más preparada para
soportar las agresiones externas.
Es muy recomendable, sobre todo si
se quiere realizar un cuidado puntual,
optar por productos formulados
especialmente para el cuello y escote,
que mejoren la tonicidad y la elasticidad
para evitar la flaccidez y la aparición de
pliegues y arrugas.
En cuanto a la alimentación, la ingesta
de Biotina (Vit B7) presente en las
carnes, hígado y víceras en general,
yema de huevo, levadura de cerveza,
manteca de maní, soja, arroz, harina,
trigo, garbanzo y nueces; puede ayudar
a la salud de la piel, además de la de
las uñas y el cabello.