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Dijo, El Dr. Jorge Corzo, sobre el significado de ser luterano. “La vida cristiana no es solamente en la iglesia, sino fuera de ella”. La iglesia Luterana en el mundo, se coordina mediante la Federación Luterana Mundial (FLM) (en inglés Lutheran World Federation - LWF). La FLM agrupa hoy día, 145 iglesias en 79 países. Estas iglesias representan aproximadamente 70.3 millones de cristianos y cristianas de todo el mundo. Foto iglesia El Redentor, Dr. Jorge Corzo – Q.E.P.D-. Foto tomada por Oscar Niño. En conmemoración de los próximos 500 años de la reforma protestante, hablamos con uno de los miembros confirmados más reconocidos en la iglesia Luterana en Colombia, se trata del Dr. Jorge Corzo. Él, amablemente, nos contó sobre su experiencia de vida como luterano, del significado de la doctrina de la iglesia, la contextualización de la liturgia Luterana en la iglesia contemporánea, y muchas cosas más. Todo visto desde su perspectiva de fe. Además, nos dio un mensaje para los líderes y directivas de IELCO. Al llegar al lugar, un hermoso Órgano Hammond b3 con sistema Lesley de 1950, sonaba exquisitamente interpretado en la iglesia “El Redentor” -una de las ocho congregaciones Luteranas que hay en Bogotá-. Se encuentra ubicada en la calle 56 con carrera 13, sector de chapinero, su construcción tradicional en madera, y la cruz que se levanta en su frente, hace pensar a las miles de personas que pasan por el lugar, que se trata de un templo Católico Romano y muchos se persignan frente a ella. En su interior, el olor a madera y cera, evocan la historia del lugar, los ventanales laterales en forma de arco, y el eco, trasladan la mente a un lugar diferente al imaginario común de las iglesias protestantes. Quizás por esto, El Redentor, es la elección preferida de las parejas en sus matrimonios, inclusive, creyentes de diferentes denominaciones acuden al lugar para celebrar sus bodas, todo por su la sobriedad, que refuerza el estilo propio que la caracteriza. El Dr. Corzo, -como lo llaman en la comunidad-, es quien ha interpretado el Órgano durante más de 55 años en El Redentor, y aun lo hace con entereza y energía. Al encontrarnos, nos saludamos fraternalmente y no sentamos en el lugar desatinado para el músico en las capillas, desde ese lugar alto se puede observar todo, es un sitio privilegiado del cual ya está acostumbrado. Al comenzar la charla, parecía algo reservado y prefería hablar poco, pero concretamente. Así es él, directo y de pocas palabras. La experiencia de vida de este hombre y su forma de percibir el luteranismo, encaminaban las preguntas hacia la historia de su llegada a la iglesia. -Yo conocí de la iglesia Luterana a la edad de 12 años, me encontraba en la escuela primaria rural, en ese entonces, asistía a los cultos que se celebraban en la casa de un familiar. Era cerca de donde vivía. Desde esos años conocí el evangelio, luego me traslade a Bogotá a estudiar en el Instituto Bíblico Cultural, eso fue en el año de 1949 -. La Iglesia Luterana en Colombia (IELCO), está presente desde 1948. Ubicándola entre las iglesias protestantes más antiguas del país. En su historia se habla, de la llegada por medio de misioneros, que iniciaron su obra de evangelización en lugares como el departamento de Casanare y Boyacá, entre otros. Esta ardua tarea, la realizaron en momentos de violencia religiosa y política en Colombia, donde la evangelización se convertía en algo peligroso y difícil de realizar. Usted conoció de la iglesia Luterana desde muy joven. Cuando usted llega a la iglesia, ¿qué espacio encuentro para su formación personal? Principalmente, el espacio estudiantil, la escuela evangélica. Pero lo más importante, fue la oportunidad de participar en los cultos que se celebraban en la casa rural. Al llegar al Redentor, lo primero que se percibe, es lo solemne del lugar, escuchar el Órgano sonando, hace que nos traslademos a lugares diferentes, fuera del ruido de los buses en pleno chapinero. Doctor, ¿desde qué edad interpreta este instrumento? Bueno, en realidad, lo interpreto desde que vine a Bogotá, a estudiar en el instituto bíblico cultural. Tenía mucha pasión por la música, en especial por el piano, pero en ese momento no le era permitido al estudiante de primer año tomar clases de música. Pero, yo, insistí mucho y los profesores al ver mi interés, me permitieron tomar clases de piano al segundo año. Y esta fue mi iniciación, luego tome clases de piano con profesores particulares, hasta llegar a tomar clases de “Órgano” en el conservatorio de la Universidad Nacional. Al prepararme y aprender música, por la pasión que tenía, en El Redentor, me permitieron ser el organista, nunca me he desvinculado desde su inauguración que fue en 1953. Siempre he estado en este lugar. Precisamente, este es un reconocimiento a su carrera, a toda una vida de servicio en la Iglesia Luterana, desde hace muchos días he tratado de hablar con usted pero últimamente, ¡Es difícil encontrarlo! - No, yo siempre estoy aquí-. ¡En este lugar he pasado toda mi vida, como estudiante, como músico y profesional! ¡Debe ser que no me busco bien!... Otra cosa que llama la atención, es un instrumento musical que se percibe a simple vista, se trata de una antigua Batería Gretsch. En ella se interpretan los cantos contemporáneos, junto a guitarras y un bajo eléctrico. Todo esto, alternado con los himnos interpretados por el Dr. Corzo. Parece que, lo que se busca con esta amalgama de sonidos, es satisfacer los gustos de todas las audiencias. Todos los estilos y edades se reúnen en el mismo lugar y se tiene que pensar en todo. Se percibe fácilmente, que la música es muy importante para el luteranismo. Hablemos, sobre la importancia en la liturgia Luterana, ¿qué papel desempeña la música en ella? Pues, la música es de vital importancia para la vida de una congregación, no se trata solamente de tocar un instrumento como el Órgano el piano, sino, la música debe interpretar la doctrina Luterana. De hecho, si recordamos el Dr. Martin Lutero, también era compositor, compuso varios himnos y otras composiciones musicales en sus tiempos. Entonces, para mí, es de vital importancia que la música esté ligada al culto, al desarrollo de la liturgia, porque interpreta la identidad Luterana. Está claro, que la iglesia Luterana conserva tradiciones y ritos que completan su identidad. Pero, que tan importantes son estos ritos en nuestro contexto colombiano y latinoamericano, ¿se debería contextualizar la liturgia luterana a nuestra cultura? Si, se debe contextualizar. Pero sin perder de vista la esencia de la liturgia antigua. De hecho, hoy en día se aplica una liturgia actual, pero que mantiene los principios básicos de la histórica. Tampoco es conveniente aferrarnos a la liturgia antigua, porque hoy en día, algunas cosas no son viables. Así que, podemos ser contemporáneos pero, sin perder le esencia, la esencia de la liturgia luterana es la palabra y el sacramento, esto no se debe perder. La iglesia Luterana es la iglesia de la palabra, coméntenos un poco de la identidad Luterana, ¿qué significa ser luterano para usted? Para mí, significa vivir la doctrina que desarrollo Martin Lutero, la vida cristiana no es solamente en la iglesia, sino fuera de ella, donde se experimenta la vida cristiana realmente junto con el prójimo. Eso hace parte de nuestra doctrina, en la iglesia se refuerza el conocimiento de cristo. Todos en la comunidad lo aprecian en gran manera, y su experiencia de vida en la iglesia es muy importante, son muchos años e historias que ha vivido, considera que la iglesia Luterana es la misma que usted conoció, ¿cómo percibe la iglesia en la actualidad? Me parece, que ha perdido un poco el sentido puro de lo que debería ser la iglesia. Para mí, es una iglesia demasiado moderna, que no piensa en la doctrina en sí, muchas veces le da más importancia a las cosas superficiales, por ejemplo; usted, me preguntaba de la batería y los otros instrumentos, la música, no se aprecia como debe ser. Puede ser, que suene un poco drástico, pero, la música debe darle sentido a la palabra, el Dr. Martin Lutero decía; que permanezca la palabra, hablando de los himnos luteranos. Hoy en día no se tiene en cuenta ese significado, se canta sin tener en cuenta el sentido del texto que debería ser lo más importante. El 31 de octubre del año 2017, es la fecha para celebraran los 500 años de la reforma protestante. Esta fecha nos recuerda el día en que el monje católico Martín Lutero en 1517 “publicó” sus 95 tesis en la puerta de la iglesia del palacio de Wittenberg (Alemania). Lo que en realidad pretendía Lutero, era impulsar una reforma de la Iglesia Católica Romana, pero sin proponérselo se convirtió en el fundador de una segunda confesión cristiana. Las 95 tesis, buscaban únicamente poner un alto a lo que él consideraba anomalías en la Iglesia Católica Romana, se refería a temas como, la secularización de la iglesia, las indulgencias, las penitencias e interpretaciones que Lutero consideraba erradas de la Biblia. A propósito de la próxima conmemoración de reforma protestante, ¿qué significan para usted, esta fecha? Es algo muy significativo, porque nos ha dado el acceso a la lectura libre de la biblia. Es un hecho muy importante para nosotros los luteranos del país. Por último, no podía despedirme, sin pedir un mensaje para las nuevas generaciones de líderes, y directivos de la iglesia Luterana en Colombia. -Que permanezcamos en la palabra, en la doctrina, que no se debe perder. La identidad de la iglesia Luterana debe fortalecerse. Inclusive esa, es una de mis mayores preocupaciones, que se pierda la identidad de la iglesia. Ese es el mensaje que quiero dar a las nuevas generaciones y a las directivas de IELCO-. Esta entrevista se realizó en el pasado mes de Julio de 2014, en la iglesia El Redentor. Se publica, en homenaje al Dr. Jorge Corzo. Desde el departamento de comunicaciones IELCO, extendemos nuestro saludo fraternal en este momento difícil, a su familia, amigos y en general a toda la Iglesia Luterana en Colombia, que hoy lamentan su partida. Que sea Jesús, extendiendo su mano de consuelo y amor a todos los que lo extrañaremos de corazón. Escrito por: Oscar Niño Redacción Departamento Comunicaciones IELCO.