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Transcript
Tu religión en Alicante
David Bell en el lugar de reunión / Beatriz Ruiz
David Benjamín Bell Kruse Pastor Evangélico
“No hay ninguna razón por la que no
podamos vivir en paz con otras religiones”
El responsable de la Iglesia Cristiana Bautista defiende que “la
política no debería apoyar a una religión en sí”
Beatriz Ruiz / Elche
David Bell es profesor de la facultad
de Filosofía y Letras en la Universidad de Alicante. También ejerce como
pastor de la Iglesia Cristiana Bautista
del Valle situada en Petrer (Alicante).
Por una parte, David ha explicado
que el Cristianismo Evangélico no es
un solo apartado de su vida sino que
se infiltra en cada de uno de ellos.
Para él, el Cristianismo Evangélico no
es una religión. Es una relación personal con Dios a través de Jesucristo.
Por otra parte, el pastor enseñó que
el “Evangelismo” no trata de convertir
al mundo. Su deber como responsable del templo es compartir el mensaje de las buenas noticias de Cristo
e invitar al mundo a reconciliarse con
él.
Pregunta. ¿Qué es para usted la
religión? ¿Un negocio, una cultura,
una forma de vida?
Respuesta. Definitivamente diría que
mi “religión” es una forma de vida. Sin
embargo, y creo que muchos
evangélicos estarían de acuerdo, no
considero ser “evangélico” una religión. Una religión tiene más que ver
con la práctica de nuestras creencias.
En este sentido todos tenemos nuestra cultura y nuestras prácticas pero
el Nuevo Testamento tiene muy poco
para decirnos sobre la religión. Más
bien habla y enfatiza una verdad espiritual: estamos condenados a la
separación eterna de Dios, nuestro
Creador, por nuestros pecados. La
única condición que pone la Biblia
para ser reconciliado con Dios por
medio de Jesús es la fe, un descansar con completa confianza en la
obra de Cristo. La fe no es un mérito
que compra la salvación. Dios regala
esta salvación a la persona que deja
de esforzarse por ganar el favor de
Dios y cree 100% en Cristo. Así que,
volviendo a la pregunta, lo importante
no es “una religión” sino la condición
espiritual de una persona.
P. ¿Cuáles son sus funciones
como pastor?
R. Bíblicamente, el pastor tiene que
velar por las almas del pueblo de
Dios. La imagen de un pastor de ovejas sirve como ejemplo de esta metáfora. Al igual que uno pastorea ovejas
también tiene que protegerlas y alimentarlas. El pastor de una iglesia
debe cuidar a su congregación y ayudarles a crecer espiritualmente. Todo
esto lo hace a través de las enseñanzas de la Biblia. En este sentido, el
pastor no tiene autoridad propia. Mas
bien, la única autoridad es la Biblia
misma. Por ello, el pastor debe trabajar para enseñar a los cristianos a entender mejor la Biblia y, a su vez,
ponerlo en práctica en su vida.
P. ¿Dónde está su lugar de rezo?
R. Las iglesias evangélicas suelen
tener un lugar de reunión que algunos
llaman templo o capilla. En general,
no queremos confundir la iglesia (el
pueblo de Dios) con el lugar de culto.
En mi caso particular, nosotros llevamos poco tiempo en Petrer, 5 años
concretamente, y nos reunimos todavía en nuestra casa. El lugar de reunión no es importante. Estamos a
punto de abrir un local público, y el
nombre que usaremos es Capilla
Cristiana Bautista del Valle. Ya que el
local no es la iglesia, usaremos el
nombre capilla.
P. ¿Cuántos fieles os reunís allí?
R. En nuestro caso somos entre 15 y
20 personas las que nos juntamos los
domingos a celebrar un culto de adoración a Dios.
P. ¿En qué consiste el culto de adoración a Dios?
R.
Solemos
empezar
con
himnos/cánticos que nos llevan a la
meditación en Dios. Luego tenemos
un tiempo de exposición de algún
pasaje de la Biblia. Finalmente
tenemos un tiempo más abierto para
cantar himnos predilectos (de la congregación o números especiales interpretados individualmente o en
grupos pequeños), compartir pensamientos/preguntas, peticiones de
oración, etc.
“Lo importante no
es una religión sino
la condición espiritual de una persona”
P. La conversión es un momento
muy importante, ¿Usted siempre
ha sido evangélico o en algún momento se convirtió?
R. Nadie nace cristiano. Todos hemos
tenido un momento de conversión. Ya
que nacemos separados de Dios por
nuestros pecados, tiene que haber un
momento en que uno acepta el regalo
de la salvación por fe. En mi caso particular, yo nací en una familia cristiana, por lo tanto no me convertí de
otra religión. Pero sí me convertí de
mis pecados a Dios cuando me vi
como pecador delante de Dios y entendí el mensaje del evangelio. En mi
caso, ocurrió cuando tenía 8 años.
Sabía que era pecador y que no
podía hacer nada por mi cuenta para
borrar mis propios pecados delante
de Dios.
P. Se vio usted a los 8 años como
pecador, ¿cómo sucedió?
R. Fui a una reunión especial con mi
Tu religión en Alicante
“Una persona no
puede ganar el
favor de Dios por
participar en los
sacramentos de la
Iglesia”
familia y un hombre predicó un
pasaje de la Biblia. Yo sabía aquella
noche que yo jamás había confiado
realmente en Cristo como mi Salvador. Simplemente hacía lo que
pensaba que se esperaba de mí. Esa
noche confesé mis pecados a Dios y
puse mi fe en Cristo como mi
Salvador. Entiendo que esa noche
ocurrió un cambio espiritual en mi
condición delante de Dios.
P. ¿Podría explicarme entonces
cómo
es
la
conversión
evangélica?
R. Es un cambio espiritual. Realmente no hay ritos conectados.
Cuando una persona pone su fe en
Cristo, suele hacer una profesión
pública de su fe. Después suele
bautizarse. El bautismo simboliza la
muerte y resurrección de Jesús. Así
que cuando una persona se bautiza
da testimonio de haber recibido el
beneficio espiritual. Después de
conocer a Cristo por la fe, un nuevo
cristiano empieza a participar con el
resto de la iglesia.
P. ¿Qué diferencias existen entre
la religión Católica y la religión
Evangélica?
R. Nosotros creemos que la Iglesia
de Roma se ha desviado mucho del
cristianismo de la Biblia. La mayoría
de los evangélicos estaríamos de
acuerdo con Martín Lutero y la reforma protestante, en el sentido de
que la iglesia católica necesitaba una
reforma. Hay muchos evangélicos
que no se consideran protestantes
porque no son descendientes directos de los grupos de la reforma. Pero
estamos de acuerdo con el énfasis
de Lutero sobre la importancia de
“sola fide” (sólo las Escrituras forman la autoridad, no las tradiciones
de la iglesia). Esto es lo que nos distingue de la religión católica.
Creemos que las Escrituras son la
única regla de fe y práctica. Y lo más
importante, creemos que la salvación
es sólo por la fe. Una persona no
puede “ganar” el favor de Dios por
participar en los sacramentos de la
iglesia.
P. ¿Cómo convive la religión
Evangélica con otras religiones
como el Islam o el Judaísmo? ¿Y
con la Católica?
En mi opinión, convive aunque no colabora o participa directamente con
otras religiones. Personalmente me
gusta la posición de varias organizaciones católicas sobre el aborto, pero
no participamos con ellos como iglesia. Más bien, como ciudadano
puedo apoyar su iniciativa, pero creo
que nuestra iglesia no tiene ningún
papel político. Bíblicamente, entendemos que el único camino verdadero al Padre es por Jesús. Así
que, por muy sincero que sea, por
ejemplo, un musulmán, él no sigue el
mismo camino que nosotros. Por lo
tanto, no podemos participar con
ellos en temas espirituales.
P. Tengo entendido que existe un
día en el que la Iglesia Católica se
reúne con las otras religiones de
Alicante, ¿es eso el pluralismo religioso?
R. Hace años sabía que había una
iglesia evangélica que organizaba
reuniones con un sacerdote católico.
No sé si sigue así, pero yo personalmente no estoy muy convencido por
iniciativas así. Para mí el tema importante es la libertad de religión, que
significa que todos tenemos el derecho de llevar nuestra vida espiritual
según dicta nuestra conciencia. Pero
no entiendo cómo puede una persona que cree en la salvación sólo
por la fe en Cristo juntarse en comunión espiritual con otros que creen y
predican justo lo opuesto. Me puedo
juntar con personas que creen cosas
diferentes a lo que creo en muchos
asuntos “menores”, pero no si no
creen en el mensaje fundamental de
la Biblia.
P. Entonces, ¿podríamos hablar de
pluralismo religioso?
R. No suelo usar este término
mucho. Encontré esta definición en
Internet que dice que “el Pluralismo
religioso es un término usado para
referirse a la concepción de una
relación pacífica entre las diferentes
religiones”. Si es así, por supuesto.
Yo puedo tener amigos que son
ateos, católicos, judíos, etc. Yo siento
la necesidad de compartir con ellos
el mensaje del evangelio. Pero mi
deber no es convertir al mundo.
Nuestro deber es compartir el mensaje de Cristo e enfatizar la importancia, pero cada uno es responsable
por lo que hace con el evangelio. Así
que, no hay ninguna razón por la cual
no podamos vivir en paz con otras religiones, siempre y cuando respetamos los derechos de cada uno.
P. Hace unos días emitieron por
televisión un documental en el que
se decía que la Iglesia Católica
recibía del Estado unos 7.000 millones de euros al año, ¿las iglesias
evangélicas reciben alguna ayuda
o deben autofinanciarse?
R. Según mi experiencia, no. Puede
haber organizaciones evangélicas
que reciban una ayuda del Estado
para realizar determinadas obras sociales. El Estado ofrece a las iglesias
evangélicas que pertenecen a la
Federación de Entidades Religiosas
Evangélicas de España (FEREDE) la
exención de pagar impuestos como
el IBI. Pero por normal general, la
iglesias evangélicas están apoyadas
por las donaciones voluntarias de
sus miembros.
P. ¿A usted qué le parece que la
Iglesia Católica tenga estos privilegios y otros lugares de culto,
como el suyo, no?
R. Personalmente, opino que debe
haber una separación entre iglesia y
Estado. Creo que el Estado debe dar
los mismos derechos a todas las religiones.
P. ¿Entonces los partidos políticos
deberían mantenerse al margen en
los que se refiere a temas religiosos?
R. Al margen, definitivamente.
P. ¿Por qué?
R. Nuestro mandato no es convertir
el mundo. Debemos sujetarnos a las
autoridades terrenales. Así que,
nosotros como iglesia no tenemos
ningún mandato para mejorar la sociedad por medio de la política. La
iglesia debería ser a-política y los
políticos no deberían apoyar a una
religión en sí. Ahora, creo que cada
cristiano, como individuo debe hacer
todo lo que pueda para ejercer su influencia sobre la sociedad. Debemos
votar por los políticos que creemos
que son mejores y no hacemos mal
en pedir justicia y moralidad para
nuestra sociedad. Pero desde mi
punto de vista, esto no se hace como
una organización religiosa sino como
buenos ciudadanos. La postura tradicional de muchos evangélicos es la
separación entre iglesia y estado.