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Palabras del Obispo de Arecibo, Mons. Daniel Fernández Torres durante la
Marcha “Protejamos la inocencia de nuestros niños: No a la perspectiva de
géneros”
16 de febrero de 2015
San Juan, PR
Buenos días a todos.
Agradezco la oportunidad de poder dirigirme a ustedes en esta mañana sobre un
tema tan importante para la sociedad y reconozco la valentía de todos los que se
dieron cita hoy aquí para defender la dignidad de la familia y proteger la inocencia
de nuestra niñez.
La igual dignidad del hombre y la mujer es un hecho innegable para todos los
creyentes.
Dice el Catecismo: «Creando al hombre “varón y mujer”, Dios da la dignidad
personal de igual modo al hombre y a la mujer». “El hombre es una persona, y esto
se aplica en la misma medida al hombre y a la mujer, porque los dos fueron
creados a imagen y semejanza de un Dios personal”.1
Repudiamos todo tipo de violencia contra la mujer y reafirmamos la igual dignidad
de todos los seres humanos.
Sin embargo, la legítima lucha por la igualdad de todos no puede llevar a que se
imponga en nuestras escuelas públicas y privadas una ideología que presenta una
concepción del ser humano ajena a su naturaleza misma. Una ideología que,
subrayando “al máximo” “la dimensión estrictamente cultural” del ser hombre o
mujer, llamada género, lleva a oscurecer la dualidad natural de los sexos. Cuando
esta realidad natural se minimiza, y se convierte al ser humano en su propio
creador, entonces se cuestiona a la familia como realidad preestablecida por la
creación. Así, la ideología de la “perspectiva de género” lleva al cuestionamiento
de la familia compuesta por un padre y una madre, a la equiparación de la
homosexualidad a la heterosexualidad y a un modelo nuevo de sexualidad
polimorfa.2
1
Catecismo de la Iglesia Católica Núm. 2334 2
Joseph Card. Ratzinger. “Carta a los Obispos de La Iglesia Católica sobre la Colaboración del Hombre y la Mujer
en la Iglesia y el Mundo”. Congregación para la Doctrina de la Fe, el 31 de mayo de 2004.
2 Ante estos planteamientos, quisiera reiterar las palabras que expresé frente a este
mismo Capitolio el 18 de febrero de 2013:
“El ser hombre o ser mujer no es solamente un dato cultural, como ahora se quiere
afirmar con la ideología de la perspectiva de géneros, sino que es parte de lo que
somos e impregna cada célula de nuestro cuerpo. ... A pesar de que el ser humano
ha querido engañarse a sí mismo, queriendo ser su propio creador, aún no ha
podido sobrepasar la naturaleza misma de las cosas: cada célula de su cuerpo lleva
inscrito su sexo genético y para poder procrear una vida, no se puede prescindir de
la dualidad de la aportación genética femenina y de la masculina. Sólo de un
hombre y de una mujer puede nacer una nueva vida. Y se ha demostrado que esta
nueva vida necesita de la presencia de ambas figuras, paterna y materna, para el
desarrollo armónico de su personalidad.
Siendo así las cosas, la Iglesia no inventa la naturaleza sexuada del ser humano. La
Iglesia sólo reconoce la verdad misma, que es evidente para quienes aún no han
perdido la capacidad de ver las cosas que les muestra la naturaleza.
… Cuando se destruye la familia, cuando se ignora el derecho natural de todo niño
a tener un padre y una madre, cuando se confunden las conciencias de las futuras
generaciones enseñándoles que pueden ignorar su naturaleza sexuada como
varones o como féminas, se minan los cimientos de la piedra angular de la misma
sociedad.
Allí donde la libertad de hacer se convierte en libertad de hacerse por uno mismo,
se llega necesariamente a negar al Creador mismo y, con ello, también el ser
humano como criatura de Dios, como imagen de Dios, queda finalmente
degradado.3
Negar el fundamento biológico de la sexualidad entre el hombre y la mujer es
negar la naturaleza misma del ser humano.
Reiteramos que el derecho natural de los padres a ser los primeros educadores de
sus hijos según sus convicciones, no puede ser violentado por el estado
3
Cfr. Discurso del Papa Emérito Benedicto XVI a la Curia Romana con motivo de las
felicitaciones de Navidad, Sala Clementina, Viernes 21 de diciembre de 2012. En línea:
http://www.vatican.va/holy_father/benedict_xvi/speeches/2012/december/documents/hf_benxvi_spe_20121221_auguri-curia_sp.html
3 imponiendo esta ideología. Por eso, repudiamos la imposición de la ideología de la
perspectiva de género en nuestras escuelas y repudiamos cualquier otro intento de
introducir la ideología del género bajo cualquier otro nombre o concepto. No a la
“perspectiva de géneros”.