Download paciente en cama

Document related concepts
no text concepts found
Transcript
José David Vélez, Fisioterapeuta, docente y especialista en ortopedia y traumatología, nos cuenta
cuáles son las posturas correctas para movilizar a un paciente y cómo a través de ellas obtenemos
bienestar para nuestro cuerpo y el de nuestro ser querido:
Para cambiarlo de posición en la cama:
Pacientes con movilidad nula: debes ubicar las
extremidades del cuerpo del paciente según para
el lado que vayas a girarlo, por ejemplo, para
voltearlo para el lado derecho debes ponerle la
pierna izquierda sobre la derecha, luego la mano
derecha la debes acomodar en un ángulo de 90°
y la mano izquierda ubicarla sobre el abdomen
del paciente. Luego sitúa una de tus manos sobre
las rodillas del paciente, la otra en el hombro y
realiza el giro.
Paciente con movilidad reducida: lo que
debes hacer principalmente es pedirle o
ayudarle a que levante las rodillas, luego
tú desde la cadera lo giras.
En ambos tu posición debe ser con un pie más adelantado que el otro,
la rodilla flexionada y la columna recta para distribuir las fuerzas.
1/5
Para sentarlo en la cama cuando está acostado:
Pacientes con movilidad nula: mueve el paciente
a la orilla de la cama y ubícale las piernas por
fuera de esta, poniendo tus manos debajo de las
rodillas del paciente, el peso de las piernas te
ayudará a generar una atracción del cuerpo de él
hacia el tuyo. Luego lo debes coger por encima
de los hombros, con tus manos cerca al cuello de
tu ser querido para tener más control.
Paciente con movilidad reducida: pídele
a tu paciente que ubique las piernas por
fuera de la cama, cógelo de los hombros
o del tronco y a la cuenta de tres tráelo
hacia ti, él te ayudará con el impulso.
En ambos casos tu posición antes de levantar al paciente debe ser con una pierna adelante y la
otra atrás. Luego que lo levantes tus piernas quedarán alineadas.
Ten en cuenta que si se le has aplicado crema al paciente o ha sudado debes
limpiarle las zonas de contacto para tener mejor agarre y debes sentarlo derecho
para que se estabilice, ten cuidado que no se vaya de para atrás.
2/5
Para levantar al paciente (este movimiento comienza cuando el paciente esté sentado):
Pacientes con movilidad nula: este tipo de pacientes no los puedes levantar, como mínimo un
paciente debe tener conciencia y control en un pie y en troco para poder hacerlo. Cargarlo es
algo que tampoco debes hacer.
Paciente con movilidad reducida: si tu paciente tiene
caminador sitúa el aparato al frente de él, tú te ubicas a un
lado, normalmente al lado que él tenga más débil, y con
un pie bloqueas el caminador para que no se mueva, con
el otro pie puedes estimular la rodilla del paciente para
que haga el movimiento. Pídele a tu ser querido que
ponga las manos sobre el caminador y coloca tus manos
una en el caminador y la otra como abrazando al paciente,
a la voz de tres el paciente hace el impulso, tú lo
aprovechas para terminar de levantarlo desde el tronco.
Si no tienes caminador, ubícate al frente del paciente,
pídele que te abrace por la cintura o por el cuello y pon
tus manos en el tronco de él, debajo de las axilas. Tus
piernas deben estar una delante de la otra, la que está
adelante corresponde al lado débil del paciente, para
tener mayor estabilidad y bloquearle la rodilla y el tobillo
para que no se vaya a caer. Cuando hagas el movimiento
para levantarlo, mueve el paciente hacia ti a la cuenta de
tres y da un paso hacia atrás hasta que tengas el cuerpo
recto para estabilizar al paciente.
3/5
Para poner a caminar a un paciente
Pacientes con movilidad nula: recuerda que este tipo de pacientes no pueden realizar esta actividad.
Paciente con movilidad reducida: si tu paciente tiene un
lado con mayor tendencia a caerse debes darle soporte en
la espalda, por debajo de la axila, y sujetándolo de la
mano. Debes estar parado con un pie adelante y el otro
atrás, así si el paciente se va a caer tú tienes la fuerza para
sostenerlo y con la mano que tienes debajo de la axila,
puedes hacerle un gancho. Además, si tu paciente tiene
un pie débil, con tu rodilla, que está ubicada al lado de la
de él, puedes hacerle un estímulo para que dé el paso, si
es al contrario y el paso se le está yendo debes bloquearle
el pie ubicando tu pie por delante.
Si tu paciente tiene más estabilidad para caminar debes
cogerlo de los antebrazos, es decir, ubica tus brazos en un
ángulo de 90°, sujeta al paciente por debajo de los brazos
de él, cerca de los codos, tu ser querido te pone las manos
de él por encima de tus antebrazos y te sujeta. En esta
posición ellos sienten que tiene el control del movimiento.
4/5
Para acostarlo (este movimiento comienza cuando el paciente se encuentra de pie)
Pacientes con movilidad nula: recuerda que este tipo de pacientes no pueden pararse, entonces
esta actividad no se puede realizar con ellos.
Paciente con movilidad reducida: ubica al paciente
dando la espalda a la orilla de la cama y si se ayuda
con los pies pedirle que se siente, estando allí lo
tomas de los hombros y a la cuenta de tres le ayudas
un poco con tu impulso para acostarlo. Realmente
los pacientes son los que hacen el movimiento
gracias a la movilidad que tienen de las rodillas.
Si tu paciente no tiene tanta movilidad en las rodillas,
cuando esté sentado, ubica una mano por debajo de
las rodillas de él y otra por detrás del cuello, comienza
subiéndole los pies y el cuerpo va tomando la posición
hasta que lo acuestes en la cama. Debes estar parado
con las piernas separadas y las rodillas flexionadas
para distribuir mejor las cargas.
Estas recomendaciones para cuidar tu cuerpo te ayudarán a que tu capacidad física soporte la
exigencia de tu labor, sin embargo, también tienes que tener cuidado con tu salud emocional, las
preocupaciones pueden convertirse en sobrecarga muscular y fatiga. Dedícate tiempo y libérate
de las presiones.
Consulta con tu médico de confianza si tú y tu paciente pueden practicar
estas recomendaciones, recuerda que cada uno de nosotros tenemos
características diferentes.
5/5