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Tratamiento Integral
de Residuos Sólidos
Universidad Nacional
de Entre Ríos
(Nº ISBN 950.698.096.9.)
La problemática de los Residuos Urbanos,
de Residuos de Establecimientos de Salud
y el Medio Ambiente
Autor: Bioq. José Luis Favant
El
fundamentalismo
del
crecimiento
económico
y
la
industrialización como paradigma de la modernización y del progreso
económico nos ha llevado a un grado de contaminación avanzado,
producido por elementos peligrosos de origen diverso pero principalmente
de tipo industrial, doméstico y otros no menos vinculados; y que día a día
cobran cada vez más importancia como el de los residuos generados
como producto de los diferentes tipos de actividades y que llegan a varios
miles de toneladas por jornada en todo el mundo.
Comenzado el siglo XXI, permanece constante en nuestra
sociedad el problema de la contaminación del Medio Ambiente por este
motivo. Los cambios en éste afectan tanto a los seres humanos como al
resto de los seres vivos en general, aunque de diferente manera. De
acuerdo a la magnitud de éstos y su permanencia en el tiempo, puede
llevar desde el exterminio de muchas especies, como (así también) a la
aparición de nuevas, como es el caso de microorganismos, cuyas
consecuencias en muchas situaciones son impredecibles.
Problemática de múltiples caras
Tratar de desglosar la problemática de los residuos, es una tarea
poco sencilla por cierto, y podría verse tal vez
como un cuerpo con múltiples caras (complicado
como puede ser un icosaedro, observar la Figura
1), donde cada una representa solo una parte o un
punto de vista del problema total; dentro de los
diferentes componentes o caras no podemos dejar
de mencionar a: las Necesidades básicas de la
población (para quien la basura en el ámbito
domiciliario es un problema); los Laborales y de la
Producción (ciertos tipos de actividades
Fig 1 - Icosaedro
especiales que si bien tienen un impacto
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económico positivo para la comunidad, generan a menudo otro tipo de
problemas como por ejemplo residuos que necesitan tratamiento
especial); los Problemas Sociales de los estratos de menores
recursos (clásico problema del “cirujeo”, personas que por este medio
obtienen su sustento, contactos con sustancias tóxicas, etc.); las
Cuestiones Políticas (decisiones – correctas o incorrectas, oportunas o
inoportunas, etc. –, Vacíos legales e institucionales o no, correcta o
incorrecta distribución de recursos, grado de importancia o prioridad que
se le asigna a la problemática, asumir costos políticos, corrupción, etc.);
las Económicas (realidad económica de cada sociedad en particular,
asignación de fondos o no para resolver o paliar la problemática); las
Culturales (nivel de educación general (y) de la población y sus
dirigentes; las Legales (existencia de leyes adecuadas a la realidad de
cada comunidad, existencia de mecanismos de control y penales
eficientes de modo que las normas legales se cumplan, etc.); las de la
Justicia (jueces imparciales y objetivos o no, mecanismos efectivos que
sirvan a la defensa del medio ambiente); los Medios Técnicos y
Tecnológicos (Recursos Humanos con que se cuenta actualmente, la
necesidad o no de Formación de nuevos Recursos Humanos para estos
fines, Formación Continua de Recursos Humanos, adecuación de los
instrumentos tecnológicos a la realidad de la comunidad y sus recursos,
tecnología que no cree otros problemas nuevos al medio ambiente, etc.);
la Salud (de la población en general y de aquellas personas directas e
indirectamente relacionadas con su actividad laboral, de los pacientes que
asisten a los centros de Salud, etc.); y seguramente muchos otros que no
se han alcanzado a tener en cuenta. Además, debe tenerse en cuenta
que estos diferentes aspectos están a su vez relacionados entre sí en
forma dinámica.
Tipos de residuos
Como sea que fuere, la generación de [R] residuos o (B) basura en
último término, no es un problema de unos pocos, ni mucho menos, de un
solo tipo de actividad, nos abarca a todos en mayor o menor medida,
directa o indirectamente y ocasiona en definitiva un impacto ambiental
que por lo general nos afecta perjudicialmente y en distinto grado.
A este punto es necesario convenir que por residuo se entiende
(según documentos publicados por la Organización de Naciones Unidas)
a:
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Todo material que no tiene un valor de uso directo y que es
descartado por su propietario.
Como no todos los materiales que se descartan son de igual
composición, y teniendo en cuenta además que todos los seres humanos
cualquiera sea su edad o condición social están generando residuos
continuamente es necesario hacer una clasificación de los mismos de
acuerdo a sus propiedades o características, así por ejemplo tenemos que
los residuos que generamos en nuestras casas como producto de nuestras
actividades cotidianas se pueden definir como Residuos Comunes o de tipo
Domiciliario.
Por otra parte, los procesos industriales y algunos de otra naturaleza
generan una gama de residuos en fase sólida, líquida o gaseosa, con
características particulares, que presentan riesgos potenciales para la salud
humana y el ambiente. Este tipo de residuos se denominan peligrosos y
se los define en forma general como:
Aquellos que, en función de sus características de corrosividad,
reactividad, explosividad, toxicidad, inflamabilidad y patogenicidad
pueden presentar riesgos para la salud pública o causar efectos
adversos al medio ambiente.
Según documentos generados por la Organización Panamericana de
la Salud (OPS) los riesgos al medio ambiente y a la salud causados por los
Residuos Peligrosos ha generado preocupación a escala mundial, la que se
ha expresado en una legislación para controlarlos [2] [3] [4] [6]. Si bien esta
preocupación también existe en los países emergentes como el nuestro, la
mayoría de ellos no tiene una legislación adecuada para su control. Si bien
no es el objetivo
de este artículo
hacer un análisis
exhaustivo
del
tema
Residuos
Peligrosos
y
especialmente de
los
Hospitalarios
desde el punto de
vista legal, al final
del
mismo
se
hacen
breves
reseñas de las
Leyes Argentinas
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(Nacionales y especialmente de las Provincias de Entre Ríos, Santa Fe y
Buenos Aires) relacionadas directa o indirectamente con el tema.
Además de la Industria existen otros generadores que producen
residuos con una o más de las características mencionadas anteriormente,
como por ejemplo el caso particular de las Entidades de Salud, que por otra
parte se encuentran comúnmente dentro del ámbito urbano. Estas Entidades
producen Residuos que se denominan en forma general “Residuos
Hospitalarios”. Para aclarar la clasificación de los distintos tipos de Residuos
ver el Cuadro 1; vale la pena explicar que el esquema no guarda
proporciones con cantidades generadas.
Entonces es necesario generar algunas nociones sobre qué debe
entenderse por tal y sus diferencias con un residuo patogénico o
biopatogénico (definición, clasificación, generadores de residuos); y el
circuito o ruta posterior que deben seguir es decir: su pretratamiento,
recolección y transporte, tecnologías de tratamientos de residuos (métodos
de tratamiento de residuos patogénicos) y su disposición final.
Gestión Hospitalaria y residuos generados
El objetivo fundamental de una Entidad de Salud es el de proveer
cuidados a la población para curar, aliviar o rehabilitar el problema de salud
que motiva la consulta, consiguiendo el mejor resultado posible basado en
los conocimientos existentes y con la mejor satisfacción del paciente y del
personal que lo ha atendido. Esta misión sustenta, una filosofía de
excelencia en la gestión. La excelencia en las prestaciones sanitarias
implica también el entorno físico o edilicio donde se presta la asistencia a los
pacientes. Estos entornos están formados por tres componentes: planta
física, equipamiento y personal. [1]
Por lo tanto no debe descuidarse un continuo mantenimiento de las
instalaciones de la Entidad de Salud en óptimas condiciones, ya que es uno
de los factores esenciales que permiten garantizar la máxima calidad
asistencial de las prestaciones sanitarias. Y si bien, el ingreso a los
nosocomios tiene siempre una probabilidad (estimada entre el 5 y 10% en
países avanzados) de adquirir una infección durante el propio ingreso, esta
probabilidad quedará muy limitada proporcionalmente al grado de
organización y compromiso de profesionales y responsables de las
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instalaciones por reducirla, como así también del estado de conservación de
la planta física.
Por Residuos Hospitalarios, ha de entenderse como tales a la
totalidad de desechos generados en Establecimientos de Salud, como
consecuencia del funcionamiento de los mismos. Entre otros factores su
volumen resultante dependerá en gran medida de la cantidad de servicios
médicos ofrecidos en el establecimiento, del grado de complejidad de la
atención prestada, del tamaño del hospital y del número de camas que
cuente, de la proporción de los pacientes externos atendidos y de la dotación
de personal.
En general se entiende por Establecimiento de Salud a todo
Hospital, Sanatorio, Clínica, Policlínico, Centro Médico, Maternidad,
Geriátrico, Sala de primeros auxilios y todo otro tipo de establecimiento
donde se practique cualquiera de los niveles de atención de salud humana o
animal con fines de prevención, diagnóstico, tratamiento, rehabilitación, y de
investigación. Algunos autores incluyen en esta lista a aquellos servicios
tales como los Funerarios y otros relacionados. Estos Centros son
denominados por las Leyes vigentes como Generadores de Residuos
Patogénicos, y como tales están obligados a inscribirse en un Registro de
Generadores, según el ámbito en el que se encuentren comprendidos,
respondiendo según sea el caso a leyes Nacionales, Provinciales o
Municipales / Comunales.
Habrá en ellos entonces, residuos inocuos (o equivalentes a los
domiciliarios) residuos patogénicos y residuos contaminantes o denominados
también especiales. La primer clase de éstos Residuos, son los provenientes
por ejemplo de las áreas administrativas que son residuos inocuos (papeles,
restos de embalajes, etc.), como también lo pueden ser los generados en la
cocina del establecimiento.
Es necesario distinguir entre residuos hospitalarios y residuos
patogénicos. Los primeros como ya se dijo, son todos los que se generan en
un Establecimiento de Salud, dentro de los cuales se encuentran incluidos
entre otros a los patogénicos.
Por Patogénicos puede definirse como tales a todo elemento material
en estado sólido, semisólido, líquido o gaseoso que presenta características
de toxicidad y/o actividad biológica que puedan afectar directa o
indirectamente a los seres vivos y causar contaminación del suelo, el agua o
la atmósfera. Puede verse una clasificación de éstos en la Tabla 1 que se
encuentra más abajo. En las legislaciones tanto en el ámbito Nacional
Argentino como de sus Provincias, no se encuentra ninguna referencia a los
residuos patogénicos líquidos, ni se establece necesidad de su segregación
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y tratamiento. En este punto hay que destacar que muchos Generadores de
la Región Santa Fe – Paraná, de todos modos efectúan el tratamiento de
efluentes líquidos.
Profundizando un poco más en la temática, puede decirse que son
aquellos Elementos de Riesgo de Origen Biológico (EROB), que poseen la
característica de ser potencialmente infecciosos, la cual los hace
potencialmente capaces de provocar una enfermedad de origen infecciosa.
Así es que éstos (EROB) pueden llegar a contener tanto microorganismos
patógenos (como Bacterias, Hongos, Clamidias, Ricketsias, Virus, parásitos
uni y multicelulares, microorganismos genéticamente modificados); otros
seres vivos o parte[s] de ellos genéticamente modificados; o bien
simplemente moléculas (tales como aquellas procedentes de
manipulaciones de ácidos nucleicos o éstos sintetizados y ensamblados con
distintos fines como por ejemplo técnicas de biología molecular y de terapia
génica, priones) de modo que al hallarse en tal concentración y con
suficiente virulencia para que la exposición a uno o más de ellos por parte de
un hospedero que sea susceptible pueda derivar finalmente en una
enfermedad infecciosa.
Tabla 1 - Clasificación de Residuos Patogénicos (CDC; EPA; OPS):[15] [16]
1. Elementos corto – punzantes usados.
2. Materiales de diagnóstico y curación con restos de
sangre o fluidos corporales.
3. Sangre y fluidos corporales.
4. Restos orgánicos y/o de tejidos.
5. Equipos para perfundir soluciones.
6. Equipos para extraer o colectar fluidos.
7. Equipos y accesorios descartables.
8. Residuos químicos con actividad biológica.
9. Restos de comida y excretas de salas de
aislamiento.
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La tercer clase de Residuos Hospitalarios son los denominados Residuos
Especiales cuya característica de peligrosidad es la de ser contaminantes, como son
las sustancias químicas de laboratorios, radiología, o de talleres de mantenimiento. Los
medicamentos vencidos son residuos contaminantes químicos, como así también los
compuestos químicos de uso en los laboratorios; los residuos de áreas de
mantenimientos y talleres (aceites, grasas, pintura, adhesivos), lavado de vehículos,
etc., son residuos contaminantes con diversas características de peligrosidad. En esta
clase están incluidos los residuos Radiactivos. [4] [6] [7] [16]
Para mayor claridad ver el
Cuadro 2 siguiente, donde se
incluyen
los
rangos
de
porcentajes de producción de las
distintas subclases de Residuos
Hospitalarios.
El manejo inadecuado de
los
Residuos
Hospitalarios,
repercutirá a corto o largo plazo
sobre
la
salud
de
los
trabajadores, de los usuarios del
hospital, visitantes y también de
toda la población y el medio
ambiente, creándose un círculo
vicioso
de
enfermedades
derivadas del mismo.
Debido a que tradicionalmente la prioridad de un centro de salud ha sido la
atención al paciente, se ha restado importancia a los problemas ambientales que
podría causar, creándose en muchos casos un círculo vicioso de enfermedades
derivadas del mal manejo de los residuos. Las consecuencias de estos impactos no
sólo afectan la salud humana sino al medio ambiente; a lo cual se suma el deterioro
estético del paisaje natural y de los centros urbanos. El grupo más expuesto al riesgo
que presentan los residuos infecciosos de las entidades de salud son los trabajadores
de los establecimientos de salud, especialmente los enfermeros y el personal de
limpieza, seguido de los trabajadores que manipulan los desechos fuera del hospital.
Por dicha razón es recomendado al nivel de organismos internacionales el
efectuar una correcta segregación, almacenamiento, pretratamiento, recolección,
transporte y disposición final. La legislación vigente [5] [8] [9] [10] [11] [12] [13] [14],
contempla la mayoría de estos pasos. No esta demás aclarar la importancia del primer
paso que es la segregación o separación de los EROB de los demás, ya que si se
mezclaran se estaría incrementando la masa
de Residuos Patogénicos,
incrementando también los costos de operación.
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La segregación, almacenamiento y pretratamiento corre por cuenta de la
entidad de salud, quienes, recordemos deben estar inscriptos en un Registro Nacional
de Generadores. La recolección y transporte de los residuos patogénicos, corre por
cuenta de transportes especiales para este tipo de operación, cuyas características y
especificaciones están definidas y acotadas en leyes nacionales y provinciales. Por
último el operador, que es quien por algún medio, usualmente de tipo físico (de los
cuales el comúnmente utilizado en nuestro país es la incineración), es el que se
encarga del tratamiento y disposición final de los residuos patogénicos, quien también
debe estar inscripto en un registro como prestador de este servicio, a los fines de ser
controlado por los organismos pertinentes. Una misma empresa puede efectuar ambos
servicios, de transporte y como operador. Existen otros detalles, como de controles,
responsabilidades, penalidades, etc., que no vamos a tratar en este artículo.
En cuanto al componente humano, que como ya fue analizado no está ajeno al
problema sino que forma parte de él, está contemplado sus derechos y obligaciones
(tanto para el empleado como para el empleador), en la ley Nacional 19.587 /1979
(B.O. 3/5/79) de Higiene y Seguridad en el Trabajo; y en la ley de Riesgos de Trabajo
donde habla sobre la capacitación obligatoria y especifica del personal (en CAPITULO
IX /ARTICULO 31º / inc. 2 y 3). [10] [13]
Conclusiones
En definitiva, el fenómeno del deterioro del medio ambiente está relacionado
íntimamente con el ser humano por los efectos indirectos de su actividad económica,
que lleva a una excesiva producción de residuos degradando el medio ambiente; y a su
vez éste sufre los efectos adversos ocasionados por él mismo, estando mucho más
agudizado este fenómeno en las ciudades.
Un caso particular de residuo es aquel que se produce en el ambiente de salud
(paradójicamente), donde una de sus variantes más peligrosa (para los trabajadores,
pacientes, público en general y medio ambiente) son los de tipo patogénico. Es
conveniente que el residuo patogénico cumpla un ciclo de generación, segregación,
recolección, transporte, tratamiento y destino final adecuado, en un espacio físico
apropiado, dentro de una organización con directivos, administrativos y profesionales
comprometidos en dicha labor, con controles tanto internos como externos de los
establecimientos de salud y con recursos humanos en formación constante y continua,
esto último es muy importante, porque el entrenamiento y capacitación del personal
sirve a los fines de proteger su propia salud, en función individual, grupal y social. De
esto no puede escapar el compromiso de la clase política y de la sociedad, quienes
finalmente serán los que darán el apoyo económico y el consenso para permitir una
mejor calidad de vida.
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Referencias bibliográficas
1. Astier P., Gost J., Redín J.M., Manrique A., et al; Programa de minimización de riesgos biológicos
asociados a la infraestructura hospitalaria (1999) Anales del Sistema Sanitario de Navarra.
2. Benavides, Livia y Rincones, María (1990). Memoria de la Primera Reunión del Núcleo Técnico en
Manejo de Residuos Peligrosos. CEPIS, Lima.
3. Cantanhede, Alvaro. Composición de los residuos de los servicios de salud y los riesgos a la salud
de los trabajadores, pacientes, medio ambiente y recursos naturales. En: Encontro de Especialistas
em Tratamento e Destino Final de Residuos de Serviços de Saúde, 1997
4. CEPIS. Guía para el manejo interno de residuos sólidos en centros de atención de salud. 2.ed. Lima:
CEPIS; 1996.
5. El Decreto 403/97 de la Provincia de Buenos Aires, viene a modificar parcialmente y a actualizar el
Decreto 450/94 reglamentario de la ley 11347, que regula la gestión de los residuos patogénicos. A
este ordenamiento se suma lo dispuesto al mismo respecto por la ley nacional 24051; y la
Resolución 349/94 del Ministerio de Salud.
6. Ing. Gladys Monge. (1997) Manejo de Residuos en Centros de Atención de Salud. CEPIS / OPS
Najar, Laura E.; Funes, Laura C.; García, Antonio A.; Muñoz, Cristian E.; et al (1998). Desechos
patológicos - UTN - Fac. Regional San Rafael- Mendoza- Argentina
7. Kopytynski, W (1997). Residuos hospitalarios: cómo preservar el medio ambiente. SIM.
8. Ley de la Pcia. de Entre Ríos Nº 8880 / Noviembre de 1994 (Adhesión a la Ley Nacional 24051) y
Decreto Reglamentario 6009/00.
9. Ley de la Pcia. de Santa Fe Nº 6009/00 y 1.847/97; Decretos Reglamentarios Nº 388/00
1.758/00.
10. Ley Nacional 19.587 y Anexos, febrero de 1979; y decreto Reglamentario 351/79 (B.O. 3/5/79) de
Higiene y Seguridad en el Trabajo.
11. Ley Nacional Argentina 24.051; Residuos Peligrosos y sus Anexos publicada en el Boletín Oficial el
17/1/91 y reglamentada por el Decreto Reglamentario 831/93 (B.O. 3/5/93) con Tablas y Anexos.
12. Ley 11347 y Decreto Reglamentario 450/94; Normas Legales sobre Residuos Patogénicos de la
Pcia. de Buenos Aires.
13. Ley Nacional Nº 24.557(13/9/95) Sobre Riesgos del Trabajo; Promulgada: Octubre 3 de 1995; (B.O.
13/9/95).
14. Ley Nº 11.720 de Residuos Especiales, y su Decreto Reglamentario 806/97 de la Pcia. de Buenos
Aires
15. Monreal, J.; Zepeda Porras, F. Consideraciones sobre el manejo de residuos de hospitales en
América Latina. Washington,D.C :OPS; 1991.
16. Organización Mundial de la Salud. Manejo de desechos médicos en países en desarrollo. Informe
de consultoría. Ginebra: OMS; 1992.
Prof. Bioqco José Luis Favant
Prof. Adjunto Cátedra de Seguridad
Biológica y Radiológica
Carrera de Bioingeniería
Facultad de Ingeniería
Universidad Nacional de Entre Ríos
CC 47 – Suc. 3 – (3100) Paraná - Entre Ríos
[email protected]
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