Download Tratamiento del insomnio debido a las alteraciones de los ritmos

Document related concepts
no text concepts found
Transcript
Tratamiento del insomnio
debido a las alteraciones de los
ritmos circadianos (correturnos)
Consideraciones sobre el tratamiento
>> Dr. Eduard Estivill
Director de la Clínica del Sueño Estivill
del Instituto Universitario Dexeus
y Coordinador de la Unidad del sueño
del Hospital General de Catalunya
Las personas que han de trabajar siguiendo unos cambios de turno frecuentes presentan
dificultades en adaptarse a los horarios que les imponen. Habitualmente se quejan
de problemas gastrointestinales, vida social y familiar empobrecida, mala calidad del
sueño, excesiva somnolencia diurna y fatiga persistente. Produce problemas cardiacos y
frecuentemente problemas psicológicos (cambios en el estado de animo, irritabilidad, abuso
del alcohol, cafeína o hipnóticos). Los turnos de trabajo siempre son una fuente de estrés
personal y familiar. El insomnio puede ser la consecuencia de desordenes de los ritmos
circadianos o la causa primaria de ellos. Las personas insomnes entran frecuentemente en
un circulo vicioso donde las alteraciones en los horarios y la privación de sueño agravan
unos pobres hábitos de sueño, siendo difícil para los insomnes dejar el círculo sin la ayuda
de un especialista en trastornos del sueño.
bip
34
T RI BUNA MÉ D I C A
Es importante conseguir que los pacientes aprendan a manejar sus problemas de sueño, siguiendo una medidas higiénicas,
reajustando las alteraciones de los horarios, empleando algunas
técnicas conductuales, como control de estímulos.
El insomnio y la mayoría de las alteraciones en los ritmos circadianos comparten el hecho de producir privación de sueño y
una pobre calidad de éste, causando un impacto negativo en
el tiempo de vigilia del paciente. En su vida social, perturban
familia y relaciones sociales, dañando las actividades sociales.
En cuanto a la producción económica reducen la eficiencia en
el trabajo e incrementan el absentismo y los errores laborales.
En la salud del paciente, produce fatiga, irregularidades menstruales, además de gastrointestinales (cardialgia e indigestión) y problemas cardiovasculares (tensión alta de la sangre),
potencia el abuso de alcohol y somníferos y eleva el riesgo de
accidentes de trabajo y de tráfico. El insomnio y falta de sueño
conlleva también irritabilidad, ansiedad y depresión.
En cuanto a los trabajadores a turnos es importante considerar
que los insomnes encontrarán mucho más difícil alcanzar la suficiente cantidad y cualidad de sueño, debido a sus pobres hábitos de sueño que se añadirán a la desincronización de su sueño
con sus ritmos circadianos internos, al ambiente más ruidoso,
a las demandas laborales y familiares. Además las personas
insomnes debido a las alteraciones en los ritmos circadianos, es
más fácil que desarrollen respuestas condicionadas inadecuadas al entorno de su sueño.
Se ha estudiado una alta variabilidad interindividual en la tolerancia a corto o largo plazo en los cambios de turno de los ritmos
circadianos. Se incluyen factores individuales, requerimientos
sociales y laborales: edad (los trabajadores de más edad
encuentran más dificultades en adaptarse), rigidez o flexibilidad
en sus hábitos de sueño, habilidad para superar el mareo, cronotipo diurno/nocturno (mejores para el turno de noche) actitud
y motivación.
Recomendaciones generales:
La clave de las recomendaciones y estrategias para mejorar los
problemas de las alteraciones circadianas debidos a trabajo a
turnos o jetlag es hacer del sueño prioridad. Las vías más útiles
dependen del individuo y de sus circunstancias: optimización del
entorno donde se duerme, evitar sustancias tales como cafeína
y alcohol antes de dormir, cambios en los horarios de trabajo,
estrategias de sueño y siestas, estimulación mediante luz en el
momento apropiado, medicación adecuada, actividad física o
dieta y el proceder del paciente son los comportamientos señalados para neutralizar la desincronización circadiana, trastornos
del sueño y sociales. Proponemos las siguientes recomendaciones generales:
El insomnio produce fatiga,
irregularidades menstruales,
además de gastrointestinales
(cardialgia e indigestión) y
problemas cardiovasculares
(tensión alta de la sangre), potencia
el abuso de alcohol y somníferos
y eleva el riesgo de accidentes de
trabajo y de tráfico. El insomnio y
falta de sueño conlleva también
irritabilidad , ansiedad y depresión.
- Establecer y seguir un ritual relajante antes de ir a dormir.
- Hacer ejercicio regularmente. Limitar el ejercicio intenso a primera hora del día (al menos a seis horas antes dormir). Ejercicio suave, estiramientos o andar, deben realizarse cuatro horas
antes de dormir.
- Levantarse a la misma hora cada día siempre que sea posible.
- Ir a la cama cuando se tenga sueño.
- Mantener horarios regulares: en comidas, en las medicaciones
y otras actividades.
35
bip
Hacer ejercicio regularmente. Limitar el ejercicio
intenso a primera hora del día (al menos a
seis horas antes dormir). Ejercicio suave,
estiramientos o andar, deben realizarse cuatro
horas antes de dormir.
- Evitar la cafeína en las seis horas precedentes al sueño. No
beber alcohol, especialmente si está somnoliento. Evitar fumar
cuando se acerque la hora de acostarse.
- Si encuentra que la siesta le ayuda, intente hacerla cada
día a la misma hora. Intentar dormir durante un ciclo de
sueño (1.5 h.)
- Usar somníferos sólo moderadamente y durante no más de 3
semanas, siempre recetados y controlados por su médico.
ción rápida del turno de trabajo debería estar sujeta a consideraciones biológicas, sociales y de seguridad.
- Son ideales los horarios de trabajo que permitan a los empleados dormir fuera de servicio y estar alerta cuando se precise.
- Son beneficiosos los cambios en los horarios de trabajo que
adecuen el ritmo circadiano rotando en el sentido de las agujas
del reloj.
- Descansos durante las horas de trabajo (breves períodos )
pueden mejorar la alerta.
Recomendaciones específicas y
técnicas propuestas para el trabajador
correturnos.
- El lugar de trabajo debería ser fresco (mejor que cálido) y claro
para favorecer la alerta.
B. Horarios de sueño.
A. Horarios de trabajo:
- Con respecto a cuan rápido se deben realizar los turnos, la
recomendación de prolongada o permanente versus la rota-
bip
36
- Los trabajadores que siempre trabajan de noche deben mantener una estructura regular de sueño los siete días de la semana,
incluso los días en que no trabajan.
T RI BUNA MÉ D I C A
El hacer la siesta beneficiará
temporalmente a los
trabajadores a turnos tanto
sus problemas de sueño como
de rendimiento asociado a sus
horarios. Un empleado de tarde
o noche puede hacer una siesta
para estar más despejado al
empezar el trabajo.
desconectar el timbre de la puerta o poner en le puerta un “no
molesten” para evitar ruidos molestos.
- Comer ligeramente antes de la hora de dormir. No hay que ir a
la cama con sensación de hambre pero tampoco demasiado
lleno.
- Una buena higiene de sueño requiere que se use la habitación
sólo para dormir y para actividad sexual, manteniendo la temperatura fresca y confortable, hay que relajarse antes de dormir
y mantener una rutina regular antes de acostarse.
D. En el lugar de trabajo.
- Los trabajadores a turnos que siguen la rotación de las agujas
del reloj, deben atrasar de una a dos horas la hora de acostarse
y levantarse en los últimos días del turno.
- Una dieta de 3.0. carbohidratos/proteína ratio podría dar el
optimo equilibrio entre humor y rendimiento durante el turno
de noche.
- Las ventajas que puedan ganarse siguiendo estas técnicas de
horarios de sueño pueden perderse si volvemos a los horarios
normales día/noche en los días festivos.
- No hay que dejar las tareas más monótonas y aburridas para el
final del turno laboral.
- Después de salir del trabajo hay que acostarse lo más pronto
posible.
- El intercambio de ideas con los compañeros de trabajo ayuda a
afrontar los problemas derivados de los trabajos rotatorios.
- Mejorará la calidad de sueño del trabajador a turnos cuando
coincidan algunas de sus horas de sueño con el horario
normal.
- El hacer la siesta beneficiará temporalmente a los trabajadores
a turnos tanto sus problemas de sueño como de rendimiento
asociado a sus horarios. No obstante las siestas no son en
ningún caso un sustituto de los horarios regulares de un sueño
adecuado. Un empleado de tarde o noche puede hacer una
siesta para estar más despejado al empezar el trabajo. Hacer
siesta en el mismo puesto de trabajo es especialmente efectivo
para los trabajadores que necesitan mantener un alto grado de
alerta y atención en su trabajo y que deban tomar decisiones
rápidas. Cuando el empleado trabaja a doble turno ó durante
24 horas las siestas en el trabajo son incluso más necesarias
y beneficiosas.
- Pedir ayuda a familiares y amigos para crear un lugar tranquilo
durante las horas de sueño. Hay que explicarles la importancia
de su sueño e informarles sobre los cambios de turno que le
pueden ayudar.
- Reorganizar los horarios de los empleados a turnos para poder
tener tiempo para familiares y amigos.
- Cuanto mejor esté adaptado el individuo mejor será su sueño,
teniendo en cuenta que los trabajadores nocturnos tienden a
preferir dormir una vez al día, mientras que los trabajadores a
turnos rotatorios prefieren dormir dos veces en el mismo día.
C. Higiene de sueño.
- La cantidad y calidad de sueño puede mejorarse usando: un
antifaz para proteger los ojos, gruesas cortinas para mantener
la habitación totalmente a oscuras, tapones para los oídos;
ruidos de fondo: alfombras gruesas, contestador automático,
37
bip
Programa domiciliario
de ejercicios
en la rehabilitación
de la rodilla patológica
bip
38
TR IB U NA M É D ICA
El Dr. Miguel Ángel Lorenzo, especialista en rehabilitación
de la dirección médica de Contingencias Profesionales de Ibermutuamur,
propone en este nuevo artículo un programa terapéutico de ejercicios
que, sin necesidad de contar con un equipamiento específico,
permiten recuperar un adecuado nivel de fuerza muscular en la extremidad
inferior, tras sufrir una lesión de rodilla o después de haber
sido intervenido quirúrgicamente de ella.
Tras una lesión localizada en la rodilla o después de
haber sido intervenido quirúrgicamente de ella (independientemente del motivo que ha conducido a dicha intervención),
resulta fundamental recuperar un adecuado nivel de fuerza
muscular en la extremidad inferior, que permita al paciente un
retorno precoz y seguro a sus actividades previas, ya sean
éstas deportivas o laborales.
Comenzar un programa específico de potenciación muscular
es relativamente fácil sí uno tiene acceso a un centro específico de tratamiento, o dispone en su domicilio del equipo
necesario para tal fin. Sin embargo, el problema surge cuando
uno no tiene acceso a ese equipo, y se le plantea la duda de
comprarlo o bien de apuntarse a un centro de tratamiento físico, situaciones ambas que frecuentemente llevan asociado
un desembolso económico elevado.
Con un poco de creatividad, se puede elaborar un programa
terapéutico de ejercicios (Ejercicios 1 a 8) sin la necesidad de
contar con un equipamiento específico, siempre y cuando se
respeten los siguientes puntos:
- Los objetivos de un programa completo de rehabilitación
para la rodilla son recuperar un nivel normal de fuerza muscular, resistencia, flexibilidad, agilidad y equilibrio.
- No todos los ejercicios son adecuados para las diferentes
patologías que pueden asentar en la rodilla, por lo que es
preciso seguir las indicaciones de su médico respecto a qué
actividades o gestos posturales deben ser evitados.
- Los ejercicios que causen dolor durante o tras la sesión de
tratamiento, deben ser suspendidos, consultando con su
médico prescriptor la idoneidad de los mismos.
Con un poco de
creatividad, se puede
elaborar un programa
terapéutico
de ejercicios sin la
necesidad de contar
con un equipamiento
específico
- Lo ideal es realizar los ejercicios a diario, lo que sin duda
alguna le permitirá mejorar de forma progresiva su nivel funcional.
- Debe comenzar el programa de ejercicios de forma conservadora, es decir, realizando una serie de 8-10 repeticiones
de cada uno de ellos. A medida que mejore el nivel muscular
de su rodilla, debe incrementar el número de series de cada
ejercicio, intercalando periodos de descanso entre ellas que
pueden oscilar entre 1 y 3 minutos. Sí sigue mejorando su
nivel funcional, puede incrementar el número de repeticiones
de cada serie o acortar el tiempo de descanso entre ellas.
- Puede resultarle de utilidad el diseño de un sistema en el que
pueda recoger sus progresos, lo que sin duda le servirá de
estímulo en la consecución de sus diferentes objetivos.
Entre los ejercicios que podemos considerar útiles para
alcanzar un nivel de fuerza muscular elevado para una rodilla
debilitada como consecuencia de un determinado proceso
patológico, podemos describir los siguientes:
39
bip
Ejercicio 1 - De pie con la espalda apoyada en la pared, las
plantas de los pies en el suelo y los pies paralelos y separados
unos centímetros de la pared. Desde esta posición, descienda lentamente mientras mantiene un contacto permanente
con la pared, flexionando las caderas y las rodillas hasta una
posición cercana a los 90º de flexión. Mantenga la posición
máxima tolerada durante unos segundos y lentamente vuelva
a la posición inicial.
Lo ideal es realizar los
ejercicios a diario, lo que
sin duda alguna permitirá
mejorar de forma progresiva
el nivel funcional.
Ejercicio 3 - Apoye el pie del lado sano sobre un escalón
situado detrás de Usted y flexione la rodilla lesionada hasta
un ángulo cercano a los 90º; desde esta posición, extienda
lentamente la rodilla mientras mantiene la planta del pie completamente apoyada en el suelo y el pie del lado sano apoyado
en el escalón. Vuelva lentamente a la posición inicial y repita el
movimiento con la pierna contraria.
EJERCICIO 1
Ejercicio 2 - De pie junto a un tramo de escaleras, con la
pierna lesionada más cercana a los escalones. Desde esta
posición suba lateralmente el primer escalón con la pierna
afectada mientras despega ligeramente el pie contrario del
suelo, y realice una extensión completa de la rodilla. Lentamente vuelva a la posición inicial y repita el movimiento con
la pierna sana.
EJERCICIO 3
Ejercicio 4 - Arrodillado en el suelo sobre una toalla o colchoneta fina, inclínese lentamente hacia atrás sin arquear la
espalda, al mismo tiempo que mantiene la musculatura abdominal tensa. Mantenga la máxima posición tolerada durante
unos segundos y lentamente vuelva a la posición de partida.
EJERCICIO 2
EJERCICIO 4
bip
40
TR IB U NA M É D ICA
Ejercicio 5 - Arrodillado en el suelo, con la punta de los pies
bajo alguna estructura fija que le sirva de sujeción. Desde
esta posición, inclínese lentamente hacia delante sin arquear
la región lumbar. Mantenga la máxima posición alcanzada
durante unos segundos y lentamente vuelva a la posición de
partida.
Ejercicio 7 - De pie en el suelo, lleve la pierna lesionada hacia un lado como sí fuera a dar un paso lateral
más largo de lo normal. Doble progresivamente la rodilla lesionada hasta alcanzar un ángulo cercano a los
90º con la planta del pie apoyada en el suelo, mientras
mantiene la rodilla sana completamente extendida y
con el pie en contacto con el suelo. Vuelva lentamente
a la posición de partida y repita el movimiento con la
pierna contraria.
EJERCICIO 5
La realización de los ejercicios
debe complementarse
adecuadamente con el
mantenimiento de un nivel
elevado de actividad física
EJERCICIO 7
Ejercicio 8 - De pie en el suelo con los pies juntos y
a un lado de una línea trazada en el suelo (puede usar
cualquier objeto que asemeje una línea recta); desde
esta posición y sin separar los pies, salte por encima
de la línea hasta el lado contrario y posteriormente
repita el movimiento hasta la posición inicial.
Ejercicio 6 - De pie en el suelo, lleve la pierna afectada hacia
delante como sí fuera a dar un paso más largo de lo normal.
Doble la rodilla lesionada hasta un ángulo cercano a los 90º,
sin despegar la planta del pie del suelo, y flexione lentamente
la pierna sana en un intento por acercarla lo más posible al
suelo. Vuelva a la posición de partida y repita el movimiento
con la pierna contraria.
EJERCICIO 8
EJERCICIO 6
La realización de éstos u otros ejercicios similares de
una forma regular, respetando siempre las recomendaciones previamente recogidas, debe complementarse
adecuadamente con el mantenimiento de un nivel elevado de actividad física, apoyado básicamente en el
ejercicio aeróbico en cualquiera de sus formas de aplicación (deambulación, bicicleta, natación, etc.).
41
bip
LAS VARICES Y
SU TRATAMIENTO
El artículo de la Dra. Ofelia Carrión,
Angióloga de Ibermutuamur, nos
acerca, desde una perspectiva
médica, a la Insuficiencia Venosa
Crónica y su manifestación clínica
más frecuente como son las
varices en los miembros inferiores.
Tras la exposición de la patología
varicosa en líneas generales, es
imprescindible resaltar que el
abordaje terapéutico debe ser
“individualizado” en cada paciente
y llevado a cabo siempre por
especialistas.
bip
42
TR IB U NA M É D ICA
¿Qué son las varices?
Las varices son dilataciones permanentes y patológicas de
las venas superficiales. Las más habituales son las de los
miembros inferiores que constituyen sin duda, la manifestación clínica más frecuente de un gran síndrome conocido
como Insuficiencia Venosa Crónica (I.V.C.).
La Insuficiencia Venosa Crónica se define como el conjunto
de alteraciones del sistema venoso periférico que reduce o
dificulta el retorno hacia el corazón. Su origen se relaciona
con la evolución del hombre tras adoptar el “Homo Sapiens”
la posición erecta, siendo objeto de múltiples estudios tal y
como se demuestra en los tratados quirúrgicos de la Antigua
Grecia y Egipto.
Se considera la insuficiencia venosa crónica como la más
frecuente de las enfermedades crónicas, con una prevalencia
superior en países industrializados.
En España, en estudios epidemiológicos bien controlados, la
prevalencia es de un 30% a un 40%. El trastorno afecta más
a las mujeres que a los hombres.
existen alteraciones inmuno-histo-químicas en las capas que
forman la pared venosa que justificarían una anomalía en su
arquitectura pudiendo ser otra de las causas de la IVC
En Hawai, en el año 1994, con ánimo de unificar criterios
etiopatogénicos, se llegó a emitir un Consenso Internacional
de clasificación de las enfermedades venosas crónicas en las
extremidades inferiores donde se dividió la I.V.C. atendiendo
a factores congénitos, factores primarios y factores secundarios:
• Factores congénitos: Entre ellos se incluyen las angiodisplasias ( Síndrome de Klippel-Trenaunay), las fístulas
arteriovenosas, las agenesias valvulares, las enfermedades
del tejido conectivo etc
• Factores primarios o idiopáticos divididos a su vez
en factores no modificables entre los que se encuentran la
edad, el sexo y el grupo étnico y factores modificables como
los hormonales, la obesidad, el sedentarismo y ortostatismo, la exposición al calor, los embarazos, las relaciones
sexuales y las compresiones locales o selectivas.
• Factores secundarios: En algunos casos la aparición
de las varices es secundaria a una causa previa conocida,
por ejemplo una trombosis venosa profunda, una compresión extrínseca (tumores, hernias, adenopatías etc.), una
lesión postraumática, una yatrogenia, etc.
Etiopatogenia
A lo largo de la historia se han desarrollado diversas teorías
para explicar la causa de la Insuficiencia Venosa Crónica, pero
hasta el momento ninguna de ellas ha sido capaz de justificar
totalmente la aparición de sus síntomas, el por qué aparecen
las varices.
Clásicamente se ha planteado que las venas varicosas se
desarrollan por aumento de la presión venosa secundaria a
la incompetencia valvular primaria, es decir, por el deficiente
funcionamiento de las válvulas venosas; teoría que por sí sola
no explica la aparición de las varices.
La debilidad de la pared venosa ha sido la principal teoría
alternativa a la de la incompetencia valvular primaria, de hecho
Puede decirse que junto a estos factores, considerados predisponentes o desencadenantes, existen básicamente dos
mecanismos fisiopatológicos que participan en la aparición
de la Insuficiencia Venosa Crónica:
• Alteraciones en la arquitectura de la pared venosa derivadas de anomalías en el tejido conjuntivo.
• El aumento de la presión en el interior del vaso o “Hiperpresión venosa”.
Estos mecanismos pueden participar unidos o independientes, siendo la causa directa de los síntomas más relevantes
de la Insuficiencia Venosa Crónica que son las dilataciones
venosas o varices y la estasia venosa o pesadez.
43
bip
Tipos de varices
Se observan diferentes tipos de dilataciones venosas en función de la naturaleza y gravedad de la enfermedad:
• Las telangiectasias son dilataciones patológicas de los
vasos más superficiales de la piel, a menudo, vénulas del
plexo subpapilar, muy frecuentes en la mujer, con gran
componente hormonal cuya importancia clínica deriva de
la preocupación estética de la paciente.
• Las varices reticulares, que se definen como venas subdérmicas dilatadas, de mayor diámetro que las telangiectasias y que pueden cursar con síntomas derivados de la
estasia venosa.
• Las varices tronculares corresponden a las grandes dilataciones venosas palpables, localizadas en los trayectos de
las venas safenas.
• Existen además, dilataciones venosas de distribución atípica y sin relación con las venas safenas, localizadas en la cara
posterior de muslos, cara lateroexterna de toda la extremidad y hueco poplíteo. Estas varices están relacionadas con
la existencia de dilataciones venosas a nivel pélvico
• Edema. Es un signo funcional que se acompaña de sensación de hinchazón y trastornos tróficos. Al igual que con
el dolor, es necesario descartar previamente otras causas
del edema.
• Cambios tróficos cutáneos (eczemas, hiperpigmentaciones, hipodermitis esclerosa atrofia blanca.
Tratamiento
No se puede decir que exista un único método de tratamiento
para las varices.
Es preciso tener en cuenta unos parámetros tales como la
edad, el grado de severidad de las varices, la localización, el
componente estético, los síntomas, etc., es decir, una serie
de factores que permitan “individualizar” cada caso y poner
en marcha el tratamiento más indicado.
Cualquier tipo de medida
terapéutica debe estar indicada
por especialistas, y siempre
dentro de un marco sanitario
El tratamiento preventivo, rehabilitador y farmacológico debe ubicarse dentro de la terapéutica general y estará
orientado en dos sentidos:
• Corregir los síntomas referidos por el paciente.
• Evitar la progresión de la enfermedad.
Dada la naturaleza multifactorial y crónica de las varices, es
imprescindible actuar sobre todos aquellos factores desencadenantes, intentando controlar su desarrollo. Es esencial la
educación del paciente.
Síntomas y signos clínicos
Los síntomas pueden ser muy variados, pero tienen características comunes condicionadas por la estasia venosa
(hiperpresión venosa); aparecen generalmente con la
bipedestación y se hacen más acusados a lo largo del día,
aumentan en épocas calurosas, en periodo premenstrual y
con los embarazos. Por el contrario, mejoran con el decúbito
y la deambulación.
Las pequeñas dilataciones venosas conocidas como arañas vasculares o telangiectasias y ciertas varículas que no
dependen directamente del sistema venoso superficial (ejes
safenos) y además éste sistema no está afectado, pueden
tratarse mediante “escleroterapia”.
Si la enfermedad varicosa afecta al sistema principal superficial con insuficiencia valvular de los ejes safenos, el tratamiento más eficaz es el “quirúrgico”.
Los síntomas más frecuentes son:
• Pesadez y cansancio en miembros inferiores.
Tratamiento preventivo, rehabilitador y
farmacológico
• Dolor. Requiere descartar otras causas de dolor.
Recomendaciones:
• Sensación de opresión, tensión o punzada.
• Soporte elástico ( medias de compresión elástica, vendaje
compresivo). Este principio terapéutico representa una de las
medidas más eficaces en el control de las varices.
• Calambres, parestesias.
bip
44
TR IB U NA M É D ICA
• Ejercicio físico. Caminar a paso rápido es la actividad física
más beneficiosa para el paciente con varices.
• Masaje manual e hidroterapia. El masaje manual aplicado
sobre la planta de los pies y progresivamente ascendente
sobre toda la extremidad inferior, tiene un efecto beneficioso sobre la red venosa, favoreciendo el retorno venoso.
La hidroterapia tiene una acción benéfica debida al efecto
tonificante que ejerce el agua templada o fría sobre la
pared venosa y la musculatura.
Tratamiento quirúrgico
Antes de emprender un tratamiento quirúrgico como tal, es
preciso tener en cuenta las siguientes premisas:
• No todas las dilataciones venosas requieren tratamiento
quirúrgico.
• Debe descartarse que las molestias referidas en miembros
inferiores no sean de otra causa ( neurológica, mecánica,
arterial etc.).
• Hidratación de la piel.
• Control de deformidades ortopédicas.
• Control hormonal.
• A muchos pacientes, en especial las mujeres, las varices
les plantean un problema exclusivamente estético.
Una vez establecida la indicación quirúrgica en el paciente, se
plantean los siguientes objetivos:
Factores a evitar:
• Extracción y ligadura de todas las varicosidades existentes.
• Sedentarismo y ortostatismo.
• Aplicación de calor local.
• Eliminar la fuente de hiperpresión venosa, suprimiendo
el reflujo del sistema profundo hacia el sistema superficial.
• Compresiones segmentarias.
• Lograr los mejores resultados estéticos posibles.
• Obesidad y estreñimiento.
• Minimizar las complicaciones.
Tratamiento farmacológico
La base fundamental del tratamiento farmacológico son los
medicamentos flebotónicos. Tienen un efecto protector y
tonificante sobre la pared venosa y capilar, protegiendo el
endotelio y aumentando el tono.
El tratamiento quirúrgico convencional utiliza el Stripping o arrancamiento de los grandes ejes venosos
del sistema superficial que conlleva también la
ligadura de venas perforantes para desconectar el sistema superficial del sistema
profundo y la flebectomia de las venas
colaterales.
Escleroterapia
La esclerosis consiste en inducir la oclusión de la vena a tratar,
es decir, llegar a la fibrosis (cicatrización) de la misma.
La escleroterapia puede dividirse en dos grandes grupos:
• Escleroterapia química que funciona mediante la introducción
de una sustancia irritante que actúa a nivel endotelial. Esto
provoca la coagulación y posteriormente fibrosis de la vena.
Dentro de la esclerosis química existen diferentes tipos:
- Esclerosis con espumas
- Crioesclerosis ( esclerosis con enfriamiento de la sustancia esclerosante).
- Esclerosis líquida convencional.
• Escleroterapia mediante láser o fuentes de luz (fotoesclerosis). Por medio de la alta frecuencia de la luz empleada, se
consigue la coagulación de los pequeños vasos y consiguientemente su desaparición.
45
bip