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REFLEXIONES SOBRE EL MÉTODO CIENTÍFICO
David Alfaro Siqueiros Beltrones
Dpto. Plancton y Ecología Marina, CICIMAR – I.P.N. [email protected]
Becario COFAA y EDI del IPN
RESUMEN
Existe cada vez más controversia respecto al Método Científico dentro de la
comunidad científica y filosófica. Enunciados como “ Son muchos los Métodos
Científicos ” o El Método Científico no existe... y réplicas como “ ...pero está ahí
cuando se necesita ! denotan posiciones irreflexivas y filosóficas. Empero,
existen argumentos para sustentar que hay un Método Científico, que se sigue
con convicción y que confiere cientificidad a la investigación. Este define la
forma de proceder en la investigación y la actitud del científico, que derivan de
la integración de: la educación (socrática); entrenamiento; preparación;
creatividad, inventiva, e imaginación para identificar y abordar problemas de
conocimiento. Ello, requiere que el científico potencial reciba formación
científica y filosófica ex profeso, y que contemple lo anterior. Sin embargo, esta
formación no está contemplada en los currícula científicos, los estudiantes de
ciencia forjan gran mucha de su personalidad científica empíricamente,
generalmente ajenos a la filosofía que subyace y rodea al Método Científico.
Entonces ¿por qué funciona nuestro aparato científico? La Ciencia como
invento social constituye un fenómeno colectivo; la misma propiedad debe
reconocerse en el Método Científico; su aplicación no es necesariamente
individual sino de la colectividad científica. Así, el método científico debe
tomarse como la aplicación intelectual conjunta de la comunidad científica en la
generación de teoría. Al entender lo anterior se adquiere una visión
desmistificada de la actividad científica, que, transmitida mediante su sistema
educativo habrá de reflejarse en un mayor nivel cultural de la sociedad.
Palabras clave: Método científico, filosofía de la ciencia, investigación.
CONSIDERATIONS ON THE SCIENTIFIC METHOD
ABSTRACT
Each time there is more and more controversy surrounding the Scientific
Method concept within the scientific and philosophic community.
Acts of
speech like “there are many scientific methods”…or the Scientific Method
doesn’t exist…, and replies such as… but it’s there when needed ! show both
un-thought as well as philosophical positions. However, there are arguments
sustaining that there is a Scientific Method which is followed with conviction and
that it renders scientific status to a given research. It determines the way in
which to proceed in an investigation and the scientist attitude. This derives from
the following integrated elements: education (socratic); training; preparation;
creativity, inventiveness, and imagination for identifying and undertaking
problems of knowledge. The above requires that the potential scientist acquirers
express scientific and philosophical formation. Albeit said formation is not
contemplated in the scientific curricula. Thus, science students construct much
of their scientific personality empirically, often unaware of the philosophy that
underlies and surrounds the Scientific Method. So, how is it that our scientific
apparatus works ? Because science is a collective social activity such property
must also be acknowledge in the Scientific Method. Its use is not necessarily for
the individual but by the scientific community. Therefore the Scientific Method
should be considered as the joint intellectual application of the scientific
community for the generation of theory. The above, once understood helps to
demystify
the scientific activity which then transmitted through the school
system should add in a higher cultural level in society
ANTECEDENTES
Este escrito representa una de varias reflexiones dentro del ámbito de la
Filosofía de la Ciencia, motivadas por la experiencia propia dentro del quehacer
académico, ya sea docente o en investigación. La premisa es que no se
consideran congruentes muchas de las actitudes observadas entre la academia
que, al enfocarse en la labor investigativa científica y en la formación de nuevos
científicos. La investigación “científica” no se hace de una manera consciente
de lo que estamos haciendo, i.e., apegándonos consistentemente a su filosofía.
Tampoco cuestionamos con convicción el cómo lo debemos estar haciendo, ni
cuál es la finalidad o propósito de las estrategias y métodos que
implementamos para lograrlo (su metodología, sensu etimológico). Asimismo,
se carece de respuestas fundamentadas a preguntas tales como ¿alcanza este
estudio para una tesis doctoral, o de maestría, o de licenciatura, o cuál es la
diferencia ? ¿qué le confiere cientificidad a una investigación ? o simplemente
¿ qué es el Método Científico ? Esto complica el accionar de la academia y
vuelve más subjetivo el desempeño de las múltiples comisiones que se
integran para llevar a cabo las diversas tareas. No es de extrañarse, entonces,
que existan frecuentes desacuerdos irreconciliables entre colegas, ya que el
recurso de la razón y la dialéctica, elementos indispensables en cualquier
discusión de nivel intelectual, está incompleto por desconocimiento de la propia
filosofía de su quehacer, la ciencia.
La filosofía en general nos proporciona los medios para eficientizar
nuestra aplicación intelectual en la solución de este tipo de problemas,
incluyendo aquellos que definen los preceptos éticos y nos permiten la
convivencia cotidiana en nuestro lugar de trabajo. De la misma manera,
podemos encontrar un sentido práctico en dicha filosofía para desempeñarnos
adecuadamente dentro de las actividades que implica ser científico.
De acuerdo con lo anterior, es menester conocer la filosofía que subyace
al Método Científico, una de varias formas medulares de proceder en la
investigación
científica,
entendiendo
los
preceptos
que
permiten
su
identificación y funcionamiento. Asimismo, como científicos debemos formarnos
un concepto y concretar definiciones de lo que son la Ciencia, la Filosofía de la
Ciencia, y el Método Científico. Sin embargo, nos conformarnos con esperar a
que filósofos, filósofos de la ciencia, o incluso divulgadores de la ciencia, hagan
dicha tarea, sin preocuparnos o sin sufrir, adecuándonos a las ideas de
quienes, aunque su labor es muy respetable, no tienen la referencia básica que
constituye la praxis científica, i.e., hacer investigación, construir teoría y
reconocer y aplicar la filosofía científica.
MÉTODO
Para tratar de aclarar la anterior problemática, recurrimos a algunas
frases que funcionan como “actos de habla”, es decir impactan y sirven de
partida, condicionan y hasta limitan muchos de nuestros pensamientos
(directrices). Aunque sus implicaciones son de hecho bastante útiles,
desafortunadamente, a menudo se adoptan irreflexivamente, o al intentar hacer
alguna reflexión nos topamos con su fuerza dogmática y llegamos a callejones
sin salida. Dichos directrices se analizan en este ensayo para entender su
significado y validarlas, de tal manera que sean realmente útiles cuando el
investigador científico las requiera en su argumentación sobre la ontología del
Método Científico.
RESULTADOS
Primeramente, una de las frases más impactantes e iconoclastas, sobre
todo al ser argumentada por el célebre Paul Feyerabend, es que “ el Método
Científico no existe...” Una contra argumentación se rescata rápida y
frecuentemente recurriendo a la praxis y al sentido común, a la manera de
“...pero está ahí cuando se necesita” porque es de lo que echan mano los
investigadores de diversas disciplinas, es decir, se refieren al Método Científico
cuando piensan en cómo hacen y explican su investigación. Algo que quizá
hacen más intuitivamente que lógicamente, máxime cuando no critican su
trabajo con base en un concepto razonado de lo que es el Método Científico.
Igualmente se presenta la dificultad de argumentar, con esa referencia, acerca
de la validez de un determinado trabajo (tesis o artículo).
En los mitos del método (científico) se hacen algunas críticas (Jiménez
Domínguez, 2004) que valen la pena considerar de manera igualmente crítica,
y con el propósito de reforzar el reconocimiento del denominado Método
Científico (MC):
1º. El MC existe como algo ya hecho, acabado, establecido y validado por la
ciencia…puede enseñarse, aprenderse, transmitirse…entonces podemos hacer
investigación científica”
2º) El MC puede darse como una serie de preceptos definidos aceptados…su
observancia garantiza hacer bien las cosas
3º) ...sin este no es posible hacer investigación científica. Todos los
investigadores lo conocen, o deben conocerlo, si su trabajo habrá de tener un
poco de seriedad…Sin embargo, a diferencia de la posición anárquica de
Feyerabend, en la argumentación del autor anterior, se aprecia una aceptación
de la existencia del MC, según los siguientes enunciados:
a) Quienes más se preocupan por el MC son estudiosos de ciencias
sociales y humanidades vs. disciplinas duras
b) El problema del método cae en la esfera de la filosofía de la ciencia;
se requiere conocer la ontología del método.
En consecuencia de lo anterior, puede derivarse lo siguiente: Una
posición que con mayor convicción defienden los investigadores, la de “Son
muchos los Métodos Científicos” Ciertamente, cada tipo de investigación o
disciplina de estudio tiene su propia estrategia metodológica, aún cuando
tengan un marco teórico en común con otras disciplinas. La investigación
puede definirse como una serie de métodos para resolver problemas, cuyas
soluciones necesitan ser obtenidas a través de operaciones lógicas, partiendo
de datos objetivos, es decir, tomados de la realidad, de hechos. Pero podemos
encontrar un denominador común en las investigaciones de diversas disciplinas
de conocimiento, lo que las hace científicas…sus bases epistemológicas, i.e.,
su filosofía (de la ciencia)... ¿su método? La tautología es inevitable, pero
usémosla solo a manera de impulso.
Por ejemplo, en las investigaciones criminológicas, muy a menudo se
aplican técnicas y tecnología de vanguardia, que utilizan también los científicos
Sin embargo, dichas investigaciones no son científicas, puesto que no siguen el
Método Científico, aún cuando hablen de técnicas o evidencias científicas.
Porque su propósito es resolver casos, y donde el objetivo es siempre, a
grandes rasgos, determinar si se es culpable, o... ¿ quién lo hizo ? Claro, sin
demeritar su importancia, o el rigor en sus métodos, o a su propósito.
A diferencia, mucho de lo que define al Método Científico depende de
descubrir y/o plantear el problema (de conocimiento), i.e., la pregunta inicial,
partiendo de una base teórica; el objetivo es responder a dicha pregunta
específica, con un propósito, contribuir a generar conocimiento o teoría en
determinada disciplina. Dicho conocimiento eventualmente será utilizado para
la solución de problemas prácticos (médicos, tecnológicos, de ingeniería, de
conservación, e incluso culturales, educativos y filosóficos, etc.). Así, los
campos de conocimiento reconocidos como científicos se definen en disciplinas
que los formalizan para apoyar el desarrollo de investigación, estructurando
teoría que, a su vez, sirve de punto de partida para la investigación científica
haciendo preguntas sobre aquello que la teoría no responde en ese momento.
También se ha propuesto que el “Método Científico es UNO”, es decir
uno mismo, ya que la forma de proceder en la investigación es más la
adecuada formación del científico. Ello implica una actitud que deriva de la
influencia de diversas doctrinas filosóficas sobre la personalidad del
investigador. Así, la actitud científica se deriva de la integración de varios
aspectos o componentes que conducen hacia su preparación.
Educación: actitud y espíritu científico; filosofía* y ética
Entrenamiento: estudio de paradigmas y formas de razonamiento*
Capacitación: conocer y manejar paradigmas teóricos y metodológicos
Preparación: que consiste en comprender y usar paradigmas
Asimismo, procesos intelectuales no lógicos como su creatividad se
manifestarán en la identificación de problemas de conocimiento; su imaginación
le permitirá ir más allá del establecimiento de una relación discreta y visualizar
consecuencias ulteriores; su inventiva, hacia la elaboración de estrategias, y la
intuición, que aplicará en la selección de preguntas y respuestas dentro de su
investigación.
En apego a su filosofía como científico, habrá de someter dichos
recursos no lógicos a un escrutinio escéptico, con lógica y sobre la base de un
manejo adecuado de información, apelando a una actitud crítica y autocrítica,
con lo cual sus principios morales abarcarán su desempeño científico. Así, la
ética científica será una extensión cultivada de su moral que le guiará en todo
esto. Al aplicar lo anterior, el científico habrá de permanecer en una fase de
preparación constante, para lograr su propósito.
Todas estas virtudes, que reconoce la filosofía, requieren de Lógica y
Metodología, que son también derivadas de la filosofía, para su aplicación
sistemática. Sin embargo, la sistematización anterior no sustituye la capacidad
intrínseca para la inferencia humana (análisis, síntesis; inducción, deducción; y
analógica), por lo que cada individuo aportará sus cuotas individuales distintas.
Y, así como habrá distintas capacidades para filosofar, lo habrá en el
desempeño individual dentro de cada disciplina filosófica (Lógica, Metodología,
Epistemología, Matemáticas, etc.) incluyendo la investigación científica. No
obstante, en cada individuo se podrán cultivar todas estas, lográndose una
cierta preparación, en este caso, dirigida a la investigación científica (Fig. 1).
Figura 1.- Ciclo de investigación científica en donde la sistematización lógica y
metodológica estándar se enriquece con las capacidades lógica y no-lógica
individuales.
Aunque operativamente el Método Científico puede definirse como el
procedimiento general que se sigue para abordar y tratar de resolver uno, o un
conjunto de problemas (de conocimiento), i.e. Investigación Científica. Los
clásicos pasos que se distinguen en descripciones de secundaria y preparatoria
quedan absorbidos y ampliados en el esquema del ciclo de investigación. Así,
nos obligamos a replantear la definición de MC, bajo la condición de que se
utilice críticamente como base para elaborar un concepto amplio, partiendo de
las virtudes lógicas y no-lógicas del individuo. Así, Método Científico es:
Nuestra aplicación intelectual para la generación de conocimiento
(PROPÓSITO), mediante métodos, estrategias y técnicas de investigación,
implementadas ex profeso, y aplicadas de acuerdo con una actitud sistemática
y lógica (Metodología), dirigiéndolas hacia la obtención de respuestas a
preguntas concisamente planteadas, derivadas por inferencia a partir del
análisis crítico de la teoría en determinada disciplina de conocimiento (base
teórica) y de la observación de los fenómenos (base empírica), que son nuestro
objeto de estudio.
El tipo de formación que exige llevar esto a la práctica científica no está
contemplada en las carreras de formación científica, misma que más bien peca
de enciclopedista y poco crítica. Los estudiantes de ciencia van forjando gran
parte de su propia personalidad científica empíricamente. Inmersos en el
ambiente científico, van recogiendo aquí y allá ingredientes del método
científico. Eventualmente llegan a percibir la filosofía que subyace su
investigación científica; aunque frecuentemente no es así. De esta manera, se
identifican (a veces), ya con la escuela de Popper, ya con la de Feyerabend
(Pérez Tamayo, 1993), o ninguna, solamente con el éxito que significa lograr
un buen número de publicaciones en revistas de mayor o menor prestigio. De
esta manera, en nuestro país y otros similares, se llegan a forjar excelentes
investigadores que publican en las mejores revistas del mundo (Cereijido,
2001). Entonces ¿cómo es que que funciona nuestro aparato científico ?!
CONCLUSIONES
La Ciencia es un invento social y constituye un fenómeno colectivo; la
misma propiedad debe atribuirse al Método Científico, por lo que su aplicación
no es necesariamente a nivel individual, sino de la colectividad científica. Esto
es, la labor conjunta de científicos, investigadores, técnicos y estudiantes. De
esta manera se rescatan las distintas individualidades: educación,
entrenamiento, capacitación, preparación, formas de pensar, visiones,
razonamiento (inferencial), etc…, mientras que otros miembros de la
comunidad científica (pares) nos exigen un mínimo de contribución apegada al
método científico en nuestras posibilidades; ergo, el método científico es la
aplicación intelectual conjunta de la comunidad científica en la generación de
teoría; el método científico no es uno, somos todos
Este tipo de reflexiones filosóficas deben ser recogidas por la comunidad
científica y manejadas críticamente, de tal manera que se incorporen en
preceptos que respalden y den confianza al investigador, y confiabilidad a la
ciencia frente a la sociedad. Esta, a su vez, tendrá una visión desmistificada de
la ciencia y sus científicos, complementando con ello su formación cultural. Lo
anterior habrá de lograrse mediante la preparación que vayan adquiriendo los
educandos en todos los niveles, dado que eventualmente todo el conocimiento
permea a través de el sistema educativo del país. Así, tanto aquellos que se
incorporen los sectores científico, o de tecnología, ingeniería, humanidades,
educación, etc., contarán con mejores bases para conducirse dentro de una
sociedad evidentemente influenciada por la actividad científica.
BIBLIOGRAFÍA
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