Download EUCARISTÍA PARA EL MIÉRCOLES DE CENIZA 13 DE FEBRERO

EUCARISTÍA PARA EL MIÉRCOLES DE CENIZA 13 DE FEBRERO 2012
MONICIÓN DE ENTRADA:
Hoy 13 de febrero nos reunimos ante ti Señor, para comenzar, como cada año, nuestro camino
de cuaresma, un sendero de oración, reflexión, abstinencia y ayuno. Hagamos que en este año
de la fe sea una cuaresma vivida en profundidad, confiando más en nuestro Dios.
Y lo haremos con un signo universal como es la “recepción de la ceniza”, como símbolo
de que somos poca cosa, de que necesitamos la ayuda y presencia de los demás, de que
queremos volver nuestro corazón y nuestra vida hacia Dios para que el “construya la
casa de nuevo”, nos construya a todos por dentro y nos dé un corazón nuevo, una vida
nueva.
Pidamos perdón, demos gracias y confiemos en todo lo que el Señor pone en nuestro camino,
al final nos encontramos más cerca de Ti, en la Pascua
CANTO: “Levántate caminante” “Hola Dios”….
LITURGIA DE LA PALABRA:
Monición a la Primera Lectura
El profeta Joel hace una intensa llamada a la conversión. Los ritos penitenciales tienen
sentido si traducen el sentir del espíritu, sentir de culpabilidad, que actúa un movimiento
de retorno al Dios creador y salvador.
El profeta llama a los habitantes del país a hacer penitencia y a arrepentirse. Solo
así será posible esperar que Dios restablezca el orden del mundo. Es un símbolo del
movimiento de retorno al Dios creador y salvador, manifestado plenamente en Jesucristo.
Primera lectura
Lectura de la profecía de Joel (2,12-18):
«Ahora, oráculo del Señor, convertíos a mí de todo corazón con ayuno, con llanto, con
luto. Rasgad los corazones y no las vestiduras; convertíos al Señor, Dios vuestro, porque
es compasivo y misericordioso, lento a la cólera, rico en piedad; y se arrepiente de las
amenazas.» Quizá se arrepienta y nos deje todavía su bendición, la ofrenda, la libación
para el Señor, vuestro Dios. Tocad la trompeta en Sión, proclamad el ayuno, convocad
la reunión. Congregad al pueblo, santificad la asamblea, reunid a los ancianos.
Congregad a muchachos y niños de pecho. Salga el esposo de la alcoba, la esposa del
tálamo. Entre el atrio y el altar lloren los sacerdotes, ministros del Señor, y digan:
«Perdona, Señor, a tu pueblo; no entregues tu heredad al oprobio, no la dominen los
gentiles; no se diga entre las naciones: ¿Dónde está su Dios? El Señor tenga celos por su
tierra, y perdone a su pueblo.»
Palabra de Dios.
El salmo se cantará al principio y al final : “Nada nos separará”
Salmo Sal 50,3-4.5-6a.12-13.14.17
R/. Misericordia, Señor: hemos pecado
Misericordia, Dios mío, por tu bondad,
por tu inmensa compasión borra mi culpa;
lava del todo mi delito, limpia mi pecado. R/.
Pues yo reconozco mi culpa,
tengo siempre presente mi pecado:
contra ti, contra ti sólo pequé,
cometí la maldad que aborreces. R/.
Oh Dios, crea en mí un corazón puro,
renuévame por dentro con espíritu firme;
no me arrojes lejos de tu rostro,
no me quites tu santo espíritu. R/.
Devuélveme la alegría de tu salvación,
afiánzame con espíritu generoso. Señor,
me abrirás los labios,
y mi boca proclamará tu alabanza. R/.
Monición a la segunda lectura:
Dios ha hecho conocer su perdón a los hombres en Jesús. Participando en nuestra
naturaleza humana, Cristo se ha opuesto, en efecto, a la dinámica del pecado. El ha vuelto
a crear la verdadera orientación. Al hombre corresponde dejarse atrapar en la corriente así
creada y reconocer que el Dios del amor invita a todos los creyentes a vivir en el amor. El
día de la salvación ha llegado: ¡ojalá lo sepamos reconocer!
SEGUNDA LECTURA (San Pablo a los Corintios, 5,20-6,2)
“Hermanos:
Nosotros actuamos como enviados de Cristo, y es como si Dios mismo os hablara por
nuestro medio. En nombre de Cristo os pedimos que os reconciliéis con Dios.
A Jesús, que no había pecado, Dios lo hizo pagar por nuestros pecados, para que
nosotros, unidos a él, recibamos el perdón de Dios.
Secundando su obra, os animamos a no echar en saco roto la gracia de Dios, porque él
dice: " En tiempo favorable te escuché, en día de salvación vine en tu ayuda"; pues
mirad, ahora es tiempo favorable, ahora es día de salvación”.
Palabra de Dios.
Monición al evangelio:
La revelación del Dios de la vida pide una respuesta sencilla y libre del hombre a
través de la fe y por medio de la práctica sobre la que se asentaba el hecho religioso judío:
la limosna, la oración y el ayuno. Pero nos advierte sobre la práctica hipócrita de la
apariencia, para alcanzar una espiritualidad de lo secreto, sabiendo que Dios ve desde lo
alto y en lo profundo de la conciencia.
EVANGELIO (según san Mateo 6, 1-6,16-18)
"Jesús dijo a sus discípulos: Tened cuidado para no hacer las cosas solamente para que
os vean los demás.
Así, por ejemplo, cuando hagas limosna o cuando reces, no lo vayas diciendo a todos
para que ellos te alaben. Por el contrario, debes hacerlo discretamente y sólo para
agradar a Dios; y Él te lo premiará.
Cuando hagas alguna penitencia o algún sacrificio, no andes triste ni contándoselo a
todos. Muéstrate siempre alegre y Dios, que conoce todos los secretos, te lo
recompensará”.
Palabra de Dios.
BENDICIÓN E IMPOSICIÓN DE LA CENIZA
MONICIÓN: La ceniza que vamos a recibir es signo de dos actitudes
fundamentales en nosotros: Reconocer aquellas cosas que no hemos hecho como
al Señor le gusta y pedirle perdón por ellas. Y también nos recuerda que como cristianos
queremos ser en adelante mejores personas. Personas agradecidas que saben
descubrir siempre lo positivo.
BENDICIÓN DE LA CENIZA
IMPOSICIÓN DE LA CENIZA: (Cantamos: “tu fidelidad”, “Si no tengo amor”, “Como podré
agradecer”)
ORACIÓN DE PETICIÓN:
1. Para que la Iglesia viva en su plenitud el misterio de Cristo y sea, a la vez, un
sacramento eficaz de salvación. Roguemos al Señor. R. Te lo pedimos, Señor
2. Para que los hombres creados a imagen tuya sintamos el horror de las injusticias
de los hombres. Roguemos al Señor. R. Te lo pedimos, Señor
3. Para que los que tienen hambre y sed de justicia encuentren en Cristo la Verdad y
la Vida. Roguemos al Señor. R. Te lo pedimos, Señor
4. Para que la conversión a Dios sea la actitud constante de los creyentes y
busquemos su rostro con sinceridad de corazón. Roguemos al Señor. R. Te lo
pedimos, Señor
5. Por nuestros padres, profesores y educadores del Colegio, para que con su ejemplo y
ayuda nos acerque más a Jesús, Roguemos al Señor. R. Te lo pedimos, Señor
6. Por nuestros familiares enfermos para que reciban el consuelo de nuestra compañía y la
fortaleza del Señor para afrontar las dificultades con confianza, Roguemos al Señor. R.
Te lo pedimos, Señor
7. Para que en estos días de preparación a la pasión, muerte y resurrección del Señor
busquemos la paz entre los hombres, roguemos al Señor. R. Te lo pedimos, Señor
8. Para que la Cuaresma sea un tiempo de conversión, de gracia, de aumento en la
oración, en la limosna y la entrega a los demás. Roguemos al Señor. R. Te lo
pedimos, Señor
LITURGIA DE LA EUCARISTÍA
OFERTORIO: Señor, con el pan y el vino queremos ofrecerte nuestra vida y decirte: a
quienes somos cobardes, danos tu valentía; a quienes somos hipócritas, danos tu
sinceridad de vida; a quienes somos comodones, danos tu látigo; a quienes somos egoístas
y envidiosos, danos tu entrega; a quienes somos insensibles, danos tu vivencia sobre tu
Padre. SEÑOR, HAZNOS OFRENDAS DE AMOR Y DE CONVERSIÓN.
CANTO: “Recíbeme”, “Gracias por la fe” “En la oscuridad de la noche”
ACCIÓN DE GRACIAS:
1. Gracias por la oportunidad que cada día nos das, por la vida que nos regalas. Gracias
Señor, te damos gracias Señor
2. Gracias Señor, porque nos recibes con los brazos abiertos, cada vez que nos alejamos
de ti. Gracias Señor, te damos gracias Señor
3. Gracias por abrirnos los ojos a las pobrezas de este mundo. Gracias Señor, te damos
gracias Señor
4. Gracias por ayudarnos a seguir cerca de ti, por darnos una fe fuerte. Gracias Señor, te
damos gracias Señor
CANTO “Junto a María: " “ Ave, Ave María”