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La ventaja de jugar como local
La mayor cantidad de temporadas que disputó Quilmes de Mar del Plata, en Liga
Nacional, siempre contaron con un punto en común: Su fuerte localía en Once Unidos.
En los últimos campeonatos la dirigencia del “Cervecero” forma planteles que pelean en
la mitad de tabla, a partir de esa media, puede ir un poco más para arriba ó para abajo.
Los distintos equipos que representaron a la entidad de Luro y Guido fueron
protagonistas de victorias históricas en el Once Unidos. Ejemplos: Dejar afuera de los
cuartos de final a Atenas de Córdoba por primera vez en su historia; ser el único equipo
que venció, en play off, a Libertad de Sunchales, cuando estos fueron campeones.
También hubo un descenso y un ascenso, siempre con la localía como punto clave.
En la parte final de la temporada pasada, Quilmes puso en duda su participación en el
estadio del bario “Parque Luro”, esto fue noticia día tras día hasta que los dirigentes de
ambas partes llegaron a un acuerdo y el “Tricolor” pudo confirmar su punto más
importante.
El plantel actual del “Cervecero”, posee el presupuesto más bajo de los últimos años,
pero tiene a dos extranjeros que son de los mejores que han pasado por la Argentina. Un
conjunto de nacionales que, por momentos acompaña muy bien a los foráneos, todo esto
sumado a la fuerte presencia como local.
En la primera fecha el conjunto de Esteban De la Fuente perdió, como local, frente a
AeroChaco Boca y después tuvo una mini gira como visitante por cinco jornadas. Para
la 7° y 8° fecha, que se disputó el pasado fin de semana, volvió al Once Unidos y
derrotó a los dos equipos más fuertes de la zona sur. Central Entrerriano (73-72) y
Obras Sanitarias (94 a 77).
Queda claro que el estadio con sus espectadores no ganan partidos pero si forman parte,
entre otras cosas, de cada victoria. En el partido de ayer ante Obras, el contacto entre los
jugadores visitantes y los espectadores fue continuo. Bruno Lábaque y Gabriel
Fernández demostraron que la experiencia, a veces, no sirve de nada. Quizás, ellos no
poseen la suficiente jerarquía para jugar como visitante ante el espectador argentino.
Pasan jugadores, directores técnicos, dirigentes, recambio de espectadores, y el Once
Unidos siempre como el punto vital para Quilmes de Mar del Plata.