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PRÁCTICAS TEMA 1 bis: INTRODUCCIÓN
1) Sobre la normatividad ética
“Investigar qué reglas o ideas morales rigen en nuestra sociedad o en otra
sociedad no es tarea de la filosofía práctica; su objetivo es más bien decidir qué es
moralmente correcto. La filosofía práctica no pregunta qué es lo que en algún lugar se
tiene por bueno o correcto, sino qué es bueno o correcto. Por ello precisamente y al
contrario que la “Ética” descriptiva, es una disciplina práctica: solo de enunciados
normativos, de mandatos o de valoraciones morales se sigue lo que debemos hacer. La
pregunta fundamental de la Ética es en la formulación de Kant ‘qué debemos hacer’. De
la comprobación de que según las normas vigentes está mandado hacer esto o aquello,
no se sigue que yo deba actuar de una manera determinada, si al enunciado descriptivo
sobre estas normas no se añade un enunciado normativo en el que se dilucide que esta
norma es moralmente correcta.
Contra la concepción de la Ética como disciplina normativa se ha
argumentado que una ciencia no puede establecer normas, sino solo describirlas y
aclarar su origen… Ahora bien, esta objeción solo sería correcta si los enunciados
normativos no fueran afirmaciones, sino por ejemplo imperativos… Pero los enunciados
normativos deben ser considerados afirmaciones… Así pues, esta objeción no tiene
sentido, a no ser que por ‘ciencia’ se quiera entender desde el principio solo una ciencia
no normativa. Sin embargo, no sería correcto realizar una limitación terminológica de
este tipo” (Kutschera, F., Fundamentos de ética, Cátedra, Madrid, 1989, 52-53).
1) ¿Diferencia entre una ciencia social de lo normativo y una ciencia normativa
2) ¿En qué consiste la normatividad ética y qué la diferencia de otras
normatividades, como la jurídica o la técnica?
3) ¿En qué se diferencia la normatividad ética de los juicios de prudencia, guiados
por la razón práctica?
2) Actos, hábitos y carácter
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“Veamos qué nos dice el saber común. Por una parte, se habla ciertamente de
acciones buenas; se reputa de ‘buena’ una acción y de ‘mala’ otra… Damos un paso
más en la caracterización moral cuando decimos de alguien que es ‘de buenas
costumbres’. Del preconcepto de acto pasamos así al de hábito (virtud o vicio). Pero los
hábitos se adquieren y se pierden y enraízan en la vida o se desarraigan de ella. Así, se
dice de alguien que ‘lleva una vida virtuosa’ o ‘una vida viciosa’.
De las acciones humanas pasamos a los hábitos y de los hábitos a la vida concreta,
individual, real. ¿Hay todavía otra instancia más hondamente enraizada en la persona?
Un hombre que ha vivido toda su vida honradamente puede caer en el último instante y,
viceversa, el hombre de vida más depravada puede ‘arrepentirse’ a la hora de la
muerte… El carácter moral no es, como el genio y figura, ‘hasta la sepultura’. Un solo
acto, cuando es decisivo, puede sobreponerse a los hábitos, por inveterados que sean, y
aun a la vida entera” (José Luis López Aranguren, Ética, Alianza Universidad, 1981,
28-29).
1) Rasgos distintivos de los actos humanos
2) Exponer la interacción entre actos, hábitos y carácter
3) ¿Por qué los conceptos éticos se descifran en el lenguaje usual?