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SEMINARIO CIENCIAS DE LA NATURALEZA
REALIZACIÓN DE UN HERBARIO.
Material necesario.
Bolsas grandes de plástico, azadilla, tijeras, carpeta grande de cartón, papel de estraza o
de periódico, libreta, lapicero, prensa, o en su defecto, algo pesado, pliegos de papel
blanco no satinado, cinta adhesiva transparente y etiquetas de herbario.
Procedimiento.
Para estudiar mejor la flora de una región, es decir, sus especies vegetales, un método
muy útil es el de recolectar plantas y preparar un herbario. La época idónea para hacerlo
es la primavera o el verano, porque entonces habrá un mayor número de plantas con flores
y con frutos. El objeto de este trabajo es conseguir una familiarización con las técnicas
de estudio y con las características morfológicas de las plantas. Por tanto, no es preciso
que recojas muchas plantas, pero sí que describas la anatomía de las que forman parte de
tu pequeño herbario.
Cuando salgas a recoger plantas procura respetar el medio ambiente y no recolectes más
de las necesarias ni ejemplares que sean escasos. Lleva una carpeta grande de cartón con
numerosas hojas de periódico o de papel de estraza y bolsas grandes de plástico. Lo más
adecuado es tomar 2 muestras de cada ejemplar. Una servirá para su estudio; guárdala en
la bolsa. La otra se utilizará para conservarla en el herbario; guarda ésta en la carpeta con
una nota en que consten las características del lugar de recogida (tipo de vegetación de la
zona, del suelo, pendiente, orientación, si está en solana o murria, altura si lo sabes…). Si
recoges plantas herbáceas, utiliza una azadilla para extraer las raíces; sólo debes arrancar
aquellas plantas que tengan flores. Si se trata de árboles o arbustos, corta las ramitas con
unas tijeras de podar, procurando que tengan la mayor parte de los órganos (hojas, flores
y frutos).
Ya en casa, estudiarás detenidamente cada ejemplar. Debes apuntar sus características
morfológicas: tipo de raíz, de tallo, de hojas, según los distintos criterios; de flores,
indicando las piezas que forman cada parte y cómo están dispuestas; de frutos. A tu nivel
no es preciso clasificarla, pero sí puedes indicar al gran grupo de plantas al que
pertenezca: pteridofita, gimnosperma, monocotiledónea o dicotiledónea.
El material recogido para el herbario debe prensarse lo más pronto posible para extraer el
agua. Para ello, coloca cada planta, con su nota, entre 5 ó 6 hojas de papel de periódico o
de estraza. Procura limpiar antes la planta de arena o insectos, y no la coloques de forma
que queden partes superpuestas. Si hay órganos gruesos, elimínalos o bien córtalos
longitudinalmente. Una vez preparadas y apiladas, introduce el paquete de plantas en una
prensa o bien coloca mucho peso encima de él. Cada 2 ó 3 días, y hasta el secado total
(su duración es variable dependiendo de la planta), debes cambiar los papeles a las plantas
y ponerlas a prensar otra vez, con su nota correspondiente. Ten mayores cuidados con las
plantas de tallos carnosos, que pueden eliminar mucha agua y necesitarán cambios más
continuos.
El material desecado se pasa a los pliegos de papel blanco no satinado, fijándolo con
trozos pequeños de cinta adhesiva, y se pone una etiqueta que reúna los datos que
apuntaste al recogerla y los que obtuviste al estudiarla.
Consejos o ideas para su realización