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Lección 42 “Las presiones de la vida”
Noviembre 2015
Líder: Su función en esta lección es inyectar en el oyente el hecho de que Dios siempre está dispuesto para ayudarnos
a atravesar una presión abrumadora. El creyente siempre debe mantener su enfoque en cómo Dios está
trabajando en la situación.
“He aquí yo estoy con vosotros todos los días, hasta el fin del mundo. Amén”.
Lea Mateo 28:20:
Entender el mover de la presión es una clave para sobreponerse a ella.
La semana pasado concluimos diciendo que cuando usted *está al tanto de los efectos mentales y
emocionales del enemigo en una etapa de presión fuerte, entonces:
1) podrá identificar (al instante) cuánta influencia diabólica se ha infiltrado en su crisis.
2) podrá apartar lo diabólico que se ha filtrado en su crisis para poder:
-
analizar con claridad lo que Dios le está diciendo y lo que el diablo está inyectando en ella, y
enfocarse en la misión que quiere alcanzar.
Pregunta para su gente:
a)
b)
c)
d)
e)
¿Quién puede decirnos cuáles son los efectos o las manifestaciones del enemigo que se
filtran en una etapa de presión abrumadora de una persona?
desviarle de Dios y sus promesas,
matar su fe,
abrumarle sobremanera para que responda a su situación imprudentemente,
ofrecerle derrota,
ahogarlo en temor, confusión y pánico.
¿Qué debe hacer cuando reconoce estos efectos o manifestaciones?
Respuesta: Debe descartarlos al instante y enfocarse en Dios y sus promesas.
Dios desea que esté al tanto de cómo puede convertir una situación pesada en una situación que le
beneficie a la larga. Por ejemplo:
I.
Cuando usted atraviesa una ocasión de presión fuerte en su vida, Dios va a esperar que use esa ocasión
como una oportunidad para:
a) moverse hacia una mayor dependencia de él con el motivo de buscar:
-
su ayuda,
una palabra fresca para darle una fe fresca y actualizada para sostenerle,
refugio.
Lección 42 - Las presiones de la vida
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b) estirar su fe, en el sentido de que su única opción es *pelear la buena batalla de la fe, echando
mano de la vida eterna.
Pregunta para su gente:
¿Qué significa “echar mano de la vida eterna” en este caso? Significa que va a:
1)
2)
3)
4)
Llenarse con la comida de fe,
Estar muy atento para cuando Dios le hable,
Atraer el Señorío de Jesús y la autoridad del cielo a su crisis de presión abrumadora,
Tomar el paso conscientemente de fortalecerse en el Señor y en el poder de su fuerza, y va a vestirse
de toda la armadura de Dios, para que pueda estar firme contra las asechanzas del diablo,
5) Aferrar el manto de Jesús hasta que esté satisfecho con el resultado.
Líder, repase esta pregunta y las respuestas.
Y en conclusión, cuando usted atraviesa una ocasión de presión fuerte en su vida, use esa ocasión como
una oportunidad para glorificar a Dios y triunfar sobre las presiones que quieren aplastarle.
II.
Cuando entiende a dónde Dios quiere llevarle durante su tiempo de presiones abrumadoras, y cómo
usted puede beneficiarse de esa etapa,
1)
recuerde que ya tiene la experiencia de vencer los tiempos de presión del pasado, y que una
presión de mayor magnitud en su vida tampoco tendrá el poder para derrotarle. (Líder, haga una
pausa).
2)
recuerde que:
- ya ha aguantado otros tiempos de presión,
- los ha sobrevivido y
- los ha vencido y *que hoy, usted puede hacer lo mismo con cualquier magnitud de presiones
que se le presenten. (Líder, haga una pausa aquí).
En otras palabras, recuerde sus victorias del pasado.
3)
recuerde que tiene que activar su dependencia de Dios lo más pronto posible. (Líder, haga una pausa).
4)
recuerde que tiene que estar determinado desde el principio de su crisis a no entregar su victoria al
temor, al pánico o a la presión. (Líder, haga una pausa).
5)
recuerde que aunque las presiones de la vida tienen el potencial de sacarle de las zonas de
comodidad:
a) Dios está con usted,
b) su fe, espera y determinación de ganar la batalla están trabajando a su favor, y
c) no está perdido en la confusión, sentimientos ni vientos de adversidad, aunque parezca que es
así. (Líder, haga una pausa).
En fin, siempre tome en cuenta las palabras de Jesús: “He aquí yo estoy con ustedes todos los días, hasta
el fin del mundo. Amén”.
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