Posnacionalismo
El postnacionalismo o no nacionalismo describe el proceso por el cual las naciones estados e identidades nacionales pierden su importancia relativa frente a entidades supranacionales y mundiales. Aunque el postnacionalismo no es estrictamente el antónimo de nacionalismo, ambos términos y sus presunciones asociadas son antitéticas.El humanismo secular pone el centro de atención en la persona y en su desarrollo libre y equitativo. Por tanto, hace hincapié en la ciudadanía y en los derechos humanos vinculados a ella y de que toda persona goza, pues según esta corriente de pensamiento son universales, de acuerdo con la libertad y el libre desarrollo de la personalidad e identidad de que goza cada una de las personas debido a su naturaleza humana. Por ello, los estados-nación coartan las posibilidades de elección e intentan imponer un patrón común a un grupo de personas. Por ello, y tras el proceso de la globalización, las corrienes postnacionalistas o postmodernistas entienden que la época de los estados-nación hay que dejarlos atrás y que hay que caminar hacia un mundo de soberanías compartidas, pues ya no existen las soberanías independientes absolutas, el mundo está interconectado y hay que dotarlo de estructuras de gobierno y administrativas globales y democráticas más allá de las diferencias coyunturales de raza, religión, sexo u otras identidades particulares.Varios factores contribuyen a dar forma al postnacionalismo, principalmente económicos, políticos y culturales.La globalización creciente de factores económicos, como la expansión del comercio internacional de materias primas, bienes manufacturados y servicios, y la importancia de corporaciones multinacionales e internacionalización de mercados financieros, ha trasladado el énfasis desde las economías nacionales a economías globales. Al mismo tiempo, el poder político está siendo transferido parcialmente de autoridades nacionales a entidades supranacionales, como las Naciones Unidas, la Unión Europea, el Tratado de Libre Comercio de América del Norte o la OTAN. En el ámbito cultural, los medios de comunicación de masas e industrias de entretenimiento tienen una difusión cada vez menos acotada por las fronteras nacionales, lo que facilita la formación de tendencias y opiniones a escala mundial. La migración de individuos o grupos entre países contribuye a la formación de identidades y creencias postnacionales, aunque los lazos identitarios a menudo permanezcan asociados a procedencias nacionales y étnicas.