Estatua cúbica
La estatua cúbica fue un estilo estatuario egipcio que apareció a comienzos del Imperio Medio (c. 2040 - 1795 a. C.); tuvo una larga duración, como muestra la estatua de Uahibra, gobernador del Alto Egipto durante el Periodo tardío (c. 672 a 525 a. C.). Representaba a una persona sentada, casi siempre un varón, con las rodillas dobladas y juntas y los brazos cruzados por encima de ellas. A menudo vestía una larga túnica, de modo que sólo la cabeza y los pies identificaban en el cubo un ser humano. El pedestal tenía grabados jeroglíficos con información acerca del personaje representado. Este tipo de estatuas eran una especie de memorial, y los ejemplares encontrados van desde los más toscos a algunos ricamente decorados. Debido a su forma de hexaedro tenía cinco superficies para escribir en ellas. La superficie superior era la dedicada a la presentación del difunto, y sobre ella se tallaba su cabeza. A lo largo de su evolución fue adquiriendo más elementos humanos, como los brazos y, al final, las piernas. También hay algunos ejemplares de fusión entre el cubo y la estatua, como un escriba sentado en cuyo regazo hay un papiro que hace las veces de cubo.No se conoce a ciencia cierta el simbolismo de estas esculturas, que se han encontrado tanto en templos como en tumbas. Su presencia en los templos permitía al representado participar en el culto, y en las tumbas eran parte de los ritos funerarios que garantizaban la vida eterna mediante las oraciones y ofrendas de los familiares y sacerdotes. En algunas aparece en su parte trasera una fórmula que ponía al representado bajo la protección directa del faraón.