Mordedura de serpiente
Una mordedura de serpiente es una lesión resultando a menudo en heridas punzantes causadas por los colmillos del animal y, a veces, resultando en el envenenamiento, en cuyo caso se llama emponzoñamiento ofídico. Aunque la mayoría de las especies de serpientes no son venenosas y generalmente matan a sus presas por constricción en lugar de utilizar veneno, se puede encontrar serpientes venenosas en todos los continentes, excepto la Antártida. Las serpientes con frecuencia muerden a su presa como un método de caza, pero también pueden morder como defensa contra los depredadores. Dado que el aspecto físico de las serpientes venenosas puede variar, no existe forma práctica de identificar a una especie y evaluar si se debe buscar atención médica profesional.El resultado de las mordeduras de serpientes depende de diferentes factores, incluyendo de la especie de serpiente, el área del cuerpo afectado, la cantidad de veneno inyectado, y el estado de salud de la víctima. Sentimientos de pánico y terror son comunes después de una mordedura de serpiente, y pueden producir un conjunto característico de síntomas mediados por el sistema nervioso autónomo, como latidos acelerados del corazón y náuseas. Las mordeduras de serpientes no venenosas también pueden causar lesiones, a menudo debido a las laceraciones causadas por los dientes de la serpiente, o por una infección resultante. Una mordedura puede también desencadenar una reacción anafiláctica, la cual es potencialmente mortal. Recomendaciones de primeros auxilios para las mordeduras de serpientes dependen de las especies que habitan en la región, ya que los tratamientos eficaces para las mordeduras infligidas por algunas especies pueden ser ineficaces para las de otras especies. El número de muertes atribuidas a las mordeduras de serpientes varía mucho por zona geográfica. Aunque las muertes son relativamente raras en Australia, Europa y Norteamérica, la morbilidad y mortalidad asociadas con las mordeduras de serpientes es un serio problema de salud pública en muchas regiones del mundo, particularmente en las zonas rurales que carecen de servicios médicos. Además, mientras que el sur de Asia, el sudeste de Asia y África subsahariana reportan el mayor número de mordeduras, también hay una alta incidencia en los Neotrópicos y otras regiones ecuatoriales y subtropicales. Cada año, decenas de miles de personas mueren a causa de mordeduras de serpientes, aunque el riesgo de una mordedura puede reducirse con medidas preventivas, como el uso de calzado de protección y evitar las zonas de que se sabe que están habitadas por serpientes peligrosas.