Blanco (persona)
El término blanco (también persona blanca o raza europea) generalmente se ha utilizado para designar a personas cuya tonalidad de piel clara suele asociarse a poblaciones de origen europeo. Aunque literalmente implica cuestiones externas como la piel clara, forma y color del cabello y los ojos, entre otras, se ha usado de distintas maneras en diferentes periodos históricos y lugares. Al igual que ocurre con otras palabras comunes para las etnias, su definición precisa puede ser confusa.La antropología clásica definía a una población como caucásica si presentaba ciertas características como variaciones en la forma, el tamaño y el color de los ojos (azules, verdes, color miel y castaños) y en la coloración del pelo (amarillo —con excepción, en cierto grado, de los australoides—, rojo o diversas coloraciones dentro del marrón). También los blancos compartirían otras características como más vello facial y corporal en relación con otras etnias. Por esta característica, se creyó durante mucho tiempo que el grupo de los ainu tendrían ascendencia caucasoide.Hoy en día también se tienen en cuenta otros criterios genéticos, pero la definición es compleja, entre otras cosas por la cantidad de poblaciones que presentan mestizajes de las clásicamente consideradas como grupos étnicos. En genética humana, los haplogrupos R e IJ son los haplogrupos del cromosoma Y humano predominantes y muy difundidos en toda Eurasia Occidental, desde Europa hasta la India. Por otro lado, la genética mitocondrial revela que los linajes maternos predominantes en Eurasia occidental se denominan HV, JT y Uk. Sin embargo, es a partir de la propia genética desde donde se señala que, aunque las razas existen, biogenéticamente no existe un único marcador que defina la racialidad, sino varios.