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Octubre
28
2003
Conferencias emitadas por la radio- Dar AlfatwaHechos científicos en el Qur'an y la Sunna - (30-03)
Allah es quien elevó los cielos
Las alabanzas a Allah, Señor de los mundos; y la paz y las bendiciones de Allah
sean sobre nuestro Profeta Muhammad, quien creyó en la promesa de Allah y es
el digno de confianza. ¡Oh Allah! Sabemos solamente lo que tú nos has enseñado;
eres el Omnisciente y el Sapientísimo, ¡Oh Allah! Enséñanos lo que nos sea útil, y
ayúdanos a sacar provecho de lo que nos has enseñado; concédenos más
sabiduría; revélanos la verdad, y ayúdanos a salvaguardarla; revélanos la maldad
y ayúdanos a evitarla. Conviértenos en personas que apliquen lo mejor de Tus
enseñanzas, y admítenos por tu misericordia en la compañía de tus nobles
siervos.
El periodista:
En el nombre de Allah, el Misericordioso, el Compasivo; y la paz y las bendiciones
de Allah sean sobre nuestro Profeta Mohammad. Queridos hermanos, esta es una
nueva serie de nuestro programa “los milagros científicos en el Qur’an y en la
sunnah” que versa sobre los milagros científicos que podemos hallar en el noble
Qur’an, en el universo, así como en la creación de Allah. Si observas la creación
de Allah el Altísimo, verás una mano sapientísima, misericordiosa y poderosa, que
lo controla todo. Y si observas su estructura, verás la grandeza y la perfección.
Nuestro invitado de hoy es el Dr. Rateb Nabulsi, profesor en la Facultad de
Pedagogía de la Universidad de Damasco, Imam y profesor de ciencias islámicas
en varias mezquitas de Damasco. Bienvenido Doctor.
Ante todo doctor hemos notado que en su libro “los milagros científicos en el
Qur’an y la sunnah” menciona con frecuencia la ayat de la surah del Trueno:
« Allah es quien elevó los cielos sin pilares visibles. »
¿Qué interpretación daría a esta ayat?
Dr. Nabulsi:
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Allah es quien elevó los cielos
Las alabanzas a Allah, Señor de los mundos; y la paz y las bendiciones de Allah
sean sobre nuestro Profeta Mohammad, quien creyó en la promesa de Allah y es
el digno de confianza.
Señor Abdelhalim, que Allah le recompense por estas conferencias. Esta ayat
necesita una introducción. Dije en la primera conferencia que la mente humana es
un medio para conocer a Allah, pero su capacidad es limitada; es decir, si la
mente observa detenidamente el universo llegará a la conclusión de que este
universo necesita un creador y, entonces, se preguntará ¿Quién lo ha creado?
Aquí viene el Qur’an y contesta a esta pregunta y nos informa que Allah es el
creador que elevó los cielos como dice la surah del Trueno:
« Allah es quien elevó los
cielos sin pilares visibles.»
Esta ayat es en sí una
contestación a la pregunta de
la mente. De ahí que deba
haber
una
complementariedad entre la
mente y el Qur’an; explicaré
esto con un ejemplo: si vas a
una universidad y observas
sus edificios, salas de
conferencias,
laboratorios,
residencia de estudiantes, jardines y estadios deportivos, tu mente llega a
decenas de conclusiones. Y si observas bien, verás una precisión en la estructura;
verás que las salas de conferencias están insonorizadas, que las pizarras se
pueden borrar automáticamente, que la residencia de estudiantes está rodeada de
jardines, que la universidad está ubicada lejos del ruido, que los laboratorios son
amplios y bien equipados, y podrás concluir que todo eso es el fruto de una
dirección, de un plan y de una arquitectura, pero ¿podrás saber quién es el rector?
¿Podrás saber el estatuto de la universidad, cuando se gradúan los estudiantes, o
el nombre de los profesores? Imposible, la observación de estos edificios te indica
la existencia de arquitectos y científicos, pero en cuanto a quiénes son o cuáles
son sus nombres, la respuesta la encontrarás en el folleto que contiene la
información de esa Universidad. Por lo tanto, la observación del universo queda
completada con el Qur’an, y la meditación sobre la obra de Allah, por lo que Allah
nos ha revelado.
Otro punto a tener en cuenta es que lo revelado te indica lo que Allah quiere de ti,
por qué te creó, por qué hizo que la vida fuese limitada y breve, un mero pasaje
hacia la otra vida. Todas estas preguntas están contestadas en el Qur’an, ya que
no podemos servirnos solamente de nuestra mente para llegar al “Iman”; de la
misma forma que el ojo humano no tiene ningún valor sin la existencia de la luz, la
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Allah es quien elevó los cielos
mente no tiene valor sin la existencia de lo revelado por Allah; el Altísimo ha dicho
en la surah de El Arropado, ayaat 18-26:
« Ha reflexionado y tomado una decisión, pero ¡qué decisión! ¡Maldito sea!
Sí, ¡qué decisión! ¡Maldito sea! Luego, ha mirado. Luego, se ha puesto
ceñudo y triste. Luego, ha vuelto la espalda, lleno de altivez. Y ha dicho:
«¡Esto no es sino magia aprendida! ¡No es sino la palabra de un mortal!» ¡Lo
entregaré al ardor del saqar! »
La mente es limitada;
de la misma manera que el
ojo necesita la luz, la mente
necesita el Qur’an. la mente
llega a la conclusion de que
este universo necesita un
creador, y el Qur’an le
muestra quién es ese
creador al decir :
« Allah es quien elevó los
cielos sin pilares visibles.»
Ahora bien, Allah elevó los
cielos con pilares invisibles, esta ayat es la mejor explicación para la teoría de la
gravedad.
En el universo existen fuerzas de atracción invisibles.
Si cogemos un papel y le metemos un clavo y debajo del papel, sin mostrar el
imán, lo desplazamos, veremos que el clavo también se desplaza. Es decir entre
el clavo y el imán existe una fuerza de atracción invisible, lo mismo ocurre entre el
ser humano y la tierra. Básicamente ¿qué es el peso de un ser humano? Es la
fuerza de atracción que ejerce hacia el centro de la tierra; prueba de ello es que
entre la tierra y la luna no hay gravedad por lo que desaparece el peso, y por eso
vemos que los astronautas flotan en el aire.
Como todo el mundo sabe, la tierra gira alrededor del sol a una velocidad de 30
km por segundo; es decir que todos nosotros, desde que comenzó esta
conferencia hasta ahora, hemos viajado cientos de miles de kilómetros. En este
movimiento de traslación, la tierra describe un movimiento elíptico con dos radios:
uno corto y otro largo. Es decir llega un momento en el que la tierra alcanza su
máxima proximidad al Sol y se dice que pasa por el perihelio, y ya sabéis que
según la ley de gravitación universal, cuando disminuye la distancia aumenta la
fuerza de gravedad. Por ello, cuando la tierra se acerca al sol aumenta su
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Allah es quien elevó los cielos
velocidad automáticamente, como si fuera un ente sabio, para equilibrar la fuerza
de la gravedad y conservar su trayectoria.
¿Creeríais si os dijera que un
coche puede circular, parar
en un semáforo o girar a la
derecha, sin conductor? Sin
duda que no, ya que es algo
imposible. ¿Por qué la tierra
aumentó su velocidad y
continúo
su
trayectoria?
Porque existe un creador que
la guía: Allah. Y lo más
increíble es que la velocidad
no aumenta de un golpe,
sino poco a poco para que no se derribe lo que está en la superficie; exactamente
como si un camión cargado de cajas acelerase súbitamente ¿qué le pasaría a su
mercancía? las cajas se caerían sin ninguna duda. La causa reside en la fuerza
de la inercia o del movimiento; el cuerpo dinámico rechaza la inercia y vice-versa.
¿Por qué existe el cinturón de seguridad en el coche? Porque si el coche frena
súbitamente, el cuerpo seguirá el movimiento del coche produciéndose un
accidente, pero gracias al cinturón que bloquea ese movimiento, el cuerpo no
sufre daño alguno.
Ahora la tierra sigue su movimiento de traslación y llega a la parte más lejana del
sol, es decir al afelio, la gravedad que ejerce el sol disminuye y aumenta el riesgo
de que la tierra se desvíe de su órbita. Es otro peligro, el primero era que el sol
pudiera absorber la tierra y quemarla totalmente, el segundo es que la tierra
abandone su órbita y se pierda en el espacio exterior con una temperatura de
menos 270 grados. ¿Entonces, que sucede en este tramo? la tierra disminuye su
velocidad automáticamente para lograr un equilibrio óptimo entre su velocidad y la
fuerza de gravedad, de modo que pueda seguir en su órbita. Y esta
desaceleración, de la misma manera que la aceleración, transcurre poco a poco,
de ahí el nombre de EL MISERICORDIOSO.
El periodista:
Doctor, volvemos a nuestro tema del cielo y sus pilares invisibles. ¿Cree usted
que esos pilares son la fuerza de la gravedad?
Dr. Nabulsi: Si la tierra se desliga de la gravedad del sol y se pierde en el espacio
exterior, para devolverla a su órbita necesitaríamos un millón de millones de
cables, y todos sabemos que el cable más potente que existe en la tierra es el
cable de acero trenzado, de este tipo de cables necesitaríamos un millón de
millones con un diámetro de cinco metros cada uno. Un cable come este puede
soportar dos millones de toneladas y debemos colocar un millón de millones de
estos cables en la tierra y esto dificultaría cualquier movimiento sobre su faz. Este
es el significado de la ayat:
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Allah es quien elevó los cielos
« Allah es quien elevó los cielos sin pilares visibles. »
Signos de Allah en el universo:
El periodista:
Después de tratar el tema de la fuerza de gravedad entre el cielo y la tierra,
hablemos ahora del significado de la ayat:
“Por el cielo con sus ciclos”
Dr. Nabulsi:
Al principio se creía que esta ayat se refería al vapor de agua cuando sube al
cielo y vuelve a la tierra en forma de lluvia, luego descubrieron que existe una
capa en el cielo llamada éter que devuelve las ondas provenientes de la tierra. Sin
esta capa no hubieran funcionado las ondas de radio. Por último, los científicos
descubrieron que cualquier estrella o planeta se mueve en circuitos partiendo de
un punto definido y volviendo a ese mismo punto. Es decir, cada planeta se
mueve en una órbita específica. Si imaginamos que los planetas de este universo
dejaran de moverse, desaparecerían todos por la ley de gravedad, ya que los
planetas más grandes absorberían a los más pequeños y la vida desaparecería.
Este movimiento de los planetas en circuitos definidos es lo que da un orden al
universo.
El periodista:
Gloria a Allah que nos dio
señales milagrosas en su
Qur’an hace ya más de 1400
años y que ahora son
descubiertas
por
los
científicos
utilizando
microscopios
y
transbordadores espaciales.
Dr. Nabulsi:
Es lo que dice Allah en la surah de Fussilat, ayat 53:
« Les mostraremos Nuestros signos fuera y dentro de sí mismos hasta que
vean claramente que es la Verdad. »
En esta ayat Allah usa el verbo “mostrar” en futuro dirigiéndose a los creyentes y
al mismo tiempo a toda la humanidad.
El periodista:
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Allah es quien elevó los cielos
¡Gloria a Allah! Queridos hermanos y hermanas, continuaremos en la próxima
conferencia con esta reflexión sobre la obra de Allah y sobre sus milagrosas ayaat
con el Dr. Rateb Nabulsi.
traducción : FAYçAL CHEHAM
auditoría
: Abu Bakr Gallego
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