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ENERO DE 2011
Candidiasis oral y
el enfermedad del VIH
La candidiasis oral, llamada también muguet oral, es una infección por hongos que
se presenta en la boca y/o la garganta. Por lo general es la primera señal de que la enfermedad del VIH está avanzando a una etapa más severa, particularmente cuando se
trata de infecciones que son recurrentes o que no responden bien al tratamiento.
Aunque puede producirse a veces sin la
presencia de síntomas, los más habituales
son molestia y ardor en la boca y la garganta, y una alteración en el sentido del gusto
(que a menudo se describe como “mal sabor”). También son frecuentes unas placas
cremosas de color blancuzco o amarillento en la boca y la garganta, que pueden
ser eliminadas al rasparlas suavemente.
Pueden estar acompañadas de rajaduras,
enrojecimiento, dolor e inflamación en
las comisuras de la boca. Un caso crónico
puede incluir llagas bucales.
Una afección más seria de la garganta y la tráquea, llamada candidiasis esofágica, está en la lista de enfermedades
que determinan la presencia del SIDA, y
afecta a 1 de cada 5 personas con SIDA.
Suele presentarse en conjunto con la
candidiasis oral. Los síntomas incluyen
dolor de pecho, náuseas y dolor o dificultad para tragar, lo que hace que las
personas no quieran comer.
La candidiasis oral muy rara vez
ocurre si el recuento de células CD4 se
encuentra por encima de 500. Los episodios son más comunes a medida que
el recuento se acerca a 100. La candidiasis oral puede ser más difícil de tratar
cuando el recuento de células CD4 cae
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por debajo de 50. Las infecciones por
hongos recurrentes son muy comunes
en los niños que viven con el VIH, especialmente el muguet oral.
Causa
La candidiasis oral es causada por un
hongo llamado Candida. Este hongo
siempre está presente en pequeñas cantidades en la boca, la vagina, el tracto
digestivo y la piel. En las personas sanas las bacterias “amistosas” y el sistema
inmunológico impiden que el hongo
produzca la enfermedad. No obstante,
cuando el sistema inmunológico se encuentra debilitado es más factible que
la Candida se desarrolle y produzca la
enfermedad.
Ciertos medicamentos pueden alterar
los organismos naturales que se encuentran en la boca, lo cual puede permitir
el crecimiento de la Candida. Entre ellos
está el uso extendido de antibióticos, esteroides y anticonceptivos orales con un
alto contenido de estrógeno. Otros factores que pueden provocar la candidiasis
incluyen la diabetes, el embarazo, deficiencias de hierro, ácido fólico, vitamina
B12 o zinc y el uso de antihistamínicos.
La quimioterapia para tratar el cáncer,
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así como el estrés y la depresión también
pueden causar la candidiasis.
Diagnóstico
Las afecciones orales generalmente son
diagnosticadas por su apariencia y sus
síntomas. El diagnóstico se puede confirmar raspando una lesión y examinándola con el microscopio. Generalmente
se llevan a cabo otros exámenes de laboratorio si la infección no desaparece
después de un tratamiento. Es posible
que se use una endoscopia para detectar
señales de infección en la tráquea.
Tratamiento de la
candidiasis oral
Un tratamiento tópico (el cual se aplica solamente en la zona afectada) es la
primera opción para la candidiasis oral
y usualmente funciona en los casos de
leves a moderados. Estos incluyen pastillas para chupar (también llamadas
“trouches” en Estados Unidos) y enjuagues bucales.
Se toman una o dos pastillas para
los síntomas orales de 3 a 5 veces al día.
Se deben chupar lentamente y no masticar ni tragar enteras. Algunas marcas
comunes son Mycelex (clotrimazola) y
Mycostatin (nistatin).
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Los enjuagues bucales son menos eficaces que las pastillas ya que están en contacto con la boca sólo durante un breve
lapso de tiempo. Sin embargo pueden resultar la mejor opción para personas que
tengan la boca muy adolorida y muy seca.
Los enjuagues se deben hacer circular en
el interior de la boca todo el tiempo que
sea posible y luego tragarse. Se toman al
menos 4 veces al día después de que desaparezcan los síntomas.
Los tratamientos sistémicos (que
actúan en todo el cuerpo) se emplean
para brotes recurrentes o que no desaparecen con un tratamiento tópico, y se
utilizan para la candidiasis esofágica. El
fluconazol (Diflucan) comprimidos son
tan eficaces como las pastillas, y son más
fáciles de tomar genearlly y tolerar.
Tres medicamentos contra los hongos han sido aprobados para su uso en
el tratamiento de la candidiasis oral
y esofágica: Estos incluyen el Nizoral
(ketoconazola, tomado con bebidas o
alimentos ácidos), el Sporanox (itraconazola, que tiene un gran potencial de interactuar con los medicamentos contra
el VIH) o el Diflucan (fluconazola, que
suele reservarse para un uso posterior).
Efectos secundarios e interacciones con otros medicamentos
Algunos efectos secundarios comunes
de los medicamentos con azola oral
(ketoconazola, fluconazola e itraconazola) son náuseas, vómito y dolor de
estómago. Otros incluyen dolor de cabeza, mareos, somnolencia, fiebre, diarrea, salpullidos y cambios en el sentido
del gusto. El problema más grave es la
toxicidad en el hígado, pero esto ocurre
raramente y generalmente es reversible
después de que se suspende el medicamento. De todas maneras, las funciones
hepáticas deben ser vigiladas cuidadosamente, de manera particular en el caso
de la ketoconazola.
La amfotericina B intravenosa puede
causar efectos secundarios graves, que
incluyen toxicidad en el riñón. Los efectos secundarios más frecuentes son fiebre, temblores, escalofríos, alteración de
la presión arterial, náuseas, vómito y dolores de cabeza. Por lo general estas reacciones son severas después de las primeras dosis y van disminuyendo a medida
que avanza el tratamiento. Las versiones
liposomales del medicamento (como el
Abelcet) son por lo general menos tóxicas e igualmente eficaces que la formulación anterior. La amfotericina B intravenosa solamente debe ser empleada en
los casos en los que exista un riesgo de
muerte directo o cuando hayan fallado
todos los otros tratamientos.
Es posible que haya muchas interacciones
cuando se toman los medicamentos “azola”
y la amfotericina B. Algunos pueden causar
problemas graves del hígado o los riñones.
Tenga claro todos los medicamentos que
toma y consulte a un farmacéutico acerca de
las posibles interacciones.
El embarazo y los medicamentos
antimicóticos (contra los hongos)
Las pautas federales para la prevención de infecciones
oportunistas recomiendan no usar medicamentos
contra los hongos durante el embarazo debido a posibles defectos de nacimiento. Más aún, establecen que
se suspendan los medicamentos con azolas en las mujeres que queden embarazadas, y que las mujeres que
utilicen dichos medicamentos usen métodos eficaces
para el control de la natalidad.
Las terapias tópicas pueden ser preferibles para las
mujeres en embarazo. Para el tratamiento sistémico
las pautas sugieren el uso de la amfotericina B, especialmente durante el primer trimestre.
Aunque no se han llevado a cabo estudios formales,
la amfotericina B ha sido utilizada por mujeres embarazadas aparentemente sin que se produzcan daños al
bebé, aunque este medicamento tiene efectos secundarios serios, que incluyen la toxicidad del riñón y la
anemia.
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1-800-822-7422
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Prevención
El uso de medicamentos antimicóticos para prevenir las infecciones por
hongos debe hacerse con mucha precaución y suele disuadirse, especialmente el de la fluconazola. Esto hace que
el tratamiento de las infecciones nuevas
y más agresivas sea más difícil y en muchas oportunidades que no tenga éxito.
Sin embargo, esto puede no ser posible
para algunas personas con infecciones
recurrentes que deben permanecer en
terapias a largo plazo para prevenirlas.
Recursos
La candidiasis sistémica
www.projectinform.org/publications/
candidas_sp/
La candidiasis vaginal
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candidav_sp/
Consejos para prevenir las infecciones por hongos
En general, la mejor manera de prevenir las infecciones por hongos es
comer sana y regularmente, evitar el
consumo excesivo de azúcar, y evitar
o disminuir el alcohol, la cafeína, los
lácteos y los cigarrillos.
• Disminuya o evite los azúcares (el
sirope de maíz y de arce, la glucosa,
la fructosa y la sucrosa.) Los azúcares constituyen alimento para la
Candida y la ayudan a crecer.
• Disminuya o evite el alcohol. El
alcohol se convierte en azúcar y
promueve el crecimiento de la
Candida.
• Tome leche o coma yogur que
contengan la bacteria acidófilo.
El acidófilo es una bacteria “amistosa” que mantiene el cuerpo en
equilibrio y es capaz de rechazar
bacterias y hongos enemigos
como la Candida.
• Coma abundantes alimentos que
impidan el crecimiento de levaduras. Algunos nutricionistas creen
que el ajo posee algunas propiedades naturales que actúan contra
los hongos. Se considera que el
ajo fresco es mejor, aunque las píldoras de ajo comerciales pueden
ayudar a reducir el olor. (NOTA: Se
desconoce si comer ajo en abundancia interfiere con los medicamentos
contra el VIH, pero puede aumentar el riesgo de efectos secundarios
del uso del Norvir.
• Los antibióticos pueden llevar
a infecciones por levaduras. Las
bacterias “amistosas” se encuentran naturalmente en el organismo
y ayudan a eliminar las bacterias
dañinas. Los antibióticos comunes
matan estas bacterias, permitiendo así que crezca la levadura,
especialmente en la vagina.
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contra el VIH/SIDA: 1-800-822-7422 (gratis)
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el tratamiento de la candidiasis oral
NOMBRE
DOSIS
EFECTOS SECUNDARIOS
NOTAS
clotrimazola (Mycelex) trouches
10mg 4–5 veces al día durante 1–2 semanas
Puede alterar el sentido del gusto y producir malestar
Chupar lentamente; no
mascar ni tragar entera
nystatin (Mycostatin) pastilla
1–2 pastillas de 4–5 veces al día
Puede causar irritación en la boca; náuseas
Chupar lentamente; no
mascar ni tragar entera
nystatin (Mycostatin) suspensión oral
5ml cuatro veces diarias durante 7–14 días
Puede producir malestar
estomacal
Poner a girar en la boca
antes de tragar
Terapias Tópicas >>>
Terapias Sistémicas >>>
ketoconazola (Nizoral) 200mg diarios, 7–14 días; Náuseas, vómitos, malestar Observar las funciones;
tomar con comida
itraconazola (Sporanox)
100 mg diarios, 7–14 días; Náuseas, vómitos, malestar Observar las funciones;
tomar con comida
fluconazola (Diflucan)
200mg diarios, 7–14 días; Náuseas, vómitos, malestar Observar las funciones
AmB (Fungizone)
AmB lipid complex
(Abelcet)
100mg a day 4 times diaria (suspensión oral); 0.5mg/kg al día, 14–21 días (intravenoso)*
Para la versión intravenosa: toxicicidad en el riñón, fiebre, escalofríos, sudores
En el caso de la suspensión
before swallowing;
observarlasfunciones hepáticas
Otra Terapia >>>
gentian violet Aplicar en las áreas afectadas Puede causar inflamación
(solución en agua al 1%)
2 veces diarias durante 3 días
Disponible sin prescripción;
puede resultar útil para
infecciones recurrentes durante un mes; aplicación;
puede ser desagradable
* Candidiasis esofágica
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